Sinopsis.

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Introducción.

La vida de Harper Simmons siempre ha sido tranquila, pero a la vez llena de complicaciones. Ha tomado desde que tiene consciencia y edad las cargas familiares, en todos los sentidos de la palabra, como un problema suyo, algo que ella también debía ayudar a solucionar. Por eso, cuando la situación económica de sus padres comienza a ir peor, Harper recuerda todo lo que Kenai puede ofrecerle. Recuerda todo ese dinero que tenía encima de la mesa de la cocina en su apartamento y siendo llevada por la desesperación, acepta su propuesta:

"- Acepto. - declaré en el momento que abrió la puerta de su apartamento.

- ¿Vienes a mi ahora porque estás desesperada? - preguntó con un tono burlón que no me gusto nada, pero prefería tragarme mis malas palabras porque sabía que él estaba dispuesto a ofrecerme una solución, una solución donde había bastante dinero de por medio y eso es justo lo que necesitaba mi familia en este momento.

Por otro lado también entendía su pregunta, ya que me lo había ofrecido en cada una de las situaciones donde sabía que mi familia y yo habíamos tenido problemas y siempre lo había rechazado rotundamente. Lo extraño es que no estuviese sorprendido de verme aquí, no por estar en su apartamento, ya que este lo había pisado varias veces, pero no para esto. No para aceptar propuestas que no sabía a dónde me llevarían.

- Eso no es tu problema. Solo vengo a decirte que acepto. - volví a repetir, manteniendo mi postura.

- Está bien. - asintió. - Empecemos, entonces. - sonrió haciéndose a un lado para dejarme entrar.

Supuse que el juego había empezado justo ahí, pero en ese momento no supe en qué sentido y no sabéis lo mucho que me arrepentí después."

Como en todas las historias, no todo es idílico, no todo sale ni termina bien. Pero, es que, ¿quién va desconfiar de su cómplice de fechorías?

Y ese fue el problema, confió demasiado en personas que no eran sinceras.

"- Adelante, pase por aquí.

El policía me indicó de forma amable la puerta de una pequeña sala apartada del resto céntrico de la comisaría. Entré rápido, mis ojos enfocándose en él. Ahí, sentado en esa silla de metal, callado e impaciente, con un moretón formándose en su ojo izquierdo, su labio sangrando y un corte en la mejilla derecha, parecido al que le curé la primera vez que nos vimos. Como me gustaría retroceder en el tiempo hasta ese momento.

Como me gustaría no sentirme tan destrozada como estoy ahora.


- Adiós, niño bonito. - susurré saliendo de esa sala, desapareciendo segundos después por la puerta de la comisaría, aun sabiendo que no me había escuchado. "

Fecha de publicación: 30 de junio.

《°°°》

Sorpresa!! JAJAJAJAJA.
Nos volveremos a leer muy próximamente en esta nueva historia que tengo muchas ganas de compartir con vosotros.

Recuerden que las fotos de los personajes se irán subiendo a mi cuenta de ig, por si es de vuestro interés verlos.

Espero que tengas un buen día, tarde o noche. Muchos besos.

❤❤❤

Ig: @daddyywilkkk.

Cómplices. (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora