Capitulo 4: La sombra y el rayo

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Hace seis años atrás, en el lado este de Corona eran transportados en un vehículo una pequeña familia hacia el palacio de batallas, una chica joven que llevaba un vestido negro con algunos detalles en él se encontraba mirando hacia el suelo mientras se escuchaban las voces de varias personas más las de sus padres hablando. "Mis padres fueron invitados a una cena con espectáculo en el palacio de batallas, ese día decidieron llevarme ya que no querían que algo me pasara, típico de personas que veníamos de una familia adinerada era peligroso dejar solo a la que posiblemente sea la heredera de esa fortuna". La joven chica empezó a mirar a su alrededor hasta caer su vista hacia su madre que se encontraba hablando con varias de las personas del vehículo.

– Madre. – Dijo en un tono bajo y suave.

– Hija, estoy hablando con los señores presentes.

– Estoy aburrida, no quiera ir a ese lugar.

– Sera rápido Pandora solo será ver el espectáculo y luego nos vamos.

Pandora cruzo sus brazos mientras miraba por la ventana como se acercaban hacia su destino se podía ver que era una edificación grande las luces reflejaban por todo el lugar mientras llegaban, fueron recibidos por un hombre con ropas elegantes mientras bajaban del vehículo caminaban hacia la entrada del lugar donde los recibió un hombre con ropa militarizada dando la bienvenida a sus padres. – Señor y Señora Moreau como están sean bienvenidos al palacio de batallas veo que están con la pequeña Pandora. Pandora observo aquel hombre con un poco de seriedad era el típico militar sin un pelo en su cabeza con un bigote donde tenía canas que cubrían parte de su boca, la familia mostró una reverencia ante el general mientras su padre se acercaba hacia aquel hombre que empezó a estrechar su mano. "Mi padre es de esas personas que buscaban la aprobación de todos a pesar de ser un hombre millonario no quería dejaba que nadie se sintiera inferior a él, cuando nos invitaron a entrar a la sala principal esperaba algo como decirlo...normal."

Al entrar a sala principal era un lugar lleno de pisos donde había mesas y sillas decoradas, las únicas luces eran las de las velas que posaban sobre las diversas mesas y algunos faros que no iluminaban totalmente el lugar también se podían ver televisores pero en estos no mostraban nada, un mesero ubico a Pandora y a su familia en una mesa cerca de una valla de acero que cubría todo el lugar donde se podía ver al otro lado un lugar lleno de arena y con una puerta cerrada. – La comida llegara luego del espectáculo, que lo disfruten. – Dijo un mesero que los había acompaño alejándose.

– Padre, ¿Por qué hay una valla?

– Por nuestra seguridad hija, para que no nos caigamos.

Cuando su padre término de hablar las luces se apagaron para así un reflector se enfocó en un hombre que se encontraba en el lugar lleno de arena. – Sean bienvenidos, el espectáculo de hoy será inolvidable hoy tenemos ronda de exhibición que nuestros participantes aparezcan. – Al terminar el comentario la puerta se había abierto mostrando a un grupo de personas entrando al lugar, los televisores empezaron a encenderse mostrando cada ángulo del lugar aquella persona que narraba fue elevada por un gancho mientras las personas que habían entrado se encontraban inmóviles por el momento. Pandora enfoco su vista en un joven de cabellos castaños algo sucio y descuidado, apenas se podían ver sus ojos grises en él y su cuerpo parecía estar moreteado como si hubiera peleado muchas veces solo traía unos pantalones y una camisa algo rasgada. "Ahí en ese mismo espectáculo vi a Jasón por primera vez, parecía un pollo raquítico en ese entonces pero lo que no pude imaginar es lo que pasaría después."

El narrador se preparó mientras los gritos de las personas se escuchaban por todo el lugar mirando al público tomo un bocado de aire. – El premio será de cien mil tríckeles, así que empiecen a apostar una vez que suene la campana no hay vuelta atrás. – Pandora observo al chico que comenzaba a estirarse preparándose para lo que se venía mientras su padre sacaba lo que iba a apostar con una sonrisa maliciosa deposito su dinero en una jarra mientras se escuchaba el sonido de la campana. – Las apuestas se cierra señoras y señores así que dé inicio el combate. – El comentarista había dejado el lugar mientras los que estaban el lado contrario de la valla de acero activaron sus runas empezándose atacar unos a otros hasta la muerte, Pandora se encontraba observando aquel chico que no se movía mientras todos empezaban a atacarse varios de los cuerpos habían sido dañados por varias habilidades otros habían sido noqueados o aplastados hasta no poder más, La pelinegro comenzó a observar como alguien se acercaba aquel chico. "No sabía porque mis padres les gustaba ver este tipo de masacres personas como nosotros o como Jasón no merecían ese tipo de cosas, pero algo en mi hizo que mi desesperación por no verlo lastimado más me obligo a hacer lo que hice".

Exordii tri I - Linaje elementalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora