Ya tres días habían pasado desde la última conversación entre Levi y Erwin. Ambos habían estado muy ocupados, con trabajos, reuniones y entrenamientos. Sin embargo, ninguno había dejado de pensar en el otro.
Hoy, Levi entrenaría junto con un par de escuadrones en un bosque alejado del pueblo. Harían un entrenamiento en la nieve, ya que es más difícil moverse en ese medio. Por lo que se sabía, el comandante Erwin iba a presenciar dicho entrenamiento.
Eran las seis y media de la mañana, nieve helada caía, había bruma y un viento bastante fuerte que venía tanto del norte como del sur. El equipo de maniobras era bastante difícil de usar en esas condiciones y la idea era probar a los cadetes.
El entrenamiento comenzó, soldados se movían por todas partes entre los árboles, en pleno vuelo con su equipo de maniobras, Levi miró hacia abajo y notó que el comandante acababa de llegar, solo. Miraba hacia arriba atentamente viendo como todos se deslizaban rápidamente y manejaban a la perfección sus equipos, a pesar de las difíciles condiciones.
El capitán quiso bajar, tan sólo para poder saludar al comandante.
Pero algo sucedió, mientras bajaba rápidamente con su equipo de maniobras, una de las inexpertas cadetes lo rozó con el cable del equipo, justo en el costado del abdomen, causándole a Levi un corte apenas superficial, pero bastante grande.
Aterrizó en el suelo con mucha clase.
-Hola, Erwin.
-Levi. - lo saludó. Pero enseguida notó que la blanca camisa del capitán comenzaba a mancharse de sangre.
-¿Qué te sucedió? Tu abdomen...
Levi miró hacia abajo percatándose.
-Oh... No es nada, de seguro el cable de algun mocoso me rozó-Dijo restándole importancia.
-Bueno, pero esa herida debe ser limpiada, o podría infectarse.
-Está bien. Luego lo haré.
-No. Déjame que lo haga yo.-Dijo Erwin poniendo nervioso a Levi. Se aclaró la garganta, casparreando-Ya sabes, para asegurarme de que quede bien desinfectada.
Levi accedió. Su camisa empezaba a quedar cada vez más roja, al parecer, a pesar de no ser un corte profundo, si era bastante grande. Juntos entraron a la cabaña. Erwin se dedicó a buscar un kit de primeros auxilios, mientras que Levi se sentó en una silla, estaba nervioso. La idea de que Erwin le limpiara una herida lo hacía sentir extraño. Los nervios y la sensación en el estómago ya se habían vuelto costumbre.
-Levi. - Dijo Erwin derrepente. - "hmm, tendrás que quitarte la camisa"
El de pelo negro se sonrojó completamente. Íntegro.
-"O bueno, al menos subírtela un poco" - dijo el otro rápidamente.
Levi decidió probarlo: "veamos si realmente le gusto a este tipo" y se quitó su abrigo, su chaqueta, y finalmente, su camisa. No le importaba el frío. Se quedó con el torso desnudo justo delante de Erwin.
Jamás había visto a Erwin nervioso, pero al parecer, lo estaba.
El comandante se agachó delante de de Levi, las piernas abiertas de éste al estar sentado permitieron que Erwin se agachara justo en medio de éstas. Posicionó una mano sobre el abdomen, sin hacer nada, simplemente tocando a la altura de la cintura, como apoyándose. Con la otra, limpió la herida, utilizando un trozo de tela y agua.
La piel de Levi se erizó completamente ante semejante contacto.
Erwin lo miró. Sus miradas chocaron.
-¿Tienes frío?
-S-sí...
-Tranquilo, pronto terminaré.
Siguió por tomar un poco de alcohol y poniéndolo sobre la herida. Levi se quejó un poco ante el escozor.
-Sé que duele.- dijo Erwin mirándolo y sonriendole. - Pero ya pasará.
Sus rostros estaban tan cerca que sus narices casi se chocaban.
Levi no podía evitar sentir la mano del comandante posicionada en su cintura. ¿Por qué lo tocaba de esa forma? ¿Por qué puso su mano ahí? "Acaso está... ¿Moviendo su pulgar? ¡¿Acariciandome!?" Erwin sí que había aprovechado la situación."Maldita cuatro ojos, tenías razón"
-"Una última cosa" - dijo el rubio sacándolo de sus pensamientos. Para después tomar una venda y rodear el abdomen de Levi con ésta. Éste sintió sus dedos rozando toda su circunferencia.
Erwin le dedicó una sonrisa, se paró, y palmeó el hombro de Levi, - "Listo, ya puedes vestirte"
-Si...gracias,Erwin.
-No hay de qué. ¿Duele?
-¿Qué cosa?
-Pues, la herida que te acabo vendar.
-Oh, eh... Sí, digo, no, no, no duele.
Erwin río ante la repentina distracción de Levi.
-Bueno, será mejor que vuelvas al entrenamiento, yo ya me retiro, solo pasaba a verte un rato
-Hm...¿verme?
-Digo, ya sabes, ver el entrenamiento.
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todo por él (Levi&Erwin) en español Eruri
RomanceSu relación siempre ha sido de comandante y capitán, pero luego de algunos acercamientos, los sentimientos salen a la luz y se vuelven imposibles de ocultar. La imagen de la portada y las que utilizo en los capítulos no son mías, todos los derechos...