Capitulo 1

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¿Esto era la muerte?. Me encontraba en calma sentía todo mi cuerpo ligero y casi ningún pensamiento pasaba por mi cabeza, siempre había escuchado que la muerte era aterradora,  que podía ver mi vida pasar delante de mis ojos y sentiria un profundo dolor en mi corazon debido a la perdida de mi vida pero...nada de eso esta ocurriendo al contrario la tranquilidad que sentía en estos momentos era algo completamente incomparable.

—¿ya estas despierta?— de la nada escuche una voz hablarme, era una voz tranquila y dulce por algún motivo sentí que podía confiar en la dueña de esa voz por lo que lentamente me senté y al hacerlo pude ver frente a mi a una hermosa mujer, sus ojos eran de color celeste casi llegando al blanco, tenía largos cabellos de color blanco y un sencillo vestido el cual era del mismo color de su cabello— Me alegra mucho ver que estas despierta, ven querida—Ella estiro su mano hacia mi y sin dudarlo la tome para poder levantarme.

—¿donde estoy?  ¿Quien es usted?— esas fueron las primeras preguntas que vinieron a mi mente y necesitaba respuestas.

—¿Donde crees que estas?—me pregunto de vuelta con una ligera sonrisa en su rostro.

—...se que estoy muerta así que...¿En el cielo?

—Algo así...en realidad este es una especie de limbo al cual yo te traje para que tu alma no se perdiera y para la pregunta de ¿Quien soy? Bueno...tu me conoces bastante bien, en realidad tu imperio me conoce bastante bien, siempre que van a la guerra o dan un saludo me nombran.

—...¿La nombramos?

—Hagamos una prueba presentate —me dijo y yo de inmediato hize lo que pidio.

—Un gusto conocerla mi nombre es Ariadna Soraila Grace de Aleria princesa imperial de Aleria, que su salud repose en las manos de la...Diosa...—Cuando termine de hablar supe quien era ella por lo que rápidamente di una profunda reverencia—Lamento si eh sido descortes.

—No te preocupes querida es comprensible, en un principio yo debí ser quien se presentara de forma adecuada , debes estar preguntándote que haces aquí ¿Cierto?

—Asi es mi diosa.

—Bueno...a decir verdad en estos mismos instantes Aleria es un caos total, de tu muerte ya a pasado bastante tiempo... en cuanto el continente se unió el emperador de kansia tomo todas las riquezas que tenia Aleria y dejo al pueblo olvidado, eso incluyen a tu madrastra y hermanastra, tu eras la luz de galería y  no debías morir es por eso que te tengo dos opciones.—sus palabras me dejaron completamente  sorprendidas no imaginaba el dolor por el que las personas de Aleria estaban pasando pero tenia que hacer algo por mi pueblo, por las personas que había abandonado a causa de mi depresion

—¿Cuales son esas opciones?

—La primera se podría decir que es la mas fácil, si quieres puedo destruir Kansia.

—Pero...¿y los plebeyos? Ellos son inocentes no han hecho nada malo

—Lo siento pero nadie se salvaría.

—¿Cual es la segunda?

—Es un secreto pero solo te diré que es mucho mejor que la primera opción así que ¿Que eliges?

—....mm...¿La segunda?

—Perfecto sabia que harías una muy buena eleccion—mientras ella hablaba sentía mis ojos pesados—Mucha suerte querida, yo siempre estaré cuidandote—En cuanto ella dijo eso mis ojos se cerraron por completo pero no me sentía cansada así que los abrí de inmediato, en cuanto lo hize me di cuenta que ya no estaba con la diosa, en cambio me encontraba en una habitación bastante familiar...demaciado familiar....

—¿Mi habitación?—Rapidamente me levante y corrí hacia la puerta a abrirla, del otro lado me tope con alguien a quien nunca creí que volvería a ver—¿Maria?

—Princesa ¿Que hace despierta tan temprano?—Maria era una sirvienta la cual estuvo conmigo hasta el final pero fue acusada de traición y  asesinada por mi hermanastra...no pude evitar lanzarme a sus brazos para  a abrazarla.

—Maria...maria.

—Mi princesa ¿Que ocurre?—me preguntaba preocupada.

—....Maria...lo siento—dije mientras me apartaba—¿En que año estamos?

—Es el año imperial 364—me respondió mientras entraba a mi habitación y abría las cortinas dejando entrar el sol

—¿Que?—el año imperial 364 era dos años antes de que mi madrastra y su hija ingresaran al palacio, aun no entiendo bien lo que esta pasando pero si este es un regalo de la diosa no voy a desaprovechar la oportunidad.—Maria ayudame a vestirme, iré a ver a mi padre.

—¿Quiere un vestido negro?

—No, ya es suficiente de esto, estuve de luto un año entero debido a la muerte de mi madre, es cierto que aun me sigue doliendo su perdida pero soy la princesa de Aleria no puedo dejar mis obligaciones de lado.—mientras decia eso el rostro de maria paso de sorpresa a felicidad—esta vez quiero usar el vestido celeste que padre me envió.

—De inmediato—dijo saliendo de la habitacion, no tardo en llegar con tres sirvientas mas quienes comenzaron a prepararme, tengo dos años enteros hasta que mi padre se case con esa horrible mujer...y ya se que hacer para poder cambiar el futuro.

La princesa que regreso al pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora