➳ Capítulo 1: Stanford

537 50 1
                                    

— ¡Y listo! — dijo la pelirubia palmeando su cama al terminar de tenderla y posteriormente miró a su mejor amiga, quien la miraba desde la otra punta de la habitación sentada en su propia cama mordiendose una uña entre risas y sentada como indio — ¡esto es fenomenal! — dio un giro con una sonrisa enorme en su rostro — ¿viste lo hermoso que es fuera? siento que estoy soñando.

Aquella joven estaba muy emocionada por su nuevo hogar, estudiar ahí era un sueño para cualquiera. Su amiga sólo podía sonreír al verla tan feliz.

— Rosé, es sólo un edificio. — dijo la contraria levantándose para mirar por la ventana.

— No es sólo un edificio, es EL edificio. — dio un pequeño salto de felicidad — iré a merodear, ¿vamos?

— Adelantate. Tengo algunas cosas que acomodar. — Jennie se sentó nuevamente en su lugar y rozó sus piernas con ambas manos mientras le sonreía a su amiga.

Claro. Pero ven conmigo, Morgi, no me abandones en este enorme lugar.

— Te lo prometo. Lleva tu celular, y cuidate... los mayores aquí son raros y molestan.

— Sí. Adiós. — la última palabra fue dicha con afinidad y salió cerrando la puerta detrás. Jennie sonrió.

La pelinegra comenzó a organizar varias cosas que aún no había arreglado, entre ellas fotos con sus amigos que se fueron a otras universidades, fotos con sus papás y con su amiga. También ordenó un poco el baño y se dio una ducha para quitarse el polvo.

Jennie y Rose habían llegado el día anterior a la Facultad, es tradición que la primera noche sea una fiesta total en casa de alguno de los de tercer año para recibir a los de primero, así que no habían podido ordenar nada ni dormir, pero no les importaba mucho porque estaban felices de estar allí.

Cuando Jennie acabó de hacer lo que debía, decidió salir en busca de su amiga la cual no sabía dónde podría estar puesto que no contestaba los mensajes. Quizás estaba con su novio pues este también estaba estudiando ahí.

Al pasar por el pasillo, iba con la mirada fija en el celular intentando contactar a Roseanne quien no respondía. Debido a esto, su frágil cuerpo chocó contra uno más alto y fuerte, lo pudo sentir. Su sangre se elevó de temperatura al levantar la vista.

— L-lo siento... — dijo y lo paso por un lado saliendo de allí corriendo.

— No te... preocupes. — dijo Jungkook quien estaba saliendo de su habitación cuando una pequeña morena de le cruzó. Esta se fue tan rápido que no tuvo tiempo de presentarse, pero no hizo falta pues quedó perdidamente hipnotizado y enamorado de aquella chica cuyo nombre no sabía.

***

— Oye, estuve como una hora buscándote y tú aquí besuqueandote con él. — dijo Jennie al encontrarse a su amiga bajo un árbol a los besos con su novio. Se sentó frente a ellos en la misma manta.

— Lo siento Jennie-booh. Me quedé sin batería. — hizo una risita y su novio murió de ternura por lo que estampó un beso en su mejilla.

— ¿Merodeaste? — preguntó la pelinegra.

— No, no pude. Me crucé con este bombón y fue inevitable sentarnos a darnos de besos. — ambos y rieron y se besaron mientras Rose sostenía la mandíbula del contrario.

— Bueno vamos, quiero ver que tan lindo es este lugar.

Claro. Nos vemos Jimi-booh.

Adiós preciosa.

Las chicas se alejaron poco a poco y Jungkook quien espiaba a lo lejos apareció para sentarse junto a su menor.

— ¿Quién era esa chica que estaba junto a ti y a tu novia?

— ¿Morgan? Es la mejor amiga de Rose desde hace años. No la conozco mucho, cada vez que tenemos oportunidad de hablar se lleva a Rosi así que la he visto muy poco.

— Entiendo...

Jungkook pensó muchas, muchas cosas.

STALKER ; Jenkook Donde viven las historias. Descúbrelo ahora