* Historia inspirada en el BL Coreano: Color Rush
¿Qué pasaría si en el mundo existieran los monos y los probes?
Los monochromes son personas que sufren una ceguera neurológica que solo les permite ver el mundo en diferentes tonalidades de gris. Es...
Llegamos a casa de Youngjo con el ambiente un poco nervioso, los dos guardando silencio. Sé que él ha sufrido mucho con su madre, y este es un gran paso con el cual quiere que su madre esté orgulloso de él por primera vez en su vida.
Por lo poco que me ha contado, su madre encontró a su probe y igual que Youngjo no tardó en obsesionarse con él, abandonando a este apenas teniendo 14 años. No era un abandono como tal ya que su madre le daba una cuota mensual y le pagaba la casa, pero ella nunca estaba presente y Youngjo debía encargarse de comprar, limpiar y cocinar-se a sí mismo. Personalmente encuentro eso de bruja, Youngjo necesita mucho amor, sé que desde fuera puede parecer un tipo duro sin sentimientos, pero en realidad es muy humilde y juguetón, es lo que me enamoró de él. Ya se lo he dicho anteriormente a Ravn pero estoy dispuesto a llevarle la contraria a su madre si es necesario y voy a defenderlo en todos los aspectos. Aunque una pequeña parte de mi quiere darle una buena impresión a la que va a ser mi suegra, así que de primeras quiero parecer un niño bueno, por esto he escogido un chalequito y un beanie para la cabeza. Además se que a Youngjo le encanta cuando me visto así, ya que ello clasifica como adorable.
Antes de poner la llave en la puerta, me mira a los ojos y me dedica una sonrisa tranquilizadora.
-YJ: Bueno Woong, ahora es tu turno de conocer a mi madre. Debe estar a nada de llegar, así que vamos a ponernos cómodos. No te sientas nervioso, en el fondo mi madre es una buena persona.- Me da mucha lástima ver como intenta no culparla de todo lo que le ha hecho pasar, aún sabiendo que ha sido su madre la que lo abandonó.
Entramos y nos sentamos en una de las mesas de su pequeño balcón, esperando a la llegada de su madre. El ambiente es un poco corto y Youngjo luce preocupado, pero Sunny parece animarle lo suficiente.
Suena el timbre y Youngjo va con la mirada perdida hacia la puerta, mientras yo espero fuera. Escucho la voz de una mujer, pero al contrario de la de mi madre esta parece muy distante. Youngjo abre la puerta de la terraza y su madre se sorprende al verme al otro lado de esta.
-YJ: Mama, sientate. Él es Hwanwoong, mí probe.
Su madre se sorprende y abre los ojos con fuerza, mirándonos a ambos con mucho asombro.
-Madre: Youngjo hijo ¿desde cuando has encontrado a tu probe? Yo...estoy muy contenta de ello. ¿Cómo te llamas pequeño, cuántos años tienes?
-Yo....Hola señora Kim. Soy Yeo Hwanwoong y soy 3 años menor que Youngjo. - Digo con la voz temblorosa, su madre es muy diferente a lo que me había esperado. Luce como una señora adinerada, lleva el pelo perfectamente recogido y un maquillaje perfectamente aplicado. Lleva un bolso de marca y un vestido ajustado de color purpura.
-Madre: ¿dónde os conocisteis?
-YJ: En la universidad mama, la primera vez que vi a Hwanwoong sufrí un color rush en medio de la cafetería. A partir de allí empezamos a tener pequeñas citas hasta llegar al día de hoy, donde ya somos una pareja oficial.
A partir de allí empezó una agradable charla con la madre de Youngjo, explicandole nuestra historia y como nos empezamos a enamorar, básicamente una charla parecida a la que tuvimos con mi madre hace unos días. El tiempo empezó a pasar rápidamente y ya empezaba a anochecer.
-Madre: Hwanwoong, espero que puedas cuidar de Youngjo por mi. Estoy segura que él te ha hablado de mí como si fuera un monstruo, y tiene parte de razón, seguramente me guardes rencor, pero yo quiero mucho a mi hijo. No sabes lo tranquila que estaré por las noches sabiendo que mi Youngjo tiene a su probe haciéndolo feliz. Ahora debo irme, nos vemos en unos meses chicos. Un placer haberte conocido Hwanwoong.
-El placer ha sido mío señora Yeo, y no se preocupe, yo cuidaré de él.
Me dedica una sonrisa y luego se despide de su hijo con un corto beso en la mejilla, y luego procede a desaparecer por la puerta. Youngjo suelta un largo suspiro y me lanzo en sus brazos para darle un cálido abrazo, al cual responde al instante. Mis brazos están bien aferrados a su cintura y mi cabeza está hundida en su cuello, mientras que sus brazos rodean mi cuello y su cabeza queda apoyada sobre mi cabeza. Nos quedamos así durante unos minutos, sintiendo nuestras respiraciones cada vez más lentas.
-YJ: Bebe ya se ha hecho tarde y mañana tenemos clase, creo que es buena idea irnos ya a la cama. Mañana va a ser un dia duro, seguramente muchos compañeros te llenen de preguntas, tu contesta lo que creas que es necesario ¿esta bien? Y si alguien se pasa de la raya o te molesta, llamame, yo me encargo.
-Esta bien Youngjo, aunque creo que me las apañare. Además, ya no queda tanto para fin de curso.
-YJ: Ya lo sé, me muero de ganas de que termine. Ahora quédate a dormir conmigo por favor, yo te dejo un pijama. Pero lo único que necesito ahora es tenerte a mi lado mientras me abrazas durante toda la noche.
-Eso está hecho Youngjo
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Chicxs este es el penúltimo capítulo de esta historia, muchas gracias por habernos acompañado hasta aquí. Preparaos para leer el fin de esta bonita historia entre Hwanwoong y Ravn. De verdad que estamos muy agradecidas de que hayáis leído nuestra primera historia, y nos veremos muy muy pronto con otra. <3<3
