「14」YOU WAS TRIYING TOO HARD

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¿Teníamos la culpa nosotras de lo que había pasado durante el show de talentos? No, pero ellos nos trataban como si nadie más fuese responsable, nadie aparte de las dos chicas que tenían que apretar los puños detrás de su espalda y morderse la lengua para no decir nada. Era difícil, más aún cuando mi cabeza no dejaba de repetir: hazlo, dilo, merecen escuchar la verdad. Habían pasado tantas cosas que se me hacía imposible recordar las razones por las que había querido ser un héroe en primer lugar. ¿Era para demostrar que no era como mi familia biológica? ¿Para probarme a mí misma que era capaz de algo? ¿Decirle a mi psicóloga que podía integrarme en la sociedad? Ya no lo sabía. Solo tenía claro que no quería convertirme en esto. No era lo mismo recibir un regaño de Aizawa o Yamada que ser regañadas por los altos mandos.

Los altos mandos que podían besarme el trasero.

La vida de Arata podría haber sido destruida, su autoestima está por los suelos y no ha salido de su habitación en una semana. Se muere de la vergüenza tras haber sido expuesto de esta manera, y estos hijos de perra solo quieren saber porqué hemos tardado tanto en encontrar al traidor.

Ojalá yo también lo supiera.

—¿Cree que no hemos pensado en eso? — soltó Dai de pronto, alzando la vista con desafío —. Sea quién sea, sabe que lo buscamos y juró destruirnos uno a uno.

—¿Siquiera nos ha preguntado si queremos seguir haciendo esto? — fruncí el ceño, siendo incapaz de contener mis palabras —. Porque después de lo que pasó, no me interesa seguir haciendo su trabajo.

—¿Es así como Red Diamond entrena a sus estudiantes? — habló la mujer de traje mirándonos como si no fuésemos más que simples insectos —. Debería inculcarles un poco de respeto.

—Así es como tratamos a los que mandan a adolescentes a hacer el trabajo de profesionales — respondí antes de notarlo.

Ella no se dejó intimidar por nuestras palabras, actuaba como si estuviese acostumbrada. Apoyó sus manos en el escritorio, trazando una sonrisa —: Si realmente las enviáramos a hacer el trabajo de profesionales, estarían muertas en un segundo, ténganlo claro. Si esto es demasiado para ustedes, no deberías ser héroes en primer lugar — nos recalcó, haciéndonos sentir insignificantes —. No necesitamos más débiles en la agencia.

Una de las cosas que nosotros teníamos en común era la necesidad de validación. Si los demás se daban cuenta de lo increíbles que éramos era más que suficiente para nosotros, pero esa mujer estaba aquí, frente a nosotras diciendo que éramos unas malditas cobardes. Fue como si voluntariamente hubiese reventado la última vena de la cordura que nos quedaba.
Sabía que estaban desesperados por todo lo que había sucedido. Sweet Candy, el descenso de All Might y All For One. La liga de villanos estaba descontrolada, Cry Baby era imposible de atrapar y había un traidor en la escuela de héroes. Si alguien había logrado engañarlos a todos aquí, eso significaba que podían estar entre ellos también. Sus errores estaban cayendo sobre nuestros hombros, retándonos a aguantar la presión de ser los héroes perfectos que ellos no pudieron ser.

El calor comenzó a hacerse presente, al mismo tiempo que sentía como todo avanzaba en cámara lenta frente a mis ojos.

—Suficiente — intervino Aizawa sensei, sacándonos de nuestro enojo y poniéndose frente a nosotras —. Ellas tienen clase ahora y este interrogatorio terminó.

Los tres nos dieron una mirada, para luego retirarse de la oficina ajustando sus estúpidos y caros trajes. Apreté los puños con molestia sin poder evitar dejarlo caer sobre el escritorio, mientras Dai miraba por la ventana sin poder disipar su ceño fruncido. No quería seguir sus órdenes, odiaba la idea de hacerlo. ¿Eso me convertía en una villana? Recuerdo haber oído una vez de un supuesto hombre inocente que había sido asesinado por un héroe hace varios años, no quería ser de esos que cometían un error tan grave.

²𝐅𝐎𝐑𝐄𝐒𝐇𝐀𝐃𝐎𝐖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora