Cap 6

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[Camila]

Terminé de arreglarme para poder ir a la casa de mi amiga Alejandra para que el chofer de Zabdiel me recoja allá, ya sé que está mal mentir pero mi futuro depende de mi relación, sus papás jamás me hubiesen aceptado si supieran que no tengo los millones que aparento pero como piensan que si los tengo me adoran y esos son puntos para mi.

Me enamoré de él, es un hombre maravilloso y multimillonario junto a él puedo tener la vida que siempre he querido y las que mis papás quieren que tenga y la que nunca pudieron darme.

Siempre que salgo con Zabdiel trato de hacer que me compre todo lo que quiera en ropa,zapatos, accesorios, todo lo costoso que mis papás no me pueden dar porque sus trabajos son miserables y vivimos de arrimados con mi tía que siempre dice que no hay que mentirle a Zabdiel sobre mi procedencia y que no debo avergonzarme de la familia que tengo pero odio ser pobre y él es hombre el que necesito, fue muy difícil al principio porque él quería conocer a mis papás y no podía traerlo aquí y mucho menos decirle que no tengo dinero, mis papás siempre estuvieron de acuerdo en que le mintiera porque así puedo ayudarlos también.

Para que Zabdiel conociera a mis papás le dije a mi amiga que me prestara su casa de verano en Puerto Rico, él de inmediato aceptó porque es su país natal y sus papás viven allá, me causó muchos nervios al principio porque mis papás tenían que fingir muy bien sobre sus "empresas de textiles" esa es la empresa que ellos siempre han querido tener pero no tienen dinero para hacer eso realidad porque tampoco cuentan con el apoyo de mis abuelos quienes siempre les negaron todo y los mandaron a trabajar desde muy jóvenes para que los mantuvieran. En fin mi vida es una farsa por ahora porque si me caso con Zabdiel mis papás tendrán la empresa que siempre tuvieron.

Últimamente él ha estado distante que ya ni siquiera quiere estar conmigo y me preocupa porque no quiero que sepa la verdad, me dijo que necesitaba hablar conmigo de algo importante y tal vez es lo que yo tanto he esperado desde que lo conocí. Ser su esposa. Así toda mi vida se solucionaría por completo, me miré en el espejo y estaba perfecta, este vestido que él me había regalado que por cierto es muy fino, me quedaba de maravilla.

Bajé de mi habitación y me acerqué a mis papás

—Ya me voy, Zabdiel me invitó a almorzar—voltearon a verme

—Esta bien hija, recuerda que debes hacer que te pida matrimonio pronto—habló mi papá y asentí—así por fin podremos salir de este basurero—hizo mala cara

—Así es hija, vete ya que se hace tarde y después él no te encontrará en la casa de Alejandra—apoyó mi madre

—Adiós—salí de la casa y me encontré con Mike, es un chico lindo pero vive en esta pocilga y no se compara en nada con Zabdiel

—Hola Cami—saludó con una sonrisa

—Hola—dije nada más

—Me preguntaba si...¿querías salir conmigo un día de estos?—preguntó algo apenado

—Cuando tengas muchos millones, vivas en el mejor barrio de Miami, tengas todos los lujos que me merezco, tus padres sean famosos empresarios y tengas una carrera profesional ahí si puedes invitarme a donde quieras mientras no, permiso tengo afán—dije con desprecio y pasé por su lado, ¿qué le pasa? ¿de verdad cree que puede salir conmigo? me merezco una vida de reina y él nunca me dará eso, tomé el transporte público y como cosa rara varios hombres me miraron como si fuese un postre y quieren comerme, ignoré eso.

[>>>]

—No deberías seguir mintiéndole a Zabdiel, él es un buen hombre y no merece que le digas más mentiras—aconsejó mi amiga, rodé mis ojos fastidiada, ella siempre está reprochándome que debo decirle todo

—Nunca le diré—brame enojada—a no ser que me digas que te gusta mi novio— levanté una ceja y ella me miró desconcertada

—No eso jamás, solo que no me parece correcto que él siga creyendo que eres de buena familia y me uses a mi como tu fachada—confesó un poco triste, eso me hizo sentir un poco mal porque ella es la única amiga que tengo y nunca me ha juzgado por no tener dinero incluso sus padres me pagaron todo el colegio y la carrera universitaria cuando iba a conseguir trabajo de secretaria conocí a Zabdiel y no me pareció necesario trabajar

—Eso no importa ahora, después de que me case con Zabdiel todo se acabará y nunca más tendrás que mentir por mi, eres mi única amiga y no quiero perderte—me miró confundida

—¿Te vas a casar con Zabdiel? ¿cuando pasó eso?—cuestionó ceñuda 

—Bueno aun no pero sé que ahora que vaya a almorzar con él, me pedirá que sea su esposa y tal vez por eso él estaba tan distante, estresado y tampoco había estado conmigo porque estaba esperando el momento para proponerme matrimonio—sonreí

—Está bien—habló no muy convencida—no quiero que te desilusiones, así que no te apresures a nada—bufé molesta

—Verás que si y cuando llegue tendré un anillo de compromiso aquí—señalé mi dedo anular izquierdo

—Señorita Camila ya llegó por usted el chofer del joven Zabdiel—avisó la sirvienta sin mirarme, yo nunca le he caído bien a la sirvienta de Alejandra

—Gracias—le di una sonrisa falsa—nos vemos más tarde amiga—le di un abrazo y salí de su casa

—Buenas tardes señorita—saludó Arturo, el chofer de Zabdiel mientras me abría la puerta del auto

—Buenas tardes Arturo—le devolví el saludo con una sonrisa y subí al auto, él cerró la puerta y a los pocos segundos subió él

Miré la foto que tengo de fondo de pantalla con Zabdiel, todo es por nosotros Zab te amo más que a nadie y sé que estaremos juntos durante mucho tiempo.

AMANTES DE UNA NOCHE |ZABDIEL DE JESÚS Y TÚ|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora