Capítulo 10

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Hoy es sábado ,sábado por la mañana y si os preguntáis, sí,también se trabaja los sábados ,todo el mundo lo sabe. Estoy aburrida,paseando por los pasillos...embobada...mirando las fotos de Jackson... Me quedo atónita y anonadada observando fijamente su ...tableta de chocolate.

Mi foto favorita es una ,en la que está solo con una sudadera de cremallera negra,abierta,dejando ver sus pectorales y sus abdominales...lleva puesta una capucha negra y unos vaqueros pitillo. Me quedo quieta observando la imagen lentamente, ladeo mi cabeza curiosa mientras muerdo mi labio . Mi subconsciente está soltando babas y ladrando como un perro al ver esa foto. La música no me ayuda a estar tranquila... Solo pensar en sus ojos azules mirando me ferozmente consigue que mi bello se erize como una adolescente virgen viendo una revista de playboy...

Y es que realmente es así...soy una veinteañera, no virgen ,observando la fotografía es un modelo que podía ser chico mas sexy del mundo,sin problemas. Mis uñas se deslizan por mi brazo y se clavan en él cuando mi mirada va pasando a otras fotos en la que la ropa de Jackson va disminuyendo poco a poco ,hasta tal punto que la última foto de la pared,es el,sujetando un sombrero que tapa justamente su masculinidad,con una sonrisa de diablillo,y sin nada más,sin NADA más.

Cierro los ojos imaginándome que esas pálidas manos recorren cada centímetro de mi cuerpo con poderío. Siento una mano en mi hombro y eso hace que de un brinco acompañado de un pequeño grito asustada. Me quito los cascos y veo dos hermosos ojos verdes que me tranquilizan

—Punzie...me has asustado—digo guardando los auriculares en el bolsillo de mi falda de los 70.

—Las chicas y yo vamos a ir a un sitio muy especial en El Bronxs ¿te apuntas?—me pregunta y yo abro mi boca sorprendida

—¿E-el Bronxs?—tartamudeo—¿Tu madre sabe que vas a ir a un sitio tan peligroso?

—Por supuesto que no lo sabe—me dice con una sonrisa—¡Vamos!—grita agarrando mi mano y salimos a correr.

En un abrir y cerrar de ojos estoy en un taxi metida ,estoy sentanda atrás con Punzie,Ariel y Ceni y Mérida está adelante junto el piloto que es un hombre de origen indio,o eso parece. Él conduce y mientras conduce voy mirando por la ventana. Se nota el cambio en la fachada de los diferentes barrios

El centro de Nueva York y Manhattan es extremadamente lujoso. Pasamos por Queens...un poco menos lujoso pero aun así bonito y bello. Broockling es más callejero pero no es para tanto, todos don edificios ,al alguna que otra casa pero no mucho, donde vivo yo con Mérida gracias a los padres de Mérida y mis padres. Y cuando ya veo los edificios,casi todos con una pinta horrible...prostitutas en las esquinas, hombres vagabundos a mogollón...ya se que estamos en el Bronxs.

Las chicas se bajan animadas pero yo estoy muerta de miedo .Punzie se engancha a mi brazo sonriente. Caminamos por callejuelas hasta que llegamos a una esquina donde hay una tienda de antigüedades.

Las chicas entran sonrientes.Por dentro el aspecto es muy antiguo pero limpio.Hay millones de figuritas de todos los tipos : Indias...aztecas...mayas...

Adoro la cultura maya. Pero parece que no hay vida en la tienda. Hay un marco que no tiene puerta,solo una cortina con bolitas de diferentes colores. Mérida se acerca al mostrador de madera de caoba y le da a un timbre . Una mujer afroamericana sale de la puerta esa de las bolitas de colores. Es rechoncha ,lleva un vestuario extraño,un poco...de época medieval con muchos pañuelos y cuentas de colores. Sus ojos son oscuros como su cabello y su piel.

—Ustedes deben de ser el grupo —dice la mujer con una profunda voz

—Si,Madame Sasha—dice Mérida y se nota que está exuberante de emoción

The Frozen Model (Jelsa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora