True love ➨ BarónWinter |Terminada|

14 [Final, parte 1]

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—Oh mierda, aquí vamos está noche.— dijo Bucky, mientras llegaban las afueras de las instalaciones.

Había llegado el momento que estaban esperando. Tenían todo para detener a los Flag-smashers y su plan de detener las votaciones y secuestrar personas.

Nadie podría salir herido.

Habían muchas personas e incluso los noticieros del país estaban presentes, transmitiendo y captando los momentos de tensión que habían.

Ya los Flag-smashers estaban en las instalaciones.

—Mi amor, con cuidado, por favor.— le pidió Zemo, desde el otro lado de la línea.

—No te preocupes, estaré bien.— Bucky le aseguró—. Helmut, no te muevas de dónde estás, te lo pido.

—Aquí estoy, no pienso moverme.

—Te amo, y después de esto nos vamos de aquí.

—Yo también te amo, James.— sé quedó callada por unos segundos—. Cuídate.

La llamada terminó y Bucky guardó su móvil, para luego seguir avanzando.

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—No entiendo que estamos esperando, Karli, ya tenemos que estar allá ayudando a Bucky y a Zemo.— Sam sonaba desesperado.

—Ya Sam, cálmate que no debe tardar en llegar.— le contestó Karli, para luego soltar un suspiro.

Estaban en una bodega abandonada llegando a las afueras de la ciudad, Karli les había pedido que fueran pero no les dijo el porque. No solo estaban ellos dos, sino Joaquín.

—Ya dilo, Karli.— lo miraron—, ¿Qué hacemos aquí?— le preguntó Joaquín, con mucha intriga.

Karli iba a contestarle, pero vió una sombra negra en la entrada, entonces supo que ya había llegado, y eso hizo que sonriera.

De inmediato, Sam y Joaquín sé alarmaron, y cada paso que daba aquella persona, los preocupaba aún más.

—Hay tienen la respuesta.— dijo Karli sonriendo.

Finalmente, esa persona llegó y pudieron ver su rostro, era una mujer, de piel blanca y de cabello negro corto, con aspecto asiático.

—Por fin tengo el honor de conocer a Sam Wilson, mejor conocido como Falcón.— habló aquella mujer, para luego sonreír—. O mejor dicho, conocido como el Capitán América.

Sam frunció el ceño, y miro a Karli, quién le asintió, mientras que Joaquín no sabía que pensar.

—¿Y quién es usted?— le preguntó Sam con confusión, con intriga y sin saber que pensar.

Aquella mujer le extendió la maleta de vibranium al moreno, quién la tomó aún confundido, pero eso desapareció y llegó la sorpresa.

Cuando ella sé transformó en lo que realmente era, dejó a Sam con la boca abierta al igual que Joaquín.

—Me llamo Kim Young, y soy una nueva aliada.— dijo, para luego reír un poco.

Karli asintió con una gran sonrisa, mientras que Sam aún seguía atónito y Joaquín ni sé diga. Todo era sorprendente, más que eso.

—Eres una...— Sam no pudo terminar la frase, y ella le asintió con una sonrisa.

—Sí.— le confirmó aún sonriendo—. Yo soy el contacto del que Karli les habló, vine a ayudar porque sé que necesitan una mano extra, a lo cual no me pude negar. Todo por un bien mayor.