Capítulo 5

11 4 27
                                    

Los días pasaron lentos para las 10 chicas, tiempo en el que ninguna de ellas había mostrado ningún síntoma ni nada que pudiera indicar que lo que les habían inyectado hubiera hecho efecto en sus cuerpos. Aunque no por mucho tiempo...

Aunque las chicas llevaran solamente 2 semanas en aquel horrendo lugar, el tiempo se les había hecho eterno y para ellas parecía que habían estado allí como mínimo un par de meses, casi parecía que el tiempo transcurría de forma distinta en aquella habitación.

La rutina y el aburrimiento se habían apoderado de las vidas de las chicas, además de que la incertidumbre y el miedo no dejaba que algunas de ellas conciliaran el sueño por las noches.

Y eso es lo que le estaba sucediendo ahora mismo a Paula, la cual se encontraba en sentada en una de las esquinas de la habitación, observando como sus amigas dormían, o eso parecía, tranquilamente.

La joven llevaba todo el día sintiéndose mal, con dolores de cabeza, mareos, etc. Las nauseas no dejaban de aparecer y el dolor que sentía en todo su cuerpo no había dejado que pegara ojo en todo lo que llevaban de noche.

Sabía que tenía que decirles algo a sus compañeras, pero el miedo, o quizá algo más profundo, simplemente no la habían dejado hacerlo, haciendo que sintiera pinchazos de dolor cada vez que lo intentaba.

Las ganas de vomitar volvieran a aparecer, haciendo que la chica corriera hacia el baño, inclinándose sobre este e intentando hacerlo, ya que las últimas veces no había podido por alguna extraña razón.

La de ojos claros, los cuales empezaban a tener unos cuantos destellos negros, empezó a toser, saliendo de su garganta una especie de masa negra que parecía estar con vida, gritando la de 12 años antes esto, alejándose poco a poco de allí, sintiendo como miles de agujas se clavaban en sus sienes, haciendo que soltara alaridos de dolor.

Ante esto, las demás chicas se despertaron, viendo como su compañera se encontraba de rodillas en el suelo, agarrando su cabeza con ambas manos, gritando mientras que una especie de aura negra salía de sus ojos, los cuales se encontraban cerrados.

-¿Pa-Pauli? - preguntó Clara en un susurro lo suficientemente alto para que todas pudieran escucharla, empezando a acercarse a la chica y agachándose a su lado - ¿Me puedes oír?

Tras aquellas palabras la menor del grupo abrió los ojos con rapidez, mostrando cómo estos se encontraban negros, incluso la parte que supuestamente debería ser blanca, girándose a ver a la que la había hablado y extendiendo su mano hacia ella, saliendo de esta un montón de sombras que la golpearon contra la pared al otro lado de la habitación.

-No te acerques mortal - se oyó decir a la voz de su amiga, la cual sonaba mucho más grave y de una forma bastante terrorífica, como si se encontrara poseída por algún tipo de ser.

-¡Clara! - exclamó la de ojos amarillos, corriendo hacia su mejor amiga y viendo como esta se encontraba inconsciente por culpa del impacto, no sabiendo si estar aliviada porque estuviera viva o preocupada por su estado de inconsciencia.

-Paula, tienes que luchar contra lo que sea que te esté controlando, tú no eres así, esta no eres tú... Sé que no quieres hacerlo, así que por favor, lucha por mantener el control - habló Victoria caminando lentamente hacia su compañera, a pesar de que las demás le decían en susurros que no lo hiciera.

Un silencio lleno de miedo y de terror consumió el lugar, mientras que la de ojos fucsias se arrodillaba junto a la de poderes de oscuridad, tocando con cuidado su hombro izquierdo.

Y por unos pocos segundos nada pasó... Pero, ¿no creían que todo se iba a quedar así verdad?

En aquel momento, cuando todas ya creían que se había terminado, la joven menor, se giró con rapidez, agarrando a la mayor del cuello y levantándola del suelo, creando una cúpula de oscuridad transparente para que las demás no pudieran salvarla, pero que pudieran ver como esta se ahogaba poco a poco.

Victoria intentaba con todas sus fuerzas apartar las manos que evitaban que respirara, sintiendo como sus fuerzas desaparecían con rapidez y como su visión se nublaba, llegando un punto en el que dejó de luchar, aún consciente.

En aquel momento, la menor abrió la boca ligeramente, empezando a salir un montón de sombras que eran tragadas por la contraria, la cual lentamente iba sintiendo como sus fuerzas volvían.

Tras varios minutos Paula la soltó, cayendo ambas de rodillas, inspirando con desesperación como si ambas hubieran sido privadas de oxígeno, desapareciendo así la oscuridad que evitaba a las otras avanzar hacia ellas.

Y mientras que las chicas corrían hacia las otras dos para ayudarlas, una antigua y malvada entidad empezaba a extenderse dentro de una de las 10 gimnastas... Y no planeaba nada bueno.

—————

Heyyyyy! Nuevo cap UwU! Y más rápido que el otro xddd.

Es súper corto, pero intenso, dramático y lleno de información importante 😈

Pongan sus teorías de lo que ha pasado y de lo que pasará en los próximos caps aquí —>

Los amo muchísimo,

                                            Valeriiia la puerquita_RG


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 14, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Experimento Nº94Donde viven las historias. Descúbrelo ahora