💙 La Novia de Tamaki 💜

22. Felicidad (+18)

3 años después...

.

.

.

Los rayos del sol iluminaron los cabellos oscuros del joven héroe, haciendo que ocultara su rostro con la almohada de al lado para que no lo molestara, dándose cuenta segundos después de que su mujer no estaba en su lado de la cama. El dulce aroma de un desayuno recién hecho llegó a su nariz, haciendo que se levantará casi de inmediato de la cama, levantándose de ésta misma para luego salir de la habitación hacia el comedor.

Al llegar allí, se encontró con su hermosa esposa poniendo los cubiertos en la mesa, al lado de unos platos con panqueques con miel de maple y fresas y 2 tazas de café, acompañado de un plato de tostadas con mantequilla como aperitivo. La de cabello claro lo volteó a ver y le otorgó una dulce sonrisa, acercándose a su marido para abrazarlo y darle un dulce beso en los labios, beso que fue correspondido.

Kara: buenos días, mi vida, estaba apunto de llamarte

Tamaki: buenos días - la abraza por la cintura - huele maravilloso

Kara: un desayuno especial para un día especial - sonríe emocionada

Tamaki: - ríe ligeramente - feliz aniversario, My Butterfly

Kara: Feliz aniversario, mi rey

Ambos se sentaron en la mesa, disfrutando del desayuno preparado por la fémina, hoy era su tercer aniversario de bodas y ése día la iban a pasar ellos 2 solos en casa. Porque si, Kara y Tamaki prefieren mil veces pasar tiempo juntos en la comodidad de su casa que salir a hacer alguna actividad social como otras parejas. La comodidad de su sala, unas películas y/o una cena y la presencia del otro los hacía más felices que un restaurante caro.

Ambos eran del uno para el otro, ambos peleaban por cosas comunes de vez en cuando, como cualquier pareja; a veces Kara podía ponerse celosa o Tamaki podía ser demasiado sobreprotector, pero éso jamás les impidió tener una relación sana.

.

.

.

Kara y Tamaki se encontraban en la sala de su departamento, mirando películas mientras se abrazaban y daban cariño, riéndose o hablando sobre lo que veían. Kara acariciaba con delicadeza las cicatrices de batallada de su amado, cicatrices que había ganado a causa de tantas batallas que había resultado victorioso, y Tamaki besaba de vez en cuando las cicatrices de batalla que se encontraban en el rostro de su novia, aún con esas marcas, ella se seguía viendo tan hermosa como el primer día en que la vio.

Ellos 2 vivían en un departamento bastante cómodo, ya que ése espacio era suficiente para los 2, sólo ellos y nadie más. El apartamento no era tan grande, puesto que era sólo para los 2, pero Kara empezó a sentirlo algo vacío, demasiado tranquilo.

Kara: T-Tamaki...

Tamaki: ¿Si?

Kara: ...quiero tener un bebé...

El de pelo añil la miró sorprendido por la propuesta tan repentina, viendo a su amada que tenía una mirada tímida y estaba jugando con sus dedos como si fuera una niña. Tamaki no se hubiera esperado que ella de la nada quisiera tener hijos, ella aún estaba en la flor de la juventud, con 21 años de edad, pero no sólo era éso lo que le preocupaba.

¿Tener hijos? ¿Con éste trabajo tan peligroso y de tiempo completo?

Tamaki: ¿Por qué de la nada pides éso? ¿No es demasiado pronto?

Kara: si, lo sé, pero... - se sonroja - yo siempre he deseado formar una familia y, desde que te conocí, supe que quería que tu fueras el que la hiciera conmigo

Tamaki: Butterfly, lo entiendo, yo también quiero éso, pero hay que ser más razonables, somos héroes, ¿Cómo crees que sería para el bebé si estamos ausentes por nuestro trabajo? ¿Qué pasa si nos pasa algo y ése pequeño queda huerfano?

Kara se quedó en silencio, éso no lo había pensado, aún no tenían la suficiente madurez.

Tamaki: aún sigues siendo muy joven, tenemos toda una vida por delante, podemos pensar en éso en otro momento, por ahora, sólo disfrutemos de nosotros, ¿Está bien?

Kara asintió algo avergonzada y ocultó su rostro en el pecho del chico, dejando que éste la consolara dándole caricias en sus largos cabellos.

¿Tendrían hijos? Tal vez, ambos lo deseaban, pero ahora no era el momento.

.

.

.

Kara: Tamaki~ ah~ m-más rápido~ - suspiraba con la cara roja

Tamaki: e-estás ngh~ m-muy estrecha

Lo que más adoraban de sus aniversarios, eran tener ésas candentes y románticas noches de pasión, Tamaki adoraba la perfecta figura de su esposa la cual se asemejaba a la forma de una pera, y Kara adoraba los músculos y el calor que emanaba el cuerpo de su amado con cada embestida que le daba, hacía que se sintiera en el mismo cielo. No es que fueran adictos a la intimidad, ¿Dónde estaría la emoción si fuera algo que hicieran seguido? Aunque tampoco es que sea cada cierto tiempo, podrían tener intimidad 2 o 3 veces al mes, ninguno buscaba al otro por el sexo.

Kara: - arquea la espalda - ¡Ah! T-Tamaki, creo que voy a-

El mayor tomó las caderas de su amada mientras que aumentaba la velocidad de sus embestidas, terminando así en ella y viceversa.

Ambos se acostaron juntos en su cama matrimonial, abrazándose y sintiendo el calor del otro, Tamaki adoraba recostarse en el pecho denudo de su mujer, años ocultando su rostro en las paredes hacía que fuera como un alivio poder ocultar su rostro en algo así de suave, a Kara no le molestaba, adoraba poder tener a su marido abrazado a ella par1 poder besar su cabello y acariciarlo suavemente para poder dormir. Ambos cerraron los ojos y esperaron para poder caer finalmente en los brazos de Morfeo, pero Kara abrió los ojos con algo de pánico y miró a Tamaki.

Kara: Tamaki

Tamaki: ¿Mh-mj? - adormilado

Kara: ¿Usaste condón?

Tamaki: ... - abre los ojos - ¿Qué?