💙 La Novia de Tamaki 💜

18. Orejas

Como su novia, Kara sabe sobre ciertas debilidades muy tiernas de Tamaki. ¿Pista? Son sus orejas.

Ya no faltaba mucho para que los de tercer año se graduaran, por fin se convertirían en héroes y eso les daba tanto emoción como terror. Y como no faltaba mucho, era obvio que tendrían un examen escrito y físico, solo faltaban unos días para eso.

Tamaki estaba más estresado que nunca, demasiado sumergido en sus pensamientos y con ataques constantes de ansiedad.

¿Eso detiene a su novia de ser cariñosa con él? No

Kara: elfito~

Tamaki: Kara, estoy algo ocupado ahora, perdón..

Kara: mm ya lo sé pero, ¿No estás aburrido?

Tamaki: *suspira* tendré tiempo para ti después, ahora tengo que estudiar, la prueba final será en una semana y tengo que tener todo listo, tal vez podamos entrenar luego

La chica soltó un pequeño quejido, Tamaki no era el único ocupado en ese momento, de hecho ella también estaba con algunos aprietos por los exámenes finales para pasar a segundo año. Que rápido pasa el tiempo.

Miro a su novio otra vez esta vez los masajes no sanarían su estrés, necesitaba algo más para distraerse.

Se detuvo a pensar por unos segundos hasta que notó las orejas puntiagudas de Tamaki, siempre se había preguntado de quien las había heredado o que tenia que ver con kosei. Espera, ahora tiene una idea.

Tomo la mano de su novio con delicadeza y puso su mentón en su hombro con cariño, Tamaki otra vez iba reprocharle pero de repente sintió unos suaves labios en sus puntiagudas orejas, Kara lo estaba besando en las orejas.

Tamaki: ¿K-Kara? ¿Qu-qué haces? 

Kara: Tamaki, tranquiliza te, estás mas estresado que nunca

Tamaki: p-pero yo- ¡Ah!~ - rápidamente se tapó la boca y se alejo - ¡K-Kara! ¡No vuelvas a hacer eso!

Kara: *ríe* ¿Acaso... Tus orejas son sensibles?

Se acercó peligrosamente a él, haciendo que retrocediera junto a la silla giratoria hasta dar con la pared, ahora tenia a su novia rodeándolo con una mirada de lujuria. Se sentó en sus piernas y siguió besando su oreja, Tamaki tenía la cara muy roja, incluso sus orejas estaban rojas por la pena.

Tamaki: Kara, yo- *suspira* .... ¿Cómo lo haces ver tan fácil?

La chica se detuvo y lo miro curiosa.

Tamaki: ¿Cómo? No es difícil saber que tu también sufres de estrés, tienes las clases, las tareas, tus amigos, familia, trabajo, el peso de ser héroe, el miedo de fallar y nuestra relación, ¿Cómo puedes cargar con todo eso? Yo no puedo... es..

Kara: ¿Aterrador?

Tamaki: si.. pensar que solo estoy a un paso de convertirme en un héroe es aterrador y estresante, tal vez meta la pata, ni siquiera sé si quiero continuar...

La chica tomo su rostro con delicadeza y le sonrió tiernamente.

Kara: Tamaki, es cierto que a veces es aterrador pensar en el futuro y puede llegar a ser peor cuando estas tan cerca de lograrlo, el estrés y el miedo a veces nos hace querer ir atrás y renunciar pero... ¿De qué sirve renunciar? Cuando ya estas casi a la cima, renunciar después de haber escalado tanto solo haría que te sintieras peor que cuando llegaras a fallar, al menos lo intentaste... ¿Tu no quieres ser un héroe?

Tamaki: yo... al inicio no lo pensé mucho... pero quiero ser un héroe, por ti.. por lo demás...

Kara: ¿Y? ¿Qué hay de ti?

Tamaki: ¿Uh?

Kara: se un héroe, por ti, tu lo deseas por los demás pero no tienes que olvidar pensar en ti también - la acaricia las orejas - se un héroe por ti, no solo por los demás

Tamaki: ... es increíble como siempre logras calmarme, no sé como lo haces

Kara: las palabras fluyen, solo digo lo que pienso, no le tengas miedo a fallar, mejor sonríele a la experiencia que ganaste y los logros que alcanzaste con todo tu esfuerzo

Tamaki se quedó callado un momento y tomó la mano de su novia, la cual seguía acariciando su oreja. La miró a los ojos y soltó una pequeña sonrisa.

Tamaki: tu eres mi mejor logro

Los colores se le subieron al rostro, en realidad no había pensado en sus palabras, salieron de la nada. Soltó sus manos y se ocultó en el asiento intentando alejarse.

Tamaki: yo- ah- p-perdón, eso sonó muy cursi, ¡Solo salió de mi mente!

Kara: *ríe* ¿Acaso no es lindo decir a veces lo que piensas? Pueden ser palabras lindas, o incluso necesarias..

Tomó sus manos, la tensión fue bajando poco a poco, lo miró a los ojos y ambos se besaron. Era uno sentimental más que lujurioso, era uno cariñoso como las otra veces, pero aun así duró más de lo esperado.

A Kara también le preocupaba el futuro, pero no sentía miedo, porque lo tenía a él. Desde que lo conoció, él se volvió su mundo, iba a lograrlo por él y por ella, por su familia y quizá la familia que algún día logre formar con el amor de su vida.

Ella solo podía pensar en un futuro juntos, no le pensaba fallar.