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POV Yerin

Me desperté sintiéndome incomoda, miré a mi alrededor y las demás seguían durmiendo, busque el reloj, las 3:34 am. Suspiré mientras me levantaba, hace mucho no me despertaba tan temprano, aunque era extraño, no había tenido ninguna pesadilla pero por alguna razón me sentía intranquila.

Decidí caminar un poco, como no podíamos salir del hotel me dirigí hacia la terraza, necesitaba algo de aire fresco. Caminaba distraídamente por los pasillos hasta llegar al ascensor y apreté el botón, mientras esperaba no pude evitar pensar en mi discusión con Eunbi, había actuado muy extraño, llevaba comportándose así desde que habíamos llegado para el torneo. Tal vez era mucha presión para ella, pero eso no justificaba que actuara como una perfecta imbécil. Subí al ascensor y esperé a que llegara al último piso, al bajarme note a alguien parado en la terraza, inspire profundamente, reconocería esa figura en cualquier lado.

Me acerque lenta y silenciosamente- ¿No puedes dormir?- se sobresaltó al oírme, dio la vuelta y me observo entre sorprendida, enojada y curiosa.

-¿Tu que estás haciendo despierta a esta hora?- miro su reloj- si mal no recuerdo tienes un enfrentamiento dentro de 4 horas- suspiré, no había respondido mi pregunta, aunque era evidente que no lo hiciera.

-Necesitaba algo de aire fresco- me pare a su lado observando el oscuro cielo, sin tocarla- ¿me vas a decir que te pasa?, has estado actuando muy extraño desde que llegamos hace dos días, quería darte tiempo y espacio porque pensé que eran cosas de Sargento- me gire hacia ella, tenía la mandíbula apretada y la mirada perdida- Pero es evidente que lo que te pasa no es solo por el torneo.

-No es momento para hablar de eso- su respuesta me enfureció.

-Lo estás haciendo otra vez- me miró frunciendo el ceño- cuando tienes algún problema o preocupación huyes de mi- le tome el rostro entre mis manos- sabes que no voy a dejar que hagas eso, eres mi novia y estoy preocupada por ti- intento apartar la mirada pero no la dejé- Mírame, ¿si no hablamos ya, entonces cuándo?- tomo mis muñecas y separo mis manos de su rostro lentamente.

-Ahora no- me dio la espalda y se fue, dejándome parada en el techo del hotel a plena madrugada con el corazón apretado.

Mire hacia otro lado intentando contener las lágrimas, pero el sol comenzaba a asomar en el horizonte tiñendo el cielo de un color naranja rojizo. Mordí mi labio mientras lloraba en silencio viendo el hermoso amanecer.

Nos dirigíamos a Jamsil, para los primeros enfrentamientos de artes marciales, Kim y yo solo tendríamos una lucha, pero el resto debían enfrentarse a dos oponentes si ganaban la primera pelea. En todo el camino Eunbi no nos dijo nada, esta vez Eunseo iba con nosotros en el mismo bus, mas bien van, mientras que Eunha iba con las demás en el otro.

-Antes que nos bajemos quisiera decir algo- la doctora hablaba desde el frente atrayendo la atención de todas- Sé lo importante que es el torneo, pero quiero que prioricen su salud y seguridad primero- le dio una mirada extraña a Eunbi- espero lo tengan en cuenta y no se sobre esfuercen- nos sonrió de esa manera que solo ella sabía- ahora bien, vamos a patear traseros.

No pude evitar reír- Tu no vas a patear nada- le reproche entre risas- es más, no creo que le hagas daño ni a una mosca- nos bajamos del vehículo entre risas, esa pequeña charla de Eunseo había aligerado bastante el ambiente y se lo agradecía ya que Eunbi no parecía querer hablarnos... Y esa mirada que le había dado... algo pasaba y la coreana lo sabía.

Entramos al gimnasio, donde ya estaban ubicados los diferentes cuadriláteros, 3 en total, al parecer se realizarían varios enfrentamientos a la vez. Según las instrucciones del personal pasamos a los camerinos para cambiarnos, no había restricción en el tipo de vestuario que se quisiera utilizar, siempre y cuando no fuera peligroso para ninguna de las participantes. Todas las chicas de nuestra academia optamos por el traje de entrenamiento, una camisa manga corta negra, pantalón negro y debido a las reglas teníamos que luchar descalzas para evitar algún tipo de ventaja con el calzado. Eran muy estrictos con respecto a eso y era un fastidio.

Mi Sargento (Sinrin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora