Realmente Espléndido YoonMin (actualizando)

capitulo 2

Mientras recorría el centro comercial con su madre se encontró con una tienda de ropa de su talla, corrió a aquella jalando de la mano a su madre quien trataba de pasar por entre toda la gente que caminaba en aquel lugar.
Todas las personas observando el comportamiento de ese niño rubio de 15 años de edad quien aparentaba unos 10 años por su tierno comportamiento.

— ¡Mami! ¡Mami! — gritaba Jimin con una voz chillona más que emocionado.

— Cariño tranquilo, mantén la calma. — Dijo la madre. — Dime que es lo que quieres de aquí.

— ¡L-la chaqueta m-mami! — aún gritaba el pequeño Jimin mientras señalaba aquella chaqueta

— Esta bien, pero hay que buscar tu talla, ven. — La madre llevo a Jimin hacia la tienda viendo las chaquetas. — Solo queda una de tu talla y es color crema, ¿Le gusta a mi pequeño Jimin?

— Mami... J-Jimin quiere una chaqueta normal y no de crema. — Jimin hizo un pequeño puchero.

— cariño, la crema es de este color... cuando veas una cosa que tenga el mismo color que la crema se le dice "color crema"... ¿Quieres la chaqueta o ya no?

— ¡lJimin quiere la roja mami! — el pequeño aplaudía más que emocionado.

— la roja es dos tallas más grande, te quedará gigante.

— Pero a Jimin le gusta la roja.

Fue así como compraron la chaqueta, afuera hacia bastante frío así que jimin prefirió ponérsela en ese mismo instante, además ahora irían a conocer la nieve y Jimin debía estar abrigado como en las películas lo estaban.
El pequeño subió al auto y se puso el cinturón de seguridad y le presumió la chaqueta a su padre quien estaba ya en el asiento de copiloto para así poder conducir hacia el lugar donde pasarían las vacaciones aquella semana navideña. Una cabaña en la nieve como tanto anhelaba el pequeño Park.

Jimin jugaba un juego de carreras de auto en el celular de su padre mientras sacaba de a poco su pequeña lengua al estar por perder.
Alzó su mirada y vio a sus padres discutir sobre que harían al llegar "comeremos galletas." "me parece injusto, tomaremos chocolate caliente." "cariño, las galletas son una buena opción."
Luego de muchas discusiones aquellos acercaron sus rostros el uno al otro para darse respiración boca a boca, o un beso como dicen las demás personas.

Jimin se quejó y miró por la ventana viendo que iban subiendo una montaña, se cubrió por completo con esa chaqueta que era una talla más grande que el, en eso que desvió la mirada al parabrisas viendo por los agujeros que tenía la chaqueta como decoración, observó que el auto no volteó la curva por lo que cayó por aquella montaña que por suerte no iba tan alto.
Lo único que pudo recordar jimin fue el auto dar vueltas y vueltas en el aire y luego chocando por cada esquina, cuando el auto se detuvo quedando enganchado en un árbol se quejó y vio los rostros de sus padres sangrando y que ellos no se podían despertar como el lo había hecho.

— ¡MAMÁ! ¡PAPÁ! — Jimin comenzó a gritar para despertarlos. — Mami estábamos llegando, ¿Por que nos detuvimos? Papá ayuda a mamá.

Jimin vio que su padre abrió sus ojos de a poco quejándose y soltando palabras sin sentido de su boca, desvió la mirada y notó que su padre estaba hablándole.

— T-Tienes q-que ser u-un chico b-bueno, e-eso
n-nos hará f-felices a t-tú madre y-y a mi... J-Jimin
t-tú eres... l-lo que m-más... a-amamos e-en está v-vida... t-te a-amamos. — Fue lo último que dijo su padre antes de volver a cerrar sus ojos y así no despertar aunque jimin lo moviera fuertemente.

Jimin se quedó abrazando sus piernas mientras lloraba hasta que comenzaron a sonar unos sonidos fuertes, Jimin es sensible a los sonidos agudos o fuertes por lo que cubrió fuertemente sus oídos cerrando sus ojitos empapados en lagrimas mientras murmuraba.
"papá y mamá despertarán... iremos a la nieve a comer galletas".
Eso hasta que un chico se acercó a él y lo sacó de aquel auto con dificultad. La mente de Jimin daba vueltas y vueltas, por lo que no pudo recordar nada más después de ver los números en su reloj y su alrededor cuando lo sacaron de aquel auto.

Despertó en un cuarto completamente blanco, abriendo ligeramente sus ojos vio a un chico también vestido de blanco pero con una camisa verde clara y una corbata a compás de su camisa.
Se quejó y en eso recordó lo qué pasó hace unos instantes.

— Tranquilo, estarás mejor en unos instantes, dime... ¿Te duele algo? — agregó aquel doctor mientras dejaba aquella tabla con un papel donde anotaba y marcaba cuadrados como si fuese un examen de el colegio.

— M-mi m-mamá... y p-papá — Jimin comenzó a llorar quejándose por su dolor de cabeza.

Sintió una mano acariciar su cabello y se alejó rápidamente, vio a aquel doctor frente a él quien lo miraba con una mirada tranquila.

— No te duele nada, ¿verdad? Tus padres... ellos están en un lugar muy lindo, lleno de estrellas, nubes, árboles de algodones. — Hablaba el doctor, jamás pensó que se comportaría así para consolar a un paciente.

Jimin lo quedó mirando unos segundos y luego secó sus lagrimas mientras volvía a acostarse con cuidado en la camilla.

— Jimin quiere... quiere ir ahí. — dijo firme mientras asentía y miraba a aquel doctor.

— Iras algún día, pero cuando tengas muchos años, muchos, muchos años. — dijo tranquilo mientras terminaba de arreglar el cabello de su paciente. — vendrá otro doctor, pero cualquier cosa que necesites puedes contactarme... toma esto, será un secreto entre ambos. Prometo responderte a los segundos.

Cuando el doctor dijo aquello extendió una tarjeta que tenía su número de teléfono y correo electrónico junto a la insignia de aquel hospital y más abajo su nombre... Doctor Min Yoongi.
Jimin la tomó y la guardó rápidamente en su chaqueta, lo quedó mirando y asintió ligeramente.

— J-Jimin llamara al doctor si lo necesita. — asintió ligeramente sonriendo un poco.