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IV

13 años atrás...

Era el primer día de preparatoria Senku y Kohaku por suerte habían tocado juntos en la misma clase al igual que sus amigos, Kohaku llamó la atención de todos con su belleza natural y siendo muy atlética. No le importaba ser popular mientras siguiera estando ayudando a Senku lo demás le daba igual, pasaron los días y tenían que escoger algún club.

-¿Seras el presidente del club de ciencias? - Lo miraba ella con una ceja arqueada.

-Si hace una hora vino el ex presidente del club ya qué es su último año y esas idioteces ya sabes- Rascacielos su oído con indiferencia.

Ambos por la secundaria estaban recomendados, ella por ser buena en todos los deportes en especial las Artes marciales y él por sus excelentes calificaciones e IQ.

-Aún no se en cuál entrar- Suspiraba con pesar.

-Me sorprende de ti leona, deberías entrar al que siempre haz querido- Sacaba su celular de su bata y empezaba a teclear.

-Idiota, ¿Hasta cuando dejaras de llamarme con ese estúpido apodo? - Lo miraba con una venita saliendo de su sien.

-Prefieres Gorila-Se escuchaba su tono burlón.

-Vete al demonio bastardo- Se alejó de él para irse fuera del aula.

Estaba indecisa había muchos deportes en esa escuela, pero tenía un punto de razón el científico sabía desde tiempo antes cuanto amaba las Artes marciales, le haría casó por una vez en su vida. Sin más fue a buscar al tutor de la clase para entregarle su formulario, por detrás de la puerta se encontraba el presidente del club de ciencias recargado en la puerta del aula con una sonrisa de esas pocas que refleja su felicidad al ver que su leona haría lo que le gustaba.

Pasaban los meses ellos encajaban bien en sus alrededores, cada día salían tarde una por entrenar para dar lo mejor de si en el torneo que iba a haber en una semana y él otro tenía que hacer su proyecto para la feria antes de las vacaciones de verano. Pasó la semana y Kohaku invitó a Senku a ir a su primer torneo.

-¿Cómo que no puedes ir? -Estába en el laboratorio viéndolo con ganas de arrancarle los brazos.

-Leona estoy muy ocupado con el proyecto y... - Fue interrumpido.

-Bien, solo que no me vuelvas a pedir nada- Se dió la media vuelta y azotó la puerta quebrando la ventana.

El día del torneo Kohaku estaba molesta, tanto que cada que peleaba con alguién se imaginaba que golpeaba al idiota de Senku, en la semifinal de Karate llegando a la banca para tomar su termo de agua se dio cuenta de que algunas personas lo veían a ella, estaban Tsukasa, Minami, Taiju, Yuzuriha, Ruri, Chrome, Byakuya, Lilian, la pequeña Suika y Senku. Se sorprendió de ver a este último, a lo que su celular sonó en ese momento dándose cuenta que era un mensaje de Senku.

Bastardo ❤

Dejá de perder el tiempo y gana Leona ilógica.

Lo volteó a ver y el tenía una mirada arrogante, odiaba que fuera así pero le alegraba que se tomará el tiempo de verla en lo que más amaba. Desde ese momento nació, o más bien el sentimiento se hizo más fuerte, volvió para esperar su turno.
Después de un rato llegó a la final, la chica era fuerte a como la iba observando, sin más se puso su protección bucal y casco haciendo una reverencia antes de lanzarse de golpe a dar una parada a su brazo que lo cubrió. Era muy pelea muy reñida ya que estaban agotando a Kohaku intencionalmente, esta yacía en el suelo pero se reojo volteó a ver a una dirección en particular, las personas que la venían apoyar todas gritaban "Tu puedes Kohaku-chan" "Dale la paliza de su vida" Entre otras cosas más pero el albino estába de brazos cruzados examinando  la situación, regalándole una mirada tranquila y leyendo sus labios "Tu puedes con ésto y más Leona"