El ultimo ángel [BTSxJiMin]

Capítulo 9

El sol aun podía verse en el horizonte, las tierras de la manada solían ser silenciosas, tranquilas y seguras para la manada; los hijos del alfa se encargaban de ello.

—TaeHyung quédate con ellos, los demás iremos, YoonGi dice que no están muy lejos—. Otro aullido rompió el silencio, haciendo que incluso las aves salieran de entre los árboles, provocando una gran parvada por encima de las copas. JiMin miró por la ventana como tres grandes lobos se adentraban rápidamente al bosque, haciéndolo tragar saliva pesadamente.

—Vamos, hay que quitarnos de las ventanas, vamos a la cochera—. TaeHyung posó su mano en la espalda baja del rubio, guiándolo hacia la puerta dentro de la casa que conectaba con la cochera. —Ellos estarán bien—.

La preocupación de JiMin cubría toda su cara, retorciendo sus manos y acomodándose el cabello con frecuencia. Sus pensamientos solo rondaban hacia el rostro que lo mantuvo cautivo por años, quien le daba sonrisas llenas de obsesión, quien le decía que era "amable", quien decía "protegerlo" de todos y su "educación" solo le causaba dolor.

—JaeBum no se detendrá—. Su cuerpo pegó un pequeño brinco al escuchar otra vez ese nombre.

—Lo sé—. JiMin era quien más lo sabía. JaeBum estaba obsesionado con él, y eso lo hacía volverse loco, no entendía que esa obsesión solo lastimaba a JiMin en vez de protegerlo como él decía hacerlo.

—¿Quién es JaeBum? —. TaeHyung se había vuelto hacía él, mirándolo amenazante, haciendo que su cuerpo se encogiese en su lugar y apretara sus manos con más fuerza. SeokJin inmediatamente corrió para ponerse delante de JiMin, protegiéndolo de la mirada del lobo.

—Aléjate, estás haciendo que se asuste—. Jin levantó un dedo, intentando advertirle al cambia formas esperando que no decidiera atacar, sabía que no podría ganar contra él.

—JiMin es la persona más segura de esta habitación—.

—Jin, está bien, no me hará daño—. La conversación de la noche anterior con HoSeok le había hecho comprender varias cosas; eran realmente posesivos con él, y aun que era algo realmente sexy, podían pasarse un poco y ser bruscos, causando que se asustara, pero HoSeok prometió que no lo lastimarían, era su pareja destinada. Tan pronto como Jin se apartó a un lado, él camino unos cuantos pasos cerca del tenso cuerpo de TaeHyung.

—Él es.... Quien me ha mantenido cautivo desde que nací—. JiMin lo había pensado, contarle todo a los hermanos, pero al mismo tiempo tenía miedo, y aunque no era lo correcto, solo contaría la verdad a medias.

—¿De qué hablas? —.

—JaeBum me encerró en un lugar desde que nací, logré escapar, llegué a ustedes, pero ahora él está buscándome—. La tensión pareció disminuir del cuerpo del más alto y con ello pudo acercarse más hasta tocar las mejillas con sus manos. Ese simple toque terminó por tranquilizar al lobo de TaeHyung, se había puesto posesivo cuando escucho el nombre de quien causaba que JiMin pusiera toda su atención, también la necesidad de proteger a su pareja y manada cegaron un poco a su lobo.

—Cariño...—.

—Está bien, ahora estoy con ustedes—. Un aullido mucho más fuerte y más largo, hizo que JiMin diera un pequeño brinco de sorpresa.

—Es papá—.

Su nariz picaba con cada paso recorrido, sabía que había alguien extraño en su territorio, pero aún no lo encontraba, eso lo ponía cada vez más molesto, su instinto de protección a su manada y pareja estaban siendo desafiados.

Las ramas y hojas crujían por el peso de su cuerpo en cuatro patas, todo su alrededor estaba llenó de lobos, sus hermanos, padre y ejecutores de la manada; por lo menos eran 12 grandes lobos, nadie podría cruzar su territorio sin notarlo.