Me Convertí En Un Semidiós

Capitulo 1: El comienzo.

La historia de Percy Jackson y los dioses del olimpo y sus personajes no me pertenecen a mi si no a Rick Riordan. esta historia es un Fanfic la cual cuanta los echos de la historia original pero desde otro punto de vista y con nuevos sucesos.

capitulo 1.

Sentía que la cabeza le daba vueltas, como si hubiera pasado horas en una montaña rusa sin parar, así se sentía Hefesto, dios del fuego, las fraguas, los artesanos, los volcanes, los herreros y la metalurgia. No sabía que había pasado hace unos momentos él estaba en su fragua haciendo un collar de perlas para su esposa, cuando de la nada sintió un dolor que le recorrió por toda la espalda, después de eso vio negro y ahora está despertándose en un cuarto que no es el suyo.

-Vaya por fin te despertaste, ya me estaba empezando a preocupar porque no te levantabas.

Una voz que desconocía se escuchó en sus espaldas, rápidamente abrió los ojos y pudo ver que era un anciano el cual le estaba sonriendo muy alegremente.

-¿Quién es usted? Y ¿Qué estoy haciendo aquí? –el dios le pregunto al anciano de una manera tranquila.

-Bueno mi nombre es Connor y estas en mi casa muchacho, has estado inconsciente durante dos semanas, el medico que contrate me dijo que no tardarías mucho en despertar, pero aun así fue mucho tiempo.

Lo dicho por el viejo sorprendió a Hefesto a estado inconsciente durante dos semanas, como era posible, lo que era más importante como es que ninguno de los otros dioses se ha dado cuenta, es más Apolo ya lo tuvo que haber localizado él lo podía ver todo y si no podía encontrarlo podía estar cien por ciento seguro que su hermana Artemis lo localizaría en menos de un día.

Hefesto se puso lentamente de pie y comenzó a estirar sus músculos, pero rápidamente se percató de algo, su pierna no le dolía en lo más mínimo, es más se sentía muy diferente a lo usual, pudo notar que el viejo era más alto que el, lo cual era imposible ya que en su forma mortal el media dos metros, empezó a mirar hacia todos lados y pudo ver un espejo en la pared del cuarto, lentamente se acercó a él y cuando miro su reflejo quedo en completo shock.

No podía creer lo que estaba viendo, prácticamente no era el, no solo era eso si no que su apariencia era la de un joven de 14 años de edad, pero lo que más lo sorprendió era su cara ya no estaba deforme, ahora era delineada y delgada su cabello seguía siendo castaño y sus ojos eran de color chocolate, más bien se podía decir que era una versión adolecente masculina de su madre Hera, estaba tan absorto en sus pensamientos que no se dio cuenta que el viejo se le estaba acercando por detrás, fue hasta que le toco su hombro derecho que se dio cuenta.

-¿Estas bien muchacho? Te ves confundido. –Connor le pregunto al dios en un tono preocupado.

-Eh a no estoy bien señor, es solo que no me acuerdo que me paso, le agradezco, su ayuda y prometo que le devolveré el favor lo más pronto que pueda. –Hefesto le respondió al viejo en un tono agradecido ya que el viejo se había tomado su tiempo en cuidarlo, muchos mortales lo hubieran dejado morir y Hefesto agradecia esa amabilidad y empatía de este mortal ya pensaría como le recompensaría esta acción cuando regrese a Olimpo.

-No hace falta que me lo pagues joven, con tan solo que me digas tu nombre me basta, también si algún día estés por los alrededores agradecería que me vinieras hacer compañía por un rato. –Connor le dijo todo esto al dios con una sonrisa sincera en su rostro.

-Mi nombre es Alex Olympia, es un gusto conocerlo Sr. Connor y de por hecho que lo vendré a visitar cuando pueda. –Hefesto le sonrió y estrecho la mano al viejo.

-Bueno ya es hora que regrese a mi casa mi familia debe de estar preocupada por mí. –dijo esto mientras se dirija lentamente a la salida de la casa y procedía a abrirla.