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El castigo de los gemelos había llegado a su fin, un mes entero sin poder salir de casa, sin un aparato electrónico y un mes entero sin las deliciosas galletas que hacia su madre. Un mes entero sin ir a las clases de boxeo de Jeon y claro también un mes entero sin ver a Jeon.

Pero claro que los gemelos se tenían que disculpar con Jeon y Taehyung tenía una idea en mente.

Por otro lado la pareja ya tenían aproximadamente dos semanas de novios y claro que las salidas y citas habían aumentado. Ambos suspiraban como locos enamorados cuando están juntos.

— ¿Entonces se acaba nuestro castigo y tú nos llevas al centro comercial?—dijo Hyunjin bajando del auto—Porque si es así me puedes castigar las veces que quieras y yo estaría dispuesto.

— ¿Es una recompensa por todos los privilegios que nos quitaste por un mes?—pregunto el pelinegro.

—Nose si decirle recompensa, puede que mi sorpresa no les agrade del todo—taehyung rio y camino dejando a los adolescentes atrás estos se miraron confundidos y siguieron a su madre.

Cuando entraron los gemelos miraron el lugar como si nunca hubieran estado ahí—Ya extrañaba salir de la casa, ya me urgía salir—dijo hyunjin saltando casi de la felicidad.

—Espero que guarden esa emoción para cuando vean su sorpresa—ay, lo que les espera.

—Claro que si amamos las sorpresas—ambos asintieron—Yo digo que es un unicornio—exclamo sonriente el rubio.

—Yo digo que mamá nos compró un carro—dijo sujin y su hermano asintió emocionado.

— ¿Entonces es un carro o un unicornio?—le pregunto hyunjin al castaño.

—No les diré pero puede que su reacción sea... ¿sorpresiva?

— ¿No nos dirás que somos adoptados o algo así?—taehyung rio y negó.

🥊

Vaya que sus reacciones si fueron sorpresivas.

—Me voy—dijo el pelinegro dándose la vuelta para irse pero no se pudo ir ya que el castaño lo tomo del brazo.

—No, ninguno de ustedes se va. Ahora saludan correctamente—dijo con un tono demandante.

Jungkook que los miraba con los brazos cruzados, al ver que no iban a hablar, hablo.

— ¿No me extrañaron?—hablo y el rubio lo miro y luego miro a su hermano como si estuviera dudando de algo.

Hyunjin dejo de mirar a sus lados y hablo—H-hola, yo emm... me quiero disculpar contigo por todo lo que llegue a decir meses atrás sobre ti, me di cuenta que no eres tan malo como creía me di cuenta de que haces feliz a mamá—confeso y los presentes se sorprendieron de sus palabras ante las miradas hyunjin se puso más nervioso aun y empezó a jugar con sus dedos—y-y también perdón por lo de ese día sé que lo que dijimos fue muy grosero y puede que te haya hecho sentir mal, sé que lo hiciste solo por nuestro bien pero en ese momento estaba cegado por la furia, perdón Jungkook—lo miro a los ojos y dio una reverencia de 90 grados—lo siento mucho.

Taehyung se quedó helado por las palabras de su hijo pero por otro lado estaba orgulloso de que se hubiera disculpado con Jungkook, solo faltaba sujin.

Jungkook también estaba sorprendido pero se alegró de que hyunjin hubiera recapacitado, sonrió y se acercó donde el adolescente que seguía inclinado, le dio unas palmaditas en la espalada y lo hizo subir para verlo a la cara.

—Está bien, disculpado. —le sonrió, algo dentro suyo lo hizo sentir bien. Pero algo que no espero fue que el rubio se pusiera a llorar—Ey, ¿Por qué lloras?

𝗯𝗼𝘅𝗶𝗻𝗴 𝗰𝗹𝘂𝗯/𝗸𝗼𝗼𝗸𝘁𝗮𝗲 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora