FELIX ANDERSE...
Trate de ducharme lo mas rápido posible, y me coloque una capucha encima, si iba a hacer algo así de peligroso tendría que mantener el anonimato al menos mientras ocurrían los hechos
Al salir tuve que atravesar toda la ala para llegar hasta Lea, toque la puerta de su habitación, me aje la capucha y la espere
''Lea, ábreme ''
Una chica pelirroja con ojos dorados...mas fácil una chica parecida a mi abrió
''Félix?, adelante pasa'' abrió la puerta
''Ah no es que'' rayos que le iba a decir'' Ahhh''
''Vamos dime'' me dedico una sonrisa ''a menos que se trate de un chico'' bromeo
Eso
''Bueno si de hecho es sobre un chico''
''Enserio?'' me abrazo ''eres el mejor hermano del mundo''
Si claro el mejor que la iba a traicionar
''Dime de quien se trata''
''Alexander León''
''...''
''Vas a ir?''
Asintió
''Te sigo''
No muy confiado la lleve hasta las alcobas de la corte vampiro seguro de que fuera lo fuera, pasara lo que pasara no había vuelta atrás
Al llegar vi a Tyler hablando con el rey Adexe parecía un poco sospechoso ya que se suponía que tendría que estar arreglando el asunto del problema de la Reunión pero no le tome mucha importancia ya que estaba mas preocupado por lo que fuera pasar conmigo y mas aun con Lea
''Mi amigo'' me recibió Alex '' que te dijo mi dama?''
''Bueno en si no le dije nada'' lo mire buscando en su mirada un poco de misericordia no la encontré ''la traje''
Lea entro cuando la llame y observo desafiante a Alex
''Querías verme, aquí estoy deja a Aline en paz'' se acerco a el y se puso de rodillas ''es solo una niña''
Uno de sus guardias me saco y hubiera sido a la fuerza si no hubiera sido porque deje que me sacara por el shock y por ver lo que hacia con ella y lo ultimo que vi fue a Alexander sonreír macabramente y levantar a mi hermana
''Tu serás el remplazo de tu hermana'' se cerro la puerta
''Por ahora''
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El Otro Lado
Science Fiction-Acaso haz visto todo lo que hice por ti? -Ya no importa. Me haz destruido. Ganaste el juego Izan Mi cuerpo cedió y se acurrucó sobre la única persona que me quedaba. Era acogedor, cálido y cómodo, pero era un maldito infierno