Narra: Dave
No tenía otra opción, sabían donde vivía, estaba asustado y solo con pensar en que mi vida se podía ir a la mierda hoy mismo…, tenía ganas de echarme a llorar, quien hubiera dicho que un tío como yo asqueado de la vida estaba a punto de llorar como una nenita, joder, me sentía muy débil e impotente, lo mejor era que, con el máximo cuidado, fuera al basurero.
Fu a la cocina y cogí un cuchillo, (ya ves tú lo que podría hacer con un cuchillo de mierda contra todos eso tíos, pero mejor eso que nada), y no dejaba de pensar en que debería llevar un chaleco antibalas, pero evidente mente no tengo de eso y no me daba tiempo de hacerme con uno (aparte de que a saber de donde habría sacado yo eso). Estuve como 20 minutos de pie inmóvil pensando en que mas podría llevar, pero no se me ocurría nada, supongo que simplemente quería alejar lo máximo posible el momento de encontrarme con esa banda.
Me arme de valor y salí a la calle, mi madre seguía encerrada en su habitación así que simplemente di un fuerte portazo al salir para que se diera cuenta de que me iba. “Venga Dave, intenta ser positivo, si tanto te quieren en su banda no te harán daño” me decía a mi mismo para tranquilizarme, el camino al único basurero de la ciudad se me hico corto, y eso que queda a quilómetros de casa.
Allí me encontraba, en frente de la puerta del basurero, trague saliva y entre, di unas cuantas vueltas hasta que me encontré con un tipo que estaba apoyado en una pila de basura, tenía cara de enfado y mal rollo, intente pasar por delante del como si nada, pero cuando ya estaba a punto de perderlo de vista me grito:
- ¿Por casualidad no serás Dave?-
- Sí, soy yo- Dije intentando parecer sereno cuando me estaba cagando en todo.
- Mi jefe te busca, pasa por aquí- Dijo mientras apartaba la pila de basura sobre la cual estaba apoyado dejando al descubierto una puerta metálica que acto seguido abrió con una llave que llevaba atada a la cintura. Yo me que de un momento parado, no estaba del todo seguro de si debía pasar o que, allí dentro estaba oscuro, ¿y si todo era una emboscada y de pronto me atacaban por detrás?.
- Más vale que te des prisa trozo de mierda, al jefe no le gusta que le hagan esperar.- Esas palabras fueron como un cubo de agua fría que interrumpieron mis pensamientos paranoicos, pero seguro que no eran más que eso, simples paranoias, así que tome aire y entré.
Baje unas escaleras a oscuras y de pronto note como unas manos me empujaron a la pared y me separaron las piernas, luego empezaron a palparme todo el cuerpo, por un momento pensé que me iban a violar o algo, pero en cuanto note que me que me quitaban el cuchillo que escondí bajo la chaqueta me di cuenta que solo me estaban cacheando. De pronto tosas las luces se encendieron y pude ver como estaba en una sala no muy grande, al fondo estaba el tío que me estuvo hablando el día de el cobre, el supuesto jefe, estaba sentando en un sofá destrozado y a cada lado tenía un matón haciéndole de guarda espaldas, no había nadie más en la sala a parte de el tío que me había cacheado.
- Esto es todo lo que llevaba encima jefe- Dijo el dio que me había quitado el cuchillo y de pronto su “jefe” se empezó a reír.
- Que gracioso eres chico, de verdad esperabas presentarte aquí con este cuchillo, es que hay que tener huevos- Dijo sin parar de reír ni un segundo. No estaba para bromas, así que sin más rodeos solté:
- ¿Qué es lo que quieres de mi?-
- ¿Es que no te lo dije ya?, quiero que te unas a mi banda-
- ¿Y si me niego?- Estaba cagado, pero no podía acabar como esa escoria así porque si.
- Bueno, en ese caso me temo que acabar muerto, pero no solo tú, sino también esa puta enferma que tienes como madre- El hecho de que insultara a mi madre me sentó como una patada en el estomago, pero tampoco tenia otra opción.
- Esta bien, pues me uno a la banda si eso es lo quieres, pero ¿puedo saber al menos para que me quieres?- La verdad, con el futuro que me esperaba ya no me resulto nada difícil seguir preguntando.
- No vayas tan deprisa, como toda banda, la nuestra también tiene un ritual de iniciación, y en cuanto al motivo por el que te quiero con nosotros…, me temo que por ahora es altamente confidencial.-
- Entonces, ¿Qué debo hacer para entrar en la banda?- Pregunte con miedo a que la respuesta fuera cualquier barbaridad.
- Preséntate mañana en este sitio- Dijo mientras escribía algo en un papel que le dio a uno de los dos guardaespaldas que tenia a sus lados, y este me lo entrego a mí. En el papel había una dirección.
- Puedes irte, mañana te será revelado el resto- dijo, y los dos matones me acompañaron hasta la puerta. Al salir, el tío que estaba apoyado sobre el montón de basura volvió a cerrar la puerta con llave, pero antes de que me fuera me dijo:
- Aquí ninguno estamos por gusto ¿sabes?, no lo olvides- Dijo sin mirarme a la cara, no le respondí, simplemente me di media vuelta y me fui a mi casa.
El resto de el día me lo pase en la cama sin hacer nada mirando el trozo de papel que me había dado, no había nada de especial en el, así que simplemente dedique la tarde a recorrer mentalmente el camino de mi casa hasta ese sitio y intentar recordar lo que había en el, pero no suelo pasar por esa zona, así que no tenía ni idea de lo que podía ser. Tenía mido de salir a la calle, así que simplemente caí dormido.N
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BLOODY VENUS
Mystery / Thriller"Ni a 400 metros bajo tierra habré caído lo suficientemente bajo como para dejar de luchar, por que cuando se esta tan lejos de el cielo ya no se le tiene miedo a caer y ya no me queda nada por perder, pues ya no me basta con salir de aquí con vida...