XV

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Jinyoung caminaba por los pasillos de la facultad, jugueteando con una de las esquinas de su celular, sus ojos trataban de evitar el caos a su alrededor, sin embargo, los susurros traspasaban irónicamente sus oídos.

Recordaba exactamente las indicaciones de Shien, y así las había seguido; había llegado dos horas antes a la facultad y se había encargado de pegar las fotografías de Mark y Jackson en cada mural de la misma. Ahora veía como la gente se arremolinaba alrededor de los murales.

Aunque había hecho exactamente lo que aquella mujer le pidió, sintió aún una inquietud colocándose en sus venas y viajando por todo su cuerpo. ¿Qué era capaz de hacer esa mujer por Mark?.

Un reciente escándalo llamó su atención y vió a Jackson arrancando cada papel pegado en cada mural, aún si era totalmente inútil, pues las fotos ahora se esparcían como pólvora por los chats de todo el campus.

Jackson hizo contacto visual con Jinyoung, se acercó cada vez más a el, y Jinyoung juró poder ver en cámara lenta, como el puño del contrario tomaba impulso para estamparse contra su rostro. Jinyoung cayó al suelo y por inercia tocó su nariz, la cual comenzaba a sangrar. Antes de poder mínimamente quejarse otro golpe había llegado a el, y luego otro y otro más.

Las heridas del día anterior se conocían con las del hoy, sentía como su rostro entumecía con cada golpe y comenzaba a ahogarse con su propia sangre, los sonidos a su alrededor comenzaban a mezclarse y difuminarse, el marco de su vista se volvía oscuro y entonces perdió la consciencia.

Al abrir los ojos de nuevo se encontró a Shien frente a el.

-Gran trabajo cariño, vine corriendo apenas me enteré de la gran paliza que te dió tu noviesito, será divertido ver cuando lo expulsen por fin de esa maldita escuela- Jinyoung sintió un nudo en el estómago, quería vomitar, se sentía sofocado por la presencia de la mujer y la felicidad que transmitía al hacerle daño a Jackson.

-Pero después de lo que hicimos, seguro también despedirán a Mark- Jinyoung observó directamente los ojos de la mujer, intento encontrar remordimiento pero lo único que obtuvo fue ampliar su sínica sonrisa.

-Eso sólo me puede beneficiar- Shien comenzó a pasearse por la enfermería en la que Jinyoung apenas se fijó que se encontraba- si Mark se queda sin opciones para subsistir, vendrá directo a mi. Ni sus padres, ni sus amigos querrán cargar con el. Soy su única opción y el se quedará pegado a mi por el resto de su vida- Shien se sentó en la punta de la camilla en la que Jinyoung se encontraba- ¿No es eso lo más romántico que hayas escuchado?.

Y entonces Jinyoung no aguantó más, sintió el líquido espeso tocar su garganta y se obligó a voltear su cuerpo herido hacia un costado para no vomitar sobre la mujer que le causaba náuseas.



Mark caminaba hacia la primera clase que le tocaba dar ese día. El día anterior tuvo que llevar a Jackson al hospital, gracias a que su cabeza no dejaba de sangrar. Jackson ni siquiera le dirigió la palabra, estaba ensimismado y después de todo lo que había pasado, no le sorprendía.

Cada vez se acercaba más a los pasillos de la Universidad y podía ver como la gente se encontraba susurrando en un gran cúmulo. Incluso podría compararlos con Zombies. Mark decidió acercarse más; el suelo de la Universidad solía estar siempre impecable, por eso cuando pisó una hoja de papel rasgada, se inclinó a recogerla. Los ojos de Mark se abrieron grandes y sintió como su respiración comenzaba a faltar. La ansiedad se había convertido en una soga que seguía abrazando su cuello. En aquella hoja de papel, pudo verse a sí mismo y a Jackson. Aquellas temidas fotos que trato de ocultar, aquellas fotos que lo habían obligado a elegir. La frustración llenó su pecho y se dió cuenta de que hacía unos  segundos había dejado de respirar. Aquellas personas que había comparado con Zombies ahora lo miraban, como si en verdad lo fueran. Comenzó a entrar en pánico y pequeños sonidos de agonía salían de su garganta mientras intentaba recuperar el aire.

Una voz sonó detrás de él, y antes de voltear correctamente las manos del contrario se habían entrelazado con las suyas, arrastrandolo lejos de la gente que lo miraba como si quisieran devorarlo.

-Calma, tranquilo, respira amor, esta bien, todo está bien- Jackson mantenía sus manos a los costados del rostro de Mark, tratando sin triunfo de calmar el ataque de pánico de Mark.

Mark miraba directo a los ojos de Jackson. Sorprendido de verlo y sin poder tranquilizarse. A Jackson se le acababa el tiempo y las ideas. Comenzaba a desesperarse. Entonces hizo lo único que siempre le transmitía paz. Jackson besó a Mark. No fue un beso largo ni profundo. Fue un simple roce de labios, como un abrazo y Mark comenzó a respirar. Jackson juntó sus frentes, tratando de ocultar sus lágrimas al mayor, sin embargo  su corazón dolía tanto que sus sollozos resonaban en la pequeña habitación a la que se había metido para ocultar a Mark.

Los delgados brazos del mayor rodearon el cuerpo del menor, ahora era Mark quien consolaba a Jackson.

-Esta bien cariño, todo esta bien, estoy bien- dijo Mark con las lágrimas resbalando de sus ojos- lo siento- siguió bajando un poco la voz, asegurándose de que Jackson pudiera escucharlo- siento haberme asustado. Siento haber sido tan tonto, realmente lo siento.

-No- Jackson ahora secaba con apuro sus lágrimas, tratando de ocultar cualquier rastro de su quiebre emocional, la tenue oscuridad no le dejaba ver correctamente el rostro de Mark, aún así, los ojos de este brillaban bajo la suave luz que entraba desde la ventana en la puerta- está bien tener miedo, a final de cuentas, lo hiciste por ambos, sabíamos que algo así pasaría y esperábamos las consecuencias.

Las lágrimas de ambos volvieron a brotar, sabían que lo que seguía sería muy difícil. Pero antes de remordimientos, sus corazones gritaban una frase aún más fuerte:

- Te amo- Jackson acercó su rostro al de Mark, cortando la pequeña distancia entre ellos.

-Yo también te amo- respondió Mark, sonriendo ante la repentina confesión de Jackson- nunca podré encontrar nada mejor.

Teacher's Pet🐾; MarksonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora