Semana 6

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Día 40

Lo primero que hizo Lan Zhan después de las clases fue sacar todo el hielo del congelador y echarlo en la bañera.

Lan Xichen enarcó una ceja. "¿Te diste un tirón en un músculo o algo así?".

Lan Zhan fue sorprendido con la guardia baja y vaciló durante medio segundo. "...Sí." O algo así.

Tenía unos minutos escasos para remojarse antes de que Wei Ying llegara a casa.

Lan Zhan iba a hacer hoy de nuevo el papel de chaleco antibalas. Su tío ya habría recibido los resultados de su segunda serie de exámenes. Le había dicho a Wei Ying que iba a estar pendiente de sus resultados. Sin embargo, Wei Ying estaba decidido a no volver a intentarlo ahora que había conseguido su plaza. Que solo quería por la proximidad al aire acondicionado, aparentemente, y no por la proximidad a Lan Zhan.

A quien consideraba como un hermano.

Lo mencionaba con demasiada frecuencia.

El pelo de Lan Zhan aún estaba mojado por la ducha después de nadar, pero lo volvió a mojar de todos modos. Las piscinas de la universidad ya estaban reparadas y estaban recuperando las clases perdidas. Lástima que el tiempo haya empeorado.

Hicieron buceo hoy.

La mayoría de los otros chicos fueron subiendo poco a poco del trampolín de un metro al de diez.

Wei Ying, siempre dispuesto a llevar la contraria, se dirigió directamente a la cima. Lan Zhan sospechaba que el chico tenía afinidad con las alturas.

Lan Zhan estaba en el agua cuando Wei Ying se lanzó como una flecha. Pateó las baldosas del fondo y, con dos movimientos perezosos de sus largas piernas, resurgió en medio de un estallido de gotas de agua que florecieron a su alrededor como pétalos de flores. Atravesó el azul claro del cloro riendo. El agua rodaba perezosamente por su espalda en perlas brillantes, como si no quisiera abandonarlo.

Lan Zhan aspiró y volvió a sumergir la cabeza. Debería haber traído más hielo.

Nunca había tenido esta sensación.

No solo esta sensación, la que le llegaba a las entrañas y que enviaba ondas de choque eléctrico por todo su cuerpo, y enviaba la sangre hacia arriba para manchar sus mejillas y también hacia abajo.

También había otra sensación. Sentía nudos en el pecho, piedras en el estómago y bilis en los pulmones. Le hacía olvidar a veces de respirar.

Especialmente cuando Wei Ying decía cosas como: "Ya está, Jiang Cheng está oficialmente despedido".

"¿Hm?" Lan Zhan tuvo esa sensación de hundimiento que siempre tenía cuando Wei Ying mencionaba a Jiang Cheng. Estaba en medio de entregarle a Wei Ying un par de palillos mientras se sentaban a comer en la cafetería de la escuela. Wei Ying había olvidado agarrar un juego. Otra vez.

"Está despedido", dijo Wei Ying. "Puedes ocupar su lugar."

Como su hermano, quiso decir.

Lan Zhan miró los palillos que tenía en la mano.

"Jiang Cheng me hubiera llamado idiota".

"Entonces deja de olvidarlo", dijo Nie Huaisang desde su lado.

"¿Dónde están tus palillos?" Wei Ying replicó.

Meng Yao deslizó un par sobre la mesa. "Aquí."

Nie Huaisang los recogió bastante descaradamente. "Aquí."

Los dedos de Wei Ying rozaron el dorso de la mano de Lan Zhan cuando tomó los palillos.

El Quinto Tipo de Fuerza sin ContactoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora