❤︎ 𝑲𝒊𝒍𝒐𝒔 𝑫𝒆 𝑨𝒎𝒐𝒓 ❤︎. «ᵒᵐᵉᵍᵃᵛᵉʳˢᵉ»

Kɪʟᴏ 1

[Diego]

Ahí estaba yo, como de costumbre.
Me había levantado para arreglarme pero de tope me he encontrado con el espejo, aquel trozo de vidrio que me recordaba mi verdadera forma, aquel objeto que sin que lo notara se burlaba de mí. Esa cosa inútil que con tan solo mirarla cada despertar hacia que empezará mal el día.

Mire una vez más mi cuerpo, me sentía del asco, mi madre decía que la belleza está en el interior, pero.. en esta sociedad de mierda quien carajos va a tomar enserio nuestra persona interna.

Un antiguo amigo me decía que no le hiciera caso a las burlas, claro como a ellos no les decían ni criticaban siempre que los veían, toda la gente a mi alrededor se alejaba...
Eran hermoso/as, delgado/as o fuertes con abdomen y yo solo... No encajaba en ellos..

Sacudí mi cabeza y la palme, después abrí y cerré los ojos con la esperanza de ver aún que sea por un segundo un cuerpo bien formado, con abdomen digno de un alfa, pero no, no había nada ni siquiera un segundo, mi mente se negaba a mirarme de otra forma...

Dejé eso de lado y me duche, me vestí y tome mis cosas, baje hacia el primer piso, al tomar asiento en mi mesa observé una foto de mi familia antes que todo.
Todo iba bien, hasta que por una extraña razón que aun desconozco mi madre se volvió loco, empezó a alimentarme más de lo debido, y esa costumbre se quedo, mi padre un Alfa de clan digno y orgulloso lo encerró, y a mí me abandono, ni siquiera se molestó en ayudarme, ya que estaba gordo.

Cerré mis ojos por un momento

Padre ayúdame!, Por favor soy tu hijo...

¿Mi hijo?, un maldito estorbo gordo como tú jamás sería mi hijo....

Abrí mi ojos tranquilos, mi infierno comenzó desde que había nacido y no me di cuenta, ahora en la única persona que amo y confío está encerrado en un hospital psiquiátrico. Mi padre ahora tiene más hijos y ahora ellos están disfrutando de lujos mientras que yo me preparo para ir a la escuela.

Salí de mi casa, gracias a mi madre, la tengo. El motivo de por qué no lo visito ni lo saco de ahí es por qué no sé cómo carajos me verá, me preguntaba cual sería su reacción al verme, se pondría feliz o le daría asco.
Siempre fue muy bueno conmigo, pero no recuerdo muy bien mi pasado, y no quiero que se aleje de mi.

Llegué al portón de mi escuela, antes de entrar mire que mi amor secreto estaba ahí junto a los chicos que me molestaban, pero en realidad me gustaba esa Omega, no la conocía muy bien pero me había hablado en una clase y me emocioné mucho.

Trate de acercarme pero un chico paso y me empujó tirando mis libros al piso, note como todos se me quedaban viendo, fue cuando sin importar las miradas trate de agacharme para poder recogerlos.. empezaron a murmurar y a reírse, después empezaron los insultos.

-- Que esperas maldito cerdo recogerlos...-- El mismo chico que me había empujado recogió el último que me quedaba, pero después empezó a aventarlo.-- Devuélvelo por favor..--
Era un libro importante, no podían ver lo que había dentro, quería golpearlos pero no serviría de nada, no ganaría, mientras ellos jugaban al gato con bola de estambre conmigo, pero cuando por fin iba a quitárselo me empujo haciendo que yo me callera, no note que el Alfa respetado dominante de toda la escuela se acerco le arrebato mi libro y me sonrió.

Yo pensé que me lo devolvería pero empezó a romper las páginas, todos reían a su alrededor. El tipo me miro y terminando de romper mi libro, un libro que mi mamá había escrito para mí, ahora estaba echo trizas en el suelo.
Mire al tipo con enojó, este me miro y piso lo que quedaba del libro para después inclinarse y decirme

-- Aquí tratamos como animales a los que son animales, ¿No es así!?-- todos empezaron a contestar que si-- ¿Ya oíste cerdito?, Lárgate de aquí si no quieres que te haga a la parrilla.

Me levanté con un poco de dificultad y tome lo que quedaba de mi libro, quería llorar..

¿Pero por qué lloraría?, Para todos ver a un alfa llorar sería un tema de asombro y algo mal visto, pero a mí no me importaba, si era alfa pero parecía más un Omega, la gente empezó a irse dándome uno que otro empujón al pasar a mi lado, se rían y reían, no quería, pero no podía hacer nada.

Aquí en mi vida, lo que he aprendido es que el mundo está echo para los fuertes, no para los débiles ...

𝕂𝕚𝕝𝕠𝕤 𝔻𝕖 𝔸𝕞𝕠𝕣 ❤︎
De: 𝓛𝓮𝓷𝔂𝓡𝓮𝔂