Once

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Ese mismo día a la salida Namjoon corría agitado por los pasillos para llegar hasta la entrada de la universidad donde se supone se reuniría con Seokjin hace diez minutos.

No había sido su culpa que el maestro se extendiera demasiado con la explicación del próximo trabajo grupal y menos que los idiotas de sus compañeros se pusieran a hacer preguntas sobre cosas que el profesor ya había aclarado al principio de la clase.

De todas formas cuando llegó al punto de encuentro, Seokjin seguía ahí, moviéndose casi imperceptiblemente en ese balanceo nervioso que solía hacer algunas veces.

-¡Jinnie!- gritó cuando ya estaba cerca del pelinegro y la cara de este se iluminó.

-Namjoon, pensé que ya no venias.

-¿Que?- Namjoon se llevó una mano al pecho fingiendo estar dolido- Yo jamás te dejaría plantado.

-Vámonos entonces, debo pasar por mi hermano si no te molesta.

-Claro que no hyung.

Jin condujo por unos diez minutos hasta detenerse en una escuela donde iban saliendo un montón de chiquillos.  Entre ellos había uno jaloneándose con otros dos.

-¡¡Jungkook!!

Ante el grito de Jin, enseguida el muchacho de en medio se enderezó y despidió amigablemente de los otros dos para emprender una carrera hasta el vehículo.

-¡Hola Hyung! ¿Y este quien es?

-Jungkook por favor, no seas mal educado y "este" es Namjoon, un amigo- Jin reía nerviosamente mientras con una mirada quería indicarle a su hermanito que subiera atrás y no hiciera preguntas.

-Ok, pero Namjoon está en mi asiento.

-Por favor Kookie- Rogó esta vez el pelinegro, implorándole con los ojos al más joven.

-No hay problema Jungkook, puedo ir atrás.

Namjoon comenzó a abrir la puerta, pero Jungkook lo detuvo subiéndose a la parte de atrás.

-Solo quería ver si hacías eso.

El niño elevó sus labios enseñando una adorable sonrisa y Namjoon no pudo evitar meter la mano en su mochila para regalarle uno de los dos chocolates que tenia para Seokjin.

-Ahora si me agradas hyung, soy Jungkook, pero si quieres puedes llamarme Kookie, Koo, Jungkookie o como prefieras. Mucho gusto.

-Mucho gusto Kookie. ¿Cuantos años tienes?

-Catorce- respondió con orgullo el menor.

-¿En serio? Te ves mas grande, como de dieciséis.

Seokjin le guiñó un ojo a Namjoon, ya que con ese comentario sabia que ya se habia ganado a su hermanito y despues en un silencio comodo condujo los ultimos minutos que lo separaban de su hogar.

Ya en el lugar se sintió un poco cohibido, ya que su casa no siempre estaba tan ordenada como le gustaría, no era un basurero, pero si había ropa limpia por doblar sobre un sillón y en la mesa quedaban aún algunas tazas sucias del desayuno. El motivo era que sus vidas eran bastante agitadas, sobre todo tomando en consideración que su madre era enfermera y tenia turnos horribles en el hospital. Precisamente la noche anterior no durmió en casa por culpa del trabajo y eso hizo a sentir a Seokjin mas ansioso con la tormenta, quien a pesar de ser mayor que su hermano por ocho años, era mucho mas miedoso, tanto que incluso Jungkook se burlaba de él y cuando trataba de meterse en su cama por culpa de la lluvia o una pesadilla, el menor lo asustaba mas contándole historias horribles o simplemente lo empujaba de la cama hasta hacerlo caer al suelo.

¿Hacemos un trío? || NAMJINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora