𝗪𝗵𝗲𝗻 𝗜 𝗟𝗼𝗼𝗸 𝗔𝘁 𝗬𝗼𝘂

Capítulo 9

Taehyung creía que la vida había dejado de ser ese mar de ilusiones que se había creado de niño sólo para albergar la esperanza de ser feliz. Pero la realidad lo atropellaba, estaba herido y a la deriva; perdido en una isla desierta, en un mundo donde sólo permanecían los sueños rotos.

Entonces, entendió que absolutamente nada podría salvarlo esta vez, ni siquiera el amor más puro, grande y verdadero sería suficiente para acabar con todo el mal que le atormentaba, tanto a él que lloraba de impotencia, como a su novio que buscaba desesperadamente una forma de salir de esa situación.

Tenía un nudo en el pecho, le dolía, se arrepentía de tantas cosas, se culpaba por tantas otras y se repetía constantemente que pudieron haberlo hecho mejor, pudieron esforzarse más, debieron pensar más, así no estarían atrapados y sus vidas no estarían colgando del pequeño hilo que significaba la muerte.

ㅡEstamos jodidos, no veo como escapar. ㅡExclamó Jungkook. ㅡTodas las posibles salidas están bloqueadas por los autos o por los guardaespaldas de tu papá.

Taehyung apretó los ojos, sin siquiera poder mencionar palabra alguna. El miedo lo estaba carcomiendo.

ㅡPodemos, no sé, ¿Intentar hablar con tu padre? ㅡPreguntó el menor ganándose la mirada aterrada de su novio. ㅡLe diré que no sabrá más nunca de nosotros, que nos deje en paz. ㅡSe apresuró a decir.

ㅡMe niego a ver como te asesina frente a mis ojos. ㅡDijo Taehyung con las mejillas húmedas por las lágrimas, con los ojos muy hinchados y la nariz roja. ㅡ¿Acaso no piensas en mi?

ㅡClaro que pienso en ti, en nosotros, pero esto no se solucionará mientras nos quedemos aquí, callados, sin hacer nada, Tae. Tenemos que actuar.

Uno de los hombres del padre de Taehyung repentinamente golpeó la ventanilla del auto mostrando un teléfono celular, en el cual se podía divisar un número privado, pidiendo que tomaran el aparato ya que se suponía que era importante.

Jungkook tomó el teléfono y prosiguió a contestar la llamada luego de haberlo colocado en altavoz para que el mayor también escuchase.

ㅡ¿Hola?

ㅡCon que eres tú gran hijo de puta. ㅡAl menor se le erizaron los vellos con sólo escuchar aquella voz grave y rasposa colarse por sus sensibles oídos. ㅡTe voy a decir algo no más, y es que vas a pagar el haberte llevado a mi hijo y mi maldito dinero, a ver si eres tan hombrecito, maricón.

ㅡLe pido que por favor me escuche, es de suma importancia...

ㅡMe importa una mierda. Ustedes no me escucharon cuando les dije que sí me enteraba de que eran putos y andaban juntos los iba hacer añicos y yo siempre cumplo con lo que digo. Así que, ahí te va una primera parte de lo que prometí.

Ambos miraron asustados hacia todas partes esperando cualquier cosa que les pudiese lastimar, pero en realidad no esperaban que el golpe fuese dado de manera indirecta.

Del mismo helicóptero que había utilizado anteriormente el padre de Taehyung para llegar allí, estaban ahora bajando a la mamá de Jungkook, con las manos atadas y con una bolsa negra en la cabeza, mientras era empujada, jaloneada y estrujada por los hombres que la llevaban en dirección a la mitad de la carretera, quedando a pocos metros y en frente del auto donde Taehyung y Jungkook se encontraban aterrorizados.

ㅡEspero que no llores por esta estúpida, porque fue ella quien me dijo lo de la fuga de ustedes. Veamos si así logras sentir el dolor que siente un padre cuando se entera que su hijo lo abandonó sólo para fugarse con otro hombre.

ㅡ¡Eso es tan estúpido, papá, date cuenta de lo que estás haciendo! ㅡExclamó nervioso Taehyung al ver que Jungkook no respondía y sólo permanecía con el teléfono en su mano, mientras las lágrimas salían unas tras otras e humedecían su pálido rostro.

ㅡAl fin te dignas hablar, Tae. ㅡSe escucharon unas cuantas carcajadas, lo que le hizo enfurecer a Taehyung. ㅡEspero te arrepientas de lo que me hiciste, te darás cuenta tú, de que ese imbécil que tienes al lado te metió en esto, te hizo perder a tu padre y de paso, perderá a su madre también, por ese maldito amor absurdo que dice tenerte.

El teléfono cayó al mismo tiempo que los disparos resonaron.

ㅡEstoy harto de que quieran verme la cara de idiota, de que quieran pasar por encima de mi, ¡Nadie nunca jamás se había atrevido a tanto y pagarás las malditas consecuencias! ㅡGritó, disparando repetidas veces más al inerte cuerpo de la madre de Jungkook, que se encontraba en el suelo, muerta.

El dolor profundo se instaló en su pecho y Jungkook no podía respirar. Se estaba ahogando, estaba temblando, llorando, tomándose del cabello, su corazón palpitaba de manera errática y ahí fue donde Taehyung notó, que su novio estaba presenciando un terrible ataque de pánico.

ㅡTranquilo, tranquilo amor. ㅡDecía el mayor dolido, mientras apresaba en sus brazos el cuerpo de su novio, para que dejara de golpearse él mismo y a todo lo que se le atravesara ahí dentro del auto. ㅡ Tranquilízate, por favor. ㅡLo arrullaba sin saber qué más decir, la situación lo sobrellevaba y estaba muy preocupado.

Taehyung de un momento a otro se llenó de coraje y tomó el teléfono.

ㅡ¿¡Qué mierda quieres de nosotros, gran maldito hijo de perra!? ㅡGritó con furia, apretando el aparato tan fuerte entre sus manos, por poco rompiendolo.

ㅡTen cuidado con cómo le hablas a tu padre. ㅡMencionó cínicamente, tan sereno que no parecía que acababa de quitarle la vida a una persona. Al parecer ver sufrir a otros le satisfacía. ㅡQue novedad que me grites, yo sólo recuerdo verte temblar las piernas cuando te confrontaba, ¿ahora ya no eres tan marica, no hijo? Ahora ya no me temes, pero lo harás, no te librarás tan fácil de mi.

ㅡTe pregunté qué es lo que quieres, no me interesa escuchar todas las mierdas que salen de tu asquerosa boca.

ㅡQuiero verte sufrir, Taehyung.