Remarried I [YoonMin]

ʚ Capítulo 165. Pido Aprobación Para Volver A Casarme (2) ɞ

¿Soy el único que tenía una leve sonrisa en los labios cuando dije esas palabras?

Jeon me miró con una expresión medio aliviada y medio arrepentida. ¿Era una farsa, o era sincera?

Hasta ahora, había sido un buen compañero y un perfecto Consorte. Nunca habíamos peleado - es decir, hasta que él lo trajo. Me dejó a un lado por su amante, pero hasta el último momento querrá ser un buen hombre y un buen emperador.

Luego estaba mi familia y la gran iglesia que había aprobado nuestro matrimonio, quienes insistieron en que no renunciara a la posición de Consorte. Ciertamente a él le disgustaría la idea de pasar por un tedioso juicio de divorcio contra ambos grupos.

Él era ese tipo de hombre, y ese tipo de emperador.

"¡Su Majestad! ¡Esto no puede ser!"

El Marqués Jinwoo gritó e intentó correr hacia mí, pero fue detenido por los guardias del emperador y se le impidió dar un paso más...

Marqués Jinwoo, Condesa Taeyeon y Sir ChanYeol, mis defensores. Estoy agradecido con todos ustedes.

Los miré con gratitud y luego me giré hacia el Sumo Sacerdote.

"Consorte JiMin. ¿Realmente está de acuerdo con este documento de divorcio sin ninguna objeción?"

El Sumo Sacerdote tenía una voz ligeramente enojada. Quería que peleara y desafiara la razón del divorcio.

Si bien las probabilidades de ganar el juicio eran nulas, causaría un escándalo para el Emperador y su concubino cuando la gente escuchara la noticia. Eso era lo que el Sumo Sacerdote, mi familia y mis amigos querían.

Sacudí la cabeza. Un juicio de divorcio puede dañar la reputación de Jeon, pero mi nombre también puede quedar manchado. No es que tuviera un problema moral, pero iba a volver a casarme con el Rey de otro país. Complicar la situación política solo lo haría más difícil.

"Acepto el divorcio."

El ministro cerró los ojos con gravedad mientras los murmullos comenzaron a surgir por la habitación.

"Y pido permiso para volver a casarme."

En el momento en que terminé de hablar, la atmósfera cambió por completo. El aire se calmó en un silencio impactante y los ojos del Sumo Sacerdote se abrieron de par en par. Todos se miraron unos a otros, sin estar seguros de lo que escucharon.

Jeon me miró confundido, frunciendo el ceño. El Sumo Sacerdote estaba aturdido.

"Consorte JiMin... ¿se volverá a casar?"

En lugar de responder, estiré mi mano y señalé un lugar. Como si fuera una señal, un hombre que llevaba un velo bordado que oscurecía su rostro estalló en una agradable carcajada.