❤︎ 𝑲𝒊𝒍𝒐𝒔 𝑫𝒆 𝑨𝒎𝒐𝒓 ❤︎. «ᵒᵐᵉᵍᵃᵛᵉʳˢᵉ»

B͟u͟l͟i͟m͟i͟a͟ 9: 𝐷𝑟𝑜𝑔𝑎

༒︎𝙺𝙸𝚕𝚘𝚜 𝙳𝚎 𝙰𝚖𝚘𝚛༒︎

ㄥ乇ㄖ几

Podía escuchar como los pájaros cantaban... Como el olor a tierra mojada entraba por mi ventana, la lluvia de anoche fue algo hermoso.

Me levanté respirando algo de aire, se sentía genial.

Me estire y me levanté a vestirme, después de todo hoy tendría mi cita con Diego, no he hablado con el desde el beso. Cada vez que lo miro a la cara solo puedo recordar esa escena de el penetrando mi interior.

Al salir de mi cuarto mire a los gemelos con....

-¿¡VIEJO!?- Mi mirada fue directo a los infantiles que se escondían atrás de mi tío

-¿Que así saludas despues de tantos años a tu viejo?- trato de abrazarme pero lo esquivé y se golpeó con la pared por su impulso.

-Quiero una explicación. ¿Cuando llegó? Y ¿¡Por qué no me avisaron!?- lo último lo pregunté alzando mi voz.

-Uf... ¿Que nunca dejas tu comportamiento de alfa?, Eres afortunado de tener un par de alfas a tu lado..-

Lo ignore y empecé a prepararme un café.

-O vamos Leo, he venido desde lejos para verte.-

- No te quejes tu decidiste enviarme lejos ¿Lo olvidaste? Y no me digas Leo, ya no soy el de antes—

Note su sonrisa pícara como siempre.

- JAJA. Cómo sea.- Se sentó junto a los gemelos y empezó a platicar con ellos. No podía escucharlos pero no me afectaba, no me interesaba en lo más mínimo lo que el viejo les dijera.

Saque mi cuchara de mi taza y empecé a tomar, tome la taza por su infererior y tomé.
Tenía mañas raras, mis mañas raras.

Tome el periódico y empecé a leerlo. Accidentes robos, política. No había nada de mi interés pero bueno, no tenía otra cosa que hacer.

- Me alegrará conocer a Diego...- el sorbo que tomé fue escupido hacia la hoja del periódico. Seguido empecé a toser.

- ¿Que? - Mire de nuevo a Emma y Nolo.

-¡No!, ¡Nosotros no le dijimos nada! Por favor...- ambos se arrodillaron. Lo ignore y me acerque al viejo.

- Crees que no lo sé todo de mi sobrino favorito...- iba a tomar de mi café pero se lo impedí.

-¡Largate!- gruñi despues tome sus cosas y se las di. Lo empuje hacia la salida.

-No puedes echarme. Tengo derechos.-

-Esos derechos se acabaron cuando me envió aquí- Lo saque y le cerré la puerta en la cara.

- Si no hubiera sido por mi maldito crío, tu estuvieras en la calle con hijos y mendigando.-

-¿Que lo hace diferente ahora?, No puedo tener hijos. Es lo mismo-

Camine hacia mi cuarto y la cerré sin escuchar a los gemelos.