Adda Miller aprendió a las malas que las personas no son lo que aparentan. A sus 18 años le rompieron el corazón.
Con el fin de alejarse de sus problemas y poder cursar su primer año de Universidad, arma las maletas y viaja a Miami, donde viven su...
"El amor es una bellísima flor, pero hay que tener el coraje de ir a recogerla al borde de un precipicio" -Stendhal.
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Después de cenar y ayudar a Kaden con los platos, cosa que me fue imposible porque solo llegué a levantar un vaso, luego el me regaño y me mandó a sentar en el sofá.
Pero llegamos a un acuerdo el levantaba la mesa y yo, llevaba las demás cosas a la mesita junto al televisor.
Kaden se sentó junto a mi y me extendió uno de los controles. Y yo le pase una de las bolsas.
Abrí unas papas mientras comenzaba el juego, saque una y estaba por llevármela a la boca pero un olor particular me hizo dejarla en donde estaba.
El pelinegro parecio darse cuenta.
-es que...- dejo la bolsa sobre la mesita. -Soy, eemm, alérgica a las nueces.
-lo siento, no lo sabía- dice pasándome una toalla de papel y alejando las frituras de mi.
-gracias y esta bien, no tenias como saberlo- le resto importancia, mientras busco alguna fritura que no me lleven a una dolorosa muerte.
Seguimos jugando y hablando un poco de todo, las clases, el trabajo, etc. Agradezco que no haya preguntado el porqué de haberlo evitado toda la semana.
-¿tienes planes para mañana?- pregunta cuando llega a la línea de meta, ganandome.
Derrotada, suelto el Joystick y me recuesto mirando hacia el techo.
-pensaba visitar la empresa de Charlotte, prometí ir y además mañana la cafetería no abrirá- extiendo la mano para tomar mi bebida. Pero lo único que siento bajo mi mano es algo cálido.
Miro mi mano tomando la de Kaden. Ambos nos miramos, y por impulso lo termino soltando en el momento en el que una chispa de algo, no sabría como describirlo, pasa por nuestras manos.
Juraria que el también los sintió.
¿Sabes que hay algo que se llama electricidad estatica, genio?
-ehhh- aclaro mi garganta. -¿y tú?, ¿tienes planes para mañana?.
-no, los chicos quieren ir otra vez a la playa, pero no tengo ganas de ir.
Invitalo.
-te...- mi voz salió en un pequeño susurro.
Vuelvo a intentarlo.
-¿te gustaría acompañarme?, solo si quieres no tienes que decir que si, si no quie...
-claro.
¡Si!, grite mentalmente.
-g..genial- asegure volviendo a iniciar la partida.
Kaden se me queda viendo, mientras elige la opción de juego avanzado. Cuando empiezo la partida, puedo ver de reojo como sonríe y se concentra en el juego.
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