Los celos de Victor (Victuri)

Descubrimiento

—¿Victor? ¿Qué haces?

El mayor volteó. Era Yuri. Este se mantenía estático, temblando, a varios metros de ahí. De pronto, reaccionó. Miró el arma en su mano. Un atemorizado hombre se mantenía tirado, rogando por que este no fuera s disparar.

—Es que él estaba atacando a una chica y...

El menor se asustó tanto que empezó a llorar, por el miedo. Victor, indeciso, miró al hombre bajo la pistola y luego a él. Luego de nuevo al hombre y luego a Yuri de nuevo, quien había empezado a correr. Finalmente tomó la decisión de soltarla y correr tras él.

—¡Espera! —gritó.

Los dos corrieron por varios minutos. El pelinegro se las arregló para llegar primero a la casa, se encerró en el baño y puso el seguro. Victor azotó la puerta tan pronto entro en la casa, gritando el nombre de su amado, buscándolo por todos lados.

El otro se hizo bolita junto al inodoro, mordiéndose el labio para no llorar. Desafortunadamente, esto no le funcionó mucho, puesto que aún podía escucharse un poco su llanto.

—Te encontré. —Dijo él, corriendo hasta el baño, tratando de abrir la puerta, fallando en el intento.

Yuri gritó, tan pronto escuchó a este golpear la puerta.

—¡Cielo, abre, por favor! —Gritó.

—¡No! —Dijo el otro.

—Por favor... Yuri.

—Lo ibas a matar, ¿no?

—Era un hombre malo. ¿No te alegra que haya menos hombres malos en el mundo?

—¿Qué clase de pregunta es esa? —dijo, aterrado.

—Sal, por favor. Quiero hablar, es todo. Cuando era niño, ese hombre, junto con otros, le hicieron mucho daño a mi familia.

Hubo silencio por unos minutos, pero luego, el otro abrió, lentamente.

—¿Qué sucedió?

—Yo no trngo padres por culpa de ellos. Sólo quería asegurarme de que no volviera para hacernos daño. Podría lastimarte y yo no quiero eso. —dijo, con una expresión triste.

Yuri salió del baño, acercándose a él, con lentitud.

—No sabía que habías pasado por algo como eso.

—No quería preocuparte.

—Oh, Victor. —dijo, lanzándose a sus brazos, triste. —Debió ser muy duro.

El otro, algo confundido por su reacción, también lo abrazó.

—Pero no tienes que hacer algo como eso. Me asustaste. Estarás bien. Podemos llamar a la policía. Por favor. No vuelvas a hacer algo así. —dijo el menor.

Él soltó un suspiro.

—Tienes razón... Será mejor llamarlos. Tú ve a dormir. Yo les avisaré.

El menor asintió, separándose de este.

—Todo va a estar bien. —dijo este.

—Lo sé. —respondió el otro, con una sonrisa.

Las luces se apagaron, excepto la de la cocina, donde estaba Victor. Este miraba el teléfono, estático.

—Ni la cárcel podrá castigarlos como lo merecen. —dijo, entrecerrando los ojos, molesto. —Cazaré a cada uno de los que queden de ustedes y pagarán por esto.

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Muchos me están reclamando por no haber subido capítulo en un tiempo. Les recomiendo que revisen los anteriores. Así se darán cuenta de que los he estado editando, para que tengan una mejor calidad y se ajusten mejor a la historia.

También recuerden que el trato era que si mis otras historias eran compartidas y tenían interacción, entonces yo estaría haciendo más capítulos, lo cual no ha sucedido.

Por último, soy escritor, no sólo de Wattpad, sino de libros, formalmente. He estado muy ocupado con eso últimamente, ya que los fanfics son mi pasatiempo, pero mis libros son mi trabajo. Espero que lo entiendan. Les agradezgo por su comprensión.

Recuerden que entre más interacción tengan las otras historias, más rápido publicaré nuevos capítulos y es probable que sean mucho más extensos en un futuro. Gracias nuevamente por continuar leyendo esta historia, a pesar de los años que esta ya tiene.