No den rienda suelta

1.2K 69 6
                                    

Me hubiera gustado decir, que no pasó nada esa noche, que solo nos besamos y luego me fui.

Pero en el momento en que mis labios tocaron los suyos supe que no tendría escapatoria.

Enrosco mis brazos alrededor de su cuello pegándolo más a mí.

Él aprieta mis caderas.

Sus labios rozan, lamen desesperadamente, agarra mi cabello en un puño, besándome bruscamente, sin contemplaciones, su lengua se abre paso por mi boca explorando, muerde mi labio inferior, robándome un jadeo.

Nos separamos ligeramente.

Mi pecho sube y baja pesadamente.

Sus ojos conectados con los míos, brillan en deseo.

—esta noche no escaparás de mi—susurra con la voz ronca.

No me deja responder porque sus labios vuelven a los míos.

Mis manos inquietas desabrochan los botones de su camisa

Se separa de mis labios para bajar a mi cuello dejando un rastro de besos húmedos.

Muerdo mis labios tratando de retener los gemidos, pero este tipo me la pone difícil.

Sus manos acarician mis pechos por encima del traje de baño, aprieta ligeramente mis pezones ya endurecidos.

Mis manos acarician su pecho desnudo bajando lentamente hasta su abdomen, tomo el borde de su short jugando un poco con él, bajo un poco más mi mano hasta rozar ligeramente su...

mierda!! Esto es real?

Trago grueso sin despegar mi mano de su ya duro miembro, acaricio lentamente tentándolo.

Él acerca su rostro a mi oído.

—es mejor que pares porque no tendré más opción que follarte en este mismo instante y no queremos eso aún verdad?

Suelto un leve chillido ante sus palabras, deteniendo el movimiento de mi mano.

—muy bien conejita—atrapa el lóbulo de mi oreja entre sus dientes para luego separarse y encontrar mis ojos.

Una sonrisa pícara adorna sus carnosos labios encendiendo más mi interior.

Él piensa que voy a obedecer, pero que crees cazador, eso no pasará.

Sin despegar mis ojos de los suyos aprieto mi mano sobre su erección.

Los ojos de Noah se abren ligeramente, sus iris azules se vuelven aún más intensos haciéndome temblar.

En un movimiento rápido Noah me da la vuelta quedando de espaldas a él y me empuja hacia la cama, caigo de boca sobre esta, el aprovecha para sentarse sobre mi trasero, trato de voltearme, pero el simio este pesa.

—te lo advertí—sus dedos empiezan a trazar un camino hasta las tirillas de mi traje de baño.

Una sensación se posiciona en la boca del estómago impidiéndome decir o hacer algo.

*Esa sensación se llama YA FÓLLAME NOAH *

Shhhhh eso no es verdad

*Ah sí? entonces que haces aquí en primer lugar, pudiste haber huido*

¡Calla conciencia calla!!

Noah se baja de mi trasero para darme la vuelta.

Ya no llevo la parte superior de mi traje, oh vaya.

Él está de pie frente a la cama, frente a mí, sus ojos devorando cada parte de mi cuerpo.

—eres preciosa—dice con voz ronca haciéndome estremecer

Algo más[hermanastros]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora