Teddy Ghost (Danny x Dash)

*6*

Cuando los señores Baxter llegaron a casa, encontraron a Dash lamentándose en su cuarto, abrazado a su oso Phantom, que, por cierto, era como cinco veces más grande que el que tenía Danny en su librero.

Intentaron consolarlo, pero no pudieron aconsejarlo adecuadamente, puesto que Dash se negó a hablarles sobre lo que había pasado, y para ser sinceros, no es como si el atleta tuviera claro que es lo que había hecho mal.

Cada uno por su cuenta, el par de adolescentes ocupó su fin de semana en pensar y revivir su "cita". Especialmente lo que había pasado al final de ella.

Dash la pasó entristecido y sintiéndose culpable, mientras Danny experimentaba un gran estrés y ansiedad.

Todo había ido bien hasta que había recordado que era Phantom de quien estaba enamorado Baxter, no él. Y había cometido la estupidez de recordárselo a Dash también.

Así que ahora habían vuelto sus temores de que el atleta lo delatara por despecho.

Tal vez, debía haberle dicho que a él también le gustaba, lo cual, reconocía ahora, no era completamente falso. O sea, Danny no era ciego. Sabía que Dash era el sujeto más sexy de Casper High.

Además... había cambiado. Estaba intentando ser mejor persona y ya no era malo con sus compañeros de clase...

Y ahora que lo conocía un poco mejor, sabía que fuera de la escuela se comportaba como si fuera un ser humano normal. De hecho, era bastante agradable...

***

La siguiente semana, Sam y Tucker se reunieron con Danny frente a su casillero.

—No tienes idea de lo que nos acaba de pasar —comenzó Tucker—. Por fin nos llegó el turno en la ronda de disculpas de Dash.

—¿Cómo...?

—¡Sí! Sam y yo veníamos hacia acá cuando Baxter nos alcanzó en su carro y se ofreció a traernos...

—Ajá...

—Nos subimos al carro y le pregunté si quería nuestra bendición para salir contigo o qué... —dijo Tucker riendo—. Hubieras visto su cara. Se le puso roja como tomate... Yo sólo estaba bromeando, pero él se lo tomó en serio y dijo que esperaba tener algo contigo un día...

Al escuchar eso, Danny casi se atragantó con su saliva y se ruborizó un poco. Intentó disimularlo riendo ahogadamente, mirando a otro lado.

—Es tu bully —intervino Sam, enojada—. ¡Cómo se atreve a considerar algo así luego de haberte maltratado por años!

—Eso le dijo Sam —rio Tucker—. Lo regañó en su cara.

—¿Sabes qué dijo el idiota? Que no te hubiera molestado tanto si tú no hubieras insistido en desafiarlo... —refunfuñó Sam—. No me sorprende que sea de los que le echan la culpa a las victimas...

—Entonces, se volvió a poner rojo y luego dijo que de eso no era lo que quería hablarnos...

—Y empezó a balbucir la peor disculpa que he escuchado en mi vida...

—Dijo que lamentaba que sus "bromitas" no nos hubieran parecido tan divertidas como lo fueron para él...

—Qué idiota... —murmuró Sam.

—Sí... —dijo Danny, con un nudo en la garganta.

***

No sé si haya alguna mamá leyendo esta historia; pero si es el caso, ¡¡te mando muchas felicidades (atrasadas)!! 😀😀💞💞🌟🌟

Weno, amixs. Esta historia ya se acabó. El siguiente capítulo va a ser el último 😢