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Esa misma tarde, después de unas clases. Fueron a pasear al parque que quedaba cerca. Habían unas cuantas bancas ocupadas, había demasiados árboles frondosos, los pájaros volaban y se posaban en algunas ramas o en el césped. Un carrito de helados estaba por ahí, compraron para cada uno y fueron a sentarse alrededor del tronco del árbol más frondoso que vieron.

- ¿Vas a comerlo frente a mí? - comentó Kakashi.

- Me las puedo ingeniar para comerlo sin que te des cuenta. Soy muy ágil en esos casos.

- ¿Por qué tanto misterio con tu rostro? ¿Acaso te da pena que lo vean?

- No es eso - corrigió -. Cuando era pequeño tuve un accidente, y me dejo una marca. No es pena, simplemente no me gusta que la vean.

- Bien. Siento y presiento que hay algo más profundo detrás de esa máscara - ambos comieron sus helados en silencio, hasta que de nuevo el silencio fue roto -. ¿Te cuento algo?

- Claro~~ - Tobi bromeaba.

- Solo Gai sabe sobre esto - hizo una pausa y analizó sus palabras -. Cuando tenía doce años: me había enamorado por completo de un gran chico.

》 Pero falleció, fue por salvarme a mi de una estúpida roca que iba a caer encima de mí. Cuatro días después mi amiga falleció por un accidente, como siempre, yo terminé a salvo. Preferiría haber muerto yo.

Al estar tan concentrado en sus palabras no se dio cuenta que Tobi lo estaba abrazando de la cintura.

- Ni se te ocurra decir que prefieres haber muerto tu - murmuró -. Tal vez fallecieron, pero solo porque haya muerto alguien no significa que no podrás salir adelante. Tuviste a Gai contigo y pudieron salir adelante: tal vez no fue fácil, pero tampoco era difícil. Me hubiera gustado estar contigo todo ese tiempo, Kakashi.

- A mí también me hubiera gustado - sonrió tras su máscara -. Pero ya estás aquí conmigo, y así lo prefiero.

- Oww~~ Me sonrojas, Kakashi - bromeó -. A mi también me encanta pasar el tiempo contigo.

El resto del día pasearon y comieron en un local de comida. Aunque Kakashi jamás pudo ver el rostro de su amigo, disfrutó del día.

▪︎~▪︎~▪︎

Pasó mes y medio y se acercaba el baile. Kakashi cada vez tenía más ansias de que llegará el baile y poder tener la oportunidad de bailar con Tobi.

Hace años no sentía ese tipo de sensaciones y emociones en él mismo. Era sorprendente para él que de nuevo un chico le haya hecho volver a sentir esas sensaciones.

Varias veces tuvo celos cuando lo veía con alguien más, también Tobi se ponía celoso, sólo que a su manera. Su manera consistía en que lo encerraba en su cuarto y le pedía que jugaran a juegos de mesa o simplemente leían.

La primera vez que sucedió eso fue porque Kakashi acompañaba a una compañera que le había invitado a bailar, pero este le rechazó y Tobi pareció escuchar todo mal.

Hasta que sus celos llevaron a confesar que ambos sentían algo por el otro.

- ¡¿Por qué eres tan ciego?! - gritaba Kakashi -. ¡Por qué no entiendes mis indirectas!

- Ay... Kakashi, no soy fácil de entender indirectas - se llevó una mano a su cabeza -. Mi pequeño cerebro no entiende, ¿qué es lo que me tratas de decir?

- ¡Me gustas! - gritó Kakashi para que le entendiera -. ¡Entiende de una buena vez!

Tobi se quedó en silencio un gran rato.

- No dirás nada... - Kakashi se levantó para dirigirse fuera de la habitación de Tobi. Pero la mano de Tobi lo detuvo.

- Kakashi, ¡tú igual me gustas! ¡Desde que te propuse ir al baile me di cuenta de mis sentimientos! - expresó feliz -. No te vayas... - lo abrazó de la cintura.

- Bobo - también lo abrazó y se recostaron. Hablaron un rato sobre la máscara de Tobi, aún quería ver su rostro. Hasta que ambos los consumió el cansancio, quedándose dormidos.

Unos día después, Kakashi recibió un mensaje de Tobi. Dejándolo feliz y entusiasmado por la intriga.

Quiero Saber Que Hay Detrás De Esa Máscara  [ ObiKaka ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora