Conexión de hermanas

Capítulo 13

-¿Por qué no me dijiste nada? -me reclama mi madre.

-Mamá, Amunet y yo decimos no preocuparles ni a ti ni a papá.

-Pero es que esto no es cuestión de si nos tenemos que preocuparnos o no Sakhmet. Brenda no es alguien cualquiera, ella es heredera de esa organización, Atque dolo es una organización de hace siglos. Atque dolo siempre quiso tener todo el poder para que todas las criaturas mágicas estén en su poder y los mortales, ya no existan. Nunca pueden tomar decisiones solas, ¿entendieron?

-Si -responde Amunet que llegó pocos segundos después que yo.

-Lo que hicieron fue muy irresponsable, pero no es hora de hablar de eso, tenemos que prepararnos. Sakhmet y Amunet llamen a todos, los quiero aquí en 2 minutos -dice mi padre.

Sin pensarlo vamos corriendo a llamar a los chicos que estaban esperando espiándonos detrás de las cortinas de las ventanas. Menos Gemma que es la más seria y seguro que no le importaba lo que estuviéramos haciendo y lo confirmamos cuando entramos y estaba tan tranquila viendo una película y comiendo palomitas.

-¿Por qué me miran así? ¿Quieren? -pregunta acercándonos el bol de palomitas.

-No, gracias -contestamos Amunet y yo a la vez.

-Bueno -responde.

-¿Por qué vinieron? -pregunta Danae.

-Al parecer mi difunta abuela que en paz descanse, le informo a mi madre que ya venían, así que ustedes dos que querían acción, ya la van a tener. Por cierto tenemos que ir afuera mi padre va a hablar y seguro va a dar órdenes importantes -digo.

-¿Y por qué todos le hacen caso a tu padre? -pregunta Gemma con la boca llena.

-Porque mi padre y mi madre son los que mandan en el mundo mágico.

-¿Y por casualidad no les pareció que ese pequeñísimo detalle nos lo tenían que decir? -pregunta Matt.

-Se nos olvidó, bueno vayamos afuera -digo a la vez que empujo a todos por la puerta.

-¿Ya están todos? -pregunta mi padre.

-Sí -respondo.

-Ustedes en serio buscan morir -dice mi padre.

-Esperen un momento, ¿Ustedes saben lo de Amunet? ¿Cómo nos encontraron? -pregunto interrumpiendo a mi padre y dándome cuenta de esos detalles.

-¿Saben lo que es un hechizo de rastreo y uno de la verdad? -nos recuerda mi madre.

-Ya saben por qué estamos aquí, llevamos luchando con esta organización durante décadas y nuestros antepasados también lucharon contra ellos. Hoy por fin tendremos una oportunidad para acabar con ellos de una vez por todas. Así que ahora todos preparen sus armas y prepárense para lo que se viene. Es mejor si no entrenan, porque si lo hacen se cansarán y no tendrán las suficientes energías. No hay más que decir, cuando vengan, ataquen -ordena mi padre interrumpiéndonos.

-Como usted diga -responden todos.

-Vayan y preparen sus armas -dice mi madre.

-¿Ustedes también van a luchar? -pregunta Amunet.

-Claro, es nuestro deber -responde mi padre.

-Chicos, vamos a prepararnos. Tienen que tomar las pociones -digo.

-¿Pero cuánto duran? -pregunta Eric.

-Aproximadamente 5 horas -responde Amunet.

-Y no creo que la lucha dure 5 horas así que vayan -digo.

-Vale -responde todos.

La mayoría estamos listos, solo quedan algunos que se tienen que poner algunos guantes, escudos y esas cosas. Los chicos y yo estamos en la sala, cada uno pensando en lo suyo. Mis padres están ayudando a que todos estén listos.

-Si quieren pueden irse, ya vinieron refuerzos -dice Amunet.

-Claro que no, dijimos que las íbamos a ayudar y eso va a ser hasta el final -dice Félix a la misma vez que todos asienten apoyando lo que dijo.

De repente escuchamos algo, una voz saluda a todos, una voz que no reconocemos, pero todos estamos seguros de quién es. Cuando vemos a través de la ventana, vemos a un montón de encapuchados con túnicas y a una mujer morena, alta, delgada, ojos negros, pelo largo y negro recogido en dos trenzas.

-Es ella -confirma Amunet.

-Chicos pase lo que pase, gracias por todo -digo.

-No va a pasar nada -afirma Danae.

-Espero -digo cuando salimos de la mansión.

-Pero bueno, pero si también están mis mellizas favoritas. Un gusto verte de nuevo Amunet -dice Brenda.

-¿Por qué no acabamos con esto de una vez? -digo empezando a impacientarme.

-Como tú quieras, que comience el juego.