Cap 27

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[Zabdiel]

Después de varios tragos y preguntas ya estaba un poco ebrio y terminamos en lo que había esperado aunque ________ no bebió, tal vez está en alguna dieta o algo porque en la cena tampoco bebió.

________estaba dormida en mi pecho, se veía muy hermosa, jamás pensé volver a sentir esto después de tantos años, sé que debería ser más sincero con ella sobre mi vida personal porque después de todo somos pareja pero creo que ambos no nos tenemos la suficiente confianza para hablar de nuestro pasado.

Aún recordaba su cara de preocupación cuando me dio el pastel, la verdad sentí unas ganas inmensas de llorar cuando tuvo ese pequeño, pero especial detalle por mi cumpleaños. Ella es mucho más hermosa de lo que pensaba, cada día me sorprende más y soy el hombre más feliz a su lado.

Un celular empezó a sonar, pensé que era el mío pero era el de __________, lo tomé y en la pantalla decía que era Chris, son las 2 de la mañana ¿que querrá a esta hora? contesté la videollamada

¿Zabdiel?preguntó confundido

Hola amigo, dime que te tiene despierto a esta hora

¿_______ está ahí?asentí—ponla al teléfono por favor habló impaciente

Está dormidapuse la cámara

Cuando despierte dile que necesito hablar con ella urgenteasentí—gracias, descansa y cuida a mi amiga porque si no lo haces no me interesa que seamos amigos y mucho menos socios, ¿me entendiste?dijo con cierta molestia y asentí nuevamente

Yo le digo, cuídateasintió y colgué

Que extraña la actitud de Christopher, ¿que habrá sucedido?, dejé nuevamente el celular en su puesto y me acomodé nuevamente en la cama, estaba a punto de cerrar los ojos cuando escuché a _______ hablar pensé que se había despertado, pero no era así cuando la vi dormida mientras se quejaba.

Ella estaba un poco sudada, se movía en la cama

—Por favor déjame—suplicaba, otra vez esas pesadillas

—Aquí estoy amor—la abracé más

—Por favor no hagas esto—varias lagrimas empezaron a salir, ella se despertó de golpe y se sentó en la cama e imité su acción

—Calma amor aquí estoy—acaricié su cabello, ella empezó a llorar—sólo fue una pesadilla amor nada es real,aquí me tienes—la abracé con cuidado por los hombros

—Si era real, todo si fue real—sollozó—la razón por la que estuve en la casa de Chris no fue por un accidente—iba a seguir hablando pero la interrumpí

—No tienes que contármelo si no te sientes preparada para hablar de eso—negó

—Tengo que hacerlo—asentí—después de que tu y yo tuvimos ese encuentro la noche que nos conocimos, yo había llegado a mi casa en la que vivía con mi ex novio Joel—hizo una pausa, sus lagrimas no paraban de salir, de verdad le dolía esto—yo me estaba alistando para ir al trabajo y él llegó muy enojado porque no contesté sus mensajes ni llamadas la noche anterior, traté de explicarle las cosas pero él notó las pequeñas marcas que tenía en la muñecas, se enojó muchísimo y me tomó de las muñecas lastimándome mucho después sospechó que había pasado la noche con alguien pero él pensó que fue con Chris, descubrió los chupetones de una manera muy brusca y me golpeó—sentí como el enojo me iba invadiendo—no solo fue eso si no que también él abusó de mi y después de eso nuevamente me golpeó hasta casi matarme—la miré sorprendido

—No puedo creer que ese idiota se haya atrevido a hacerte eso, es que de tan solo pensarlo me enoja, perdón por haberte hecho hablar de esto—ella se abrazó más a mi

—Tu no tienes la culpa de nada,tenía que decírtelo para así poder tener un poco más de paz, es algo que me duele porque después de todo yo a él lo amaba y teníamos una buena relación y no sé que fue lo que cambió—soltó un pequeño sollozo

—Debió ser muy difícil para ti todo esto pero aquí estoy contigo y lo estaré mientras tu me lo permitas—dejé un beso en su cabeza y la miré

—Gracias por entenderme y perdón por no haberte dicho antes—limpió unas lagrimas que salieron

—No tengo nada que perdonarte era algo que es difícil para ti de contar y así no me hubieses dicho nada hubiese esperado a que estuvieses lista para hablarlo, así que no te preocupes, ¿bueno?—asintió—ahora ven vamos a dormir—nos acostamos nuevamente en la cama, ella se acomodó en mi pecho, empecé a acariciar su cabello y ella cerró sus ojos. Jamás pensé que ella estuviese cargando con una cosa como esa, es que de tan solo pensar que ese idiota le hizo eso me dan ganas de matarlo, eso es lo peor que un hombre le puede hacer a una mujer.

—¿En qué piensas?— volteé a verla

—Nada importante amor, ahora que me acuerdo Chris te llamó ahorita y dijo que lo llamaras más tarde que era muy importante—se quedó pensando un momento luego asintió

—Me está doliendo un poco el cuerpo me dejaste mal—reímos

—No seas exagerada aunque a mi  me está doliendo la cabeza pero un poquito nada más–negó divertida—quiero quedarme hoy todo el día en el hotel contigo—dejé un beso en su frente

—Estoy de acuerdo con eso, pero con una condición y es que vayamos por lo menos a la piscina, ¿si?—hice como si estuviese pensando

—Lo que tu quieras mi vida—sonreí

—Te amo—dejó un corto beso en mis labios

—Te amo—vi cuando ella bostezó—ven a vivir conmigo ¿si?—ella volteó a verme

—Me encantaría—sonrió

—¿Eso es un si?—asintió—descansa mi amor—cerré mis ojos y me acomodé bien la cama sin dejar de abrazar a mi novia

AMANTES DE UNA NOCHE |ZABDIEL DE JESÚS Y TÚ|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora