El ultimo ángel [BTSxJiMin]

Capítulo 3

Lo que está destinado a suceder... Siempre encontrará una forma única, mágica y maravillosa para manifestarse.

JiMin miraba la puerta con nerviosismo, si bien apenas estaba agarrando confianza a aquellos hombres, no podía imaginarse a alguien más, igual de grandes e imponentes que ellos, mucho menos su padre, ¿sería muy aterrador?

Mantenía la mirada fija en la puerta, esperando ver a ese hombre. JungKook caminó tranquilamente hacia la puerta, la abrió y con una gran sonrisa recibió nuevamente a su padre. JiMin sintió un leve escalofrío por su cuerpo al ver al hombre. Era unos centímetros más alto que su hijo mayor, NamJoon, que era el más grande de ellos; su complexión era parecida a la de sus hijos, no podía creer que ese hombre fuera más grande que ellos, parecía tan joven; su cabello negro un poco largo pero peinado completamente hacia atrás, su tez un poco bronceada y unos ojos igual de negros que su cabello.

Sonrió al ver a su hijo, y JiMin pudo darse cuenta de dónde HoSeok había sacado esa hermosa sonrisa.

—Papá buenas noticias, JiMin despertó —. De inmediato la mirada de aquel hombre se posó en él, mirándolo con curiosidad, haciendo que su pequeño cuerpo se encogiera en el propio asiento. Mientras el hombre caminaba hacia él se encogía en la silla aún más, ese hombre daba miedo.

Cuando estuvo a pocos centímetros pudo ver los pies de este, subió un poco la mirada siendo congelado durante unos segundos por esos ojos; rápidamente desvió su vista posándose otra vez en los pies de este. El alfa lo miró con una sonrisa, era tierno ante sus ojos, aunque era comprensible, el rubio no lo conocía.

—Mucho gusto, mi nombre es Kim Jae Wook. Soy el padre de esos muchachos—. Dijo señalando hacia atrás y sonriendo con una hermosa sonrisa, le recordaba tanto a HoSeok, dándole esa confianza para sonreír de vuelta.

—Soy JiMin, por favor cuide de mí —. Se levantó de su asiento e hizo una inclinación respetuosa. —Mucho gusto señor Kim—. Se enderezó regalando una inocente sonrisa, que encanto a todos los de la habitación.

—El gusto es mío, tenía muchas ganas de conocerte—. Se acercó sutilmente y entre sus manos tomó a las más pequeñas, dándole un confort, que, solo esa familia podría darle. —¿Podemos hablar? —. Preguntó sosteniendo aún las manos del menor. JiMin solo asintió mirando de reojo a los hermanos que miraban con curiosidad la escena. —Será en privado, así que vamos a tu habitación—.

JiMin, con la confusión reflejada en la cara, caminó hasta la habitación que se le había sido asignada y entró, seguido de él entró el mayor.

Los cinco miraron desde el pasillo la puerta por donde se había metido su pareja y su padre. —¿Creen que lo esté interrogando? —. Habló JungKook sin despegar la vista de la puerta. —Conociendo a papá, si, pero sabe que JiMin está asustado, así que solo mostrará su faceta amable—. TaeHyung estaba un poco preocupado, temía que si JiMin no decía lo que papá quería saber, este se sacaría de quicio y asustaría al menor.

—Bien, no hay que preocuparnos por ellos, nuestro padre fue muy amable con él, además si lo daña, tendrá que enfrentarse a cinco lobos enfurecidos—. Dijo NamJoon con una sonrisa, restando importancia, los demás asintieron y fueron hacia la mesa del comedor, tomando cada uno asiento en su respectiva silla.

Los dedos de TaeHyung golpeaban la mesa en un movimiento de nerviosismo, causando que YoonGi se desesperara poco a poco. —¡Basta!, ese sonido está matando mi paciencia —. Dijo YoonGi golpeando la mesa, haciendo que TaeHyung inmediatamente dejara de hacer ese movimiento. —Perdón, pero, es que ya han estado ahí casi 1 hora, y no se escucha nada—. Miró una vez más con preocupación la puerta de la habitación.