Miraculous: 30 Year's

09

Bianca estaba instalada en la mansión Agreste, tenía el cuarto consiguiente al de Adrien y estando frente al de Gabriel; quién estaba más alejada era Nathalie, su cuarto estaba en la planta baja, cerca de la cocina y al lado del comedor.

En la noche, Bianca subió a su habitación con dos copas de vino en sus manos, paso por frente la puerta de Gabriel y al ver qué estaba abierta, paso, el hombre se alteró, por suerte solo leía sentado en su sillón, nada raro, pero otras veces suele estar hablando con Nooroo o repasando sus planes en voz alta.

─¿Que haces aquí?─ preguntó con molestia y algo de enojo

─Gabriel, ¿los años te volvieron cascarrabias?─ cierra la puerta y se acerca ─¿No podemos conversar como en los viejos tiempos?

─¿Tiene que ser a esta hora?.

─Es el mejor momento─ le extiende la copa, este la toma ─Lo traje de Italia, no le digas a Nathalie o se lo tomara todo ella sola─ Gabriel sonríe

─No sabía que Nathalie tomaba. . .

─Lo hace en su habitación mientras tiene videoconferencia conmigo. . .

─Ya veo, ¿necesitas algo?.

─No, me entró nostalgia, ¿recuerdas cuando charlabamos en el techo de tu casa bebiendo jugo de naranja?─ el asiente ─Solo quería recrear esa memoria, estamos mayores para subir al techo, pero no para cambiar el jugo de naranja por jugo de uva─ guiña un ojo, el deja escapar una carcajada

─Tienes razon─ bebé un gran sorbo del vino ─¿Puedo saber que paso con Gianno?

─Se consiguió una súper modelo Italiana de veinte años─ toma un poco del vino y desvía su mirada

─Ustedes están casados hace veintiséis años, ¿cómo puede cambiarte así sin más?.

─Creo que se canso de que no pueda darle descendencia. . .

─¿Y si el problema es el?.

─Buen intento señor botones, pero ya hice muchos exámenes y soy yo la que vino fallada─ suspira

─¿Por qué no adoptan?, la solución no está en botarte como si fueras basura.

─Ojala todos los hombres fueran como tu Gabriel, mírate, un sexy multimillonario, que se viste bien y es devoto a su esposa─ alza su copa y le da un gran sorbo

La calma de la habitación fue interrumpida con el estruendoso sonido de la tableta que estaba posicionada en un soporte sobre uno de los muebles, Gabriel se levantó y contesto la llamada.

─Buenas noche señor, recibí una notificación urgente de la fundación Agreste, uno de los niños que estaba en custodia desapareció, la directora quiere saber si usted tiene alguna sugerencia para solucionar esta situación─ hablo la voz de Nathalie desde el aparato, el diseñador pensó en silencio

─¿¡Deberían alertar a la policía cuánto antes!?─ dijo Bianca levantándose de su lugar y apareciendo en cámara

─¿Que haces tu ahí?─ cuestiono está muy molesta ─Sabia que venías solo a molestar

─Solo conversaba con Gabriel, ¿que te pasa Nathalie?.

─No peleen; Bianca tiene razón Nathalie, dile que alerte a Roger, por la hora que es no hay nada que nosotros podamos hacer.

─Muy bien, como ordene, tengan buenas noches.

Cuelga, Gabriel regresa a su sillón y Bianca a su lugar, ambos se quedaron en absoluto silenció, el ambiente estaba extraño aunque ninguno de los dos quisiera admitirlo.