Remarried I [YoonMin]

ʚ Capítulo 4. ¿Compararme con quién? (1) ɞ

El Emperador presenció cómo JiSoo insultó al hombre del que estaba enamorado. Fue toda una escena.

JiSoo y otras damas de compañía rápidamente agarraron sus faldas para inclinarse ante él, pero él las miró ferozmente. Ya había visto a Jeon unas cuantas veces antes en el palacio, y lo miré fijamente en silencio en lugar de volver a saludarlo.

Jeon miró a JiSoo y luego se giró hacia TaeHyung.

-"Dios mío."

Jeon suspiró. Los ojos de TaeHyung estaban húmedos, probablemente por la sorpresa, y la amplia mirada que le dirigió lo hizo parecer un pobre animal asustado.

-"No llores."

A pesar de su intento de calmarlo, las lágrimas comenzaron a caer por su rostro.

-"Dije que no llores."

A pesar del tono poco comprensivo de su voz, TaeHyung no se detuvo. Parecía no tener miedo de su infame actitud fría. Seguí mirándolo fijamente. Como TaeHyung continuó llorando, para mi sorpresa, Jeon sacó un pañuelo bordado en oro y se lo ofreció. Sus lágrimas no cesaron ni siquiera cuando le ofreció el pañuelo, y él mismo suspiró limpiándole la cara.

-"Eres muy susceptible."

Había cierta preocupación en su tono, y un rincón de mi corazón volvió a palpitar. No, era natural... era natural. Me acordé de las palabras de la Condesa Taeyeon, y me di la vuelta e instruí a mis damas de compañía para que me siguieran.

-"Vámonos. Me duelen las piernas."

No podría evitar que Jeon tuviera un amante, pero era libre de apartar mis ojos de él. Las damas me siguieron rápidamente.

-"Espera. Detente."

Jeon me llamó antes de que hubiéramos dado unos pocos pasos. Primero TaeHyung, ¿y ahora él? Jeon miró a JiSoo y la señaló.

-"Deja a esa dama de compañía atrás, Consorte."

-"¿Para qué?"

-"Déjala."

"Ella es mi dama de compañía. Tienes que decirme primero para qué."

La tez de JiSoo se puso pálida. También sentí un viento ominoso soplando a través de mis pensamientos.

Seguramente no castigaría a JiSoo por lo que le dijo TaeHyung, ¿verdad? Si bien el comportamiento de JiSoo no era exactamente ejemplar, seguía siendo una dama de compañía del Emperador Consorte. TaeHyung, por otro lado, no era todavía un concubino, ni siquiera era de la nobleza más baja. Incluso era probable que fuera un esclavo fugitivo. Si Jeon castigara a JiSoo, la deshonraría públicamente en la sociedad.

Así como a mí, el Consorte.

Lo miré fijamente, y dirigió su mirada hacia JiSoo.

-"Ella es una dama de compañía del Consorte, pero también es mi súbdita. ¿Cómo se atreve a hablar así?"

-"Entonces la regañaré."

-"¿Crees que un regaño arreglará a alguien que llama sucia a otra persona? Seguramente no."

Jeon le gritó una orden a un guardia cercano, apuntando su barbilla hacia JiSoo.

-"Enciérrala durante tres días y dale solo agua y pan duro."

La cara de JiSoo se puso blanca, y las otras damas soltaron un pequeño grito de angustia.

-"Eso es ir demasiado lejos, Su Majestad."

Di un paso al frente, pero Jeon dirigió su mirada helada hacia mí.

-"Llamó sucio a un hombre en silla de ruedas que ni siquiera puede caminar apropiadamente. ¿No crees que eso es ir demasiado lejos?"

-"!"

-"Bueno, solo mirabas. Probablemente pensaste que no estaba muy lejos."

-"Mis damas de compañía solo lo detuvieron porque tiró de mi capa."

La mirada en el rostro de Jeon solo se volvió más oscura.

-"Estabas alejándote de él."

-"Su Majestad."

-"¿Y qué hay de malo en sujetar una capa? ¿Es la capa del Emperador Consorte más noble que una mano humana?"

-"Entonces haré que tu sirviente tire del dobladillo de tu capa. Incluso si tu capa no es tan noble como la mano de un humano, ¿eso es aceptable?"

Jeon frunció el ceño y sonrió.

-"Tus palabras no tienen sentido ¿Realmente crees que es la misma situación?"

-"¿Es diferente?"

-"Lo es."

-"Entonces, ¿cuál es la diferencia?"

-"TaeHyung no es un sirviente."

Quería preguntarle si podría cambiar mi ejemplo, y qué haría si un concubino tirara del dobladillo de su ropa.

-"Encierra a la dama de compañía del Consorte durante cinco días."

Antes de que pudiera decir algo más, Jeon aumentó el castigo de JiSoo. Cuanto más me opuse a él, más severo se volvió.

Vi a TaeHyung sentado detrás de Jeon con los ojos bien abiertos, mirándolo como si fuera una especie de héroe. Las palabras que quería decir amenazaban con saltar de mi boca, pero ni siquiera el Consorte podía anular las órdenes del emperador. Podría convocar un juicio para impugnar el castigo de JiSoo, pero para cuando se abriera el juicio, ella ya estaría en libertad.

"Acepto el castigo, Su Majestad."

Mientras sufría por perder contra Jeon, JiSoo se adelantó rápidamente. Mi cara se puso roja de vergüenza e ira.

-"Vete."

No pregunté por qué el chico estaba cerca del palacio principal, ni tampoco Jeon me felicitó por trabajar duro todo el día.

Jeon y yo no éramos una pareja apasionada, pero éramos buenos amigos. Ahora no éramos ni eso. Apreté los dientes y me di la vuelta. Ahora entendía por qué mi madre me aconsejó que no me involucrara con los concubinos.

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