VERITASERUM
❝ SIEMPRE PENSÉ QUE ERAS LA
CHICA MÁS HERMOSA QUE HE
VISTO REYNA DE MARTEL ❞
❰ marauders era: year 3 - year 7 ❱
❰ regulus black x female!oc ❱
❰ original de belIashadid ❱
❰ tra...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃ VERITASERUM ── ◦'𖥸'◦ ── ACTO UNO ↳ ❛ la cerveza de mantequilla es la cura para cualquier cosa ❜︎ capítulo 8 ╱ ╱ ☕️🕊˚◞𑁍ﾟ
REYNA SE ALEJÓ FURIOSA Y herida por sus acusaciones. ¿De verdad pensaba que ella era un cachorro enamorado que siempre busca al primer chico que ve?
La De Martel apenas miró a nadie excepto a dos personas. El primero fue Regulus Black, su mejor amigo, pero supuso que no sentía lo mismo por ella. Excepto, ¿y si todo termina y ya no están cerca?
Fue entonces cuando Reyna lentamente trató de seguir adelante interesándose en Severus Snape (que fue un gran OOF, por su parte). La Veela no sabía por qué lo intentó en primer lugar.
Reyna De Martel debería haber sabido que no había superado a Regulus Arcturus Black.
Las lágrimas mancharon sus mejillas y no dejarían de fluir pronto. Reyna era del tipo que lloraba por las cosas más pequeñas y es algo que la Slytherin odiaba de sí misma.
Cuando era más joven, Reyna pensó que era una llorona fea y, para ser honesta, sintió que había empeorado.
—¿Rey?
Lily, Alice, Marlene y Dorcas se detuvieron para ver a su amiga Reyna llorando en un banco.
Inmediatamente, Marlene Mckinnon se acercó y abrazó a la chica. Alice sacó un pañuelo y se lo entregó. Levantando una mano y limpiando las lágrimas de las mejillas.
—Yo... yo... es un maldito idiota —Reyna gritó, ganándose un chillido de Alice. Marlene parecía querer echarse a reír de su arrebato.
—¿Quién, cariño? —Alentó Marlene.
—¡Regulus Arcturus Black puede ser pateado por un hipogrifo por lo que me importa! ¡¿Quién diablos se cree que es?!
La pelirroja del grupo arqueó las cejas con curiosidad. —¿Qué hizo él?
—Íbamos camino a Hogsmeade y James y Sirius vinieron a unirse a nosotros —El rostro de Marlene y Lily se contrajo en molestia y un poco de curiosidad parpadeó en sus ojos.
—Estaba enojado porque no le dije que Snape me había estado molestando toda la semana —El rostro de Lily se convirtió en un ceño fruncido pero no la juzgó. Sabía que los dos habían tenido una pelea que ella misma no podía resolver.
Las siguientes palabras de Reyna hicieron reír a Marlene. —¿Te acusó de que te gustaba Sirius?
—No te ofendas Marlene, pero Sirius es como un hermano mayor para mí. ¿De dónde sacó Reg esa idea?
Las chicas intercambiaron miradas divertidas y miraron a la rubia. Reyna se encogió y miró con los ojos muy abiertos, maldita sea, se sentía como una niña una vez más al estar fuera del circuito.
—¿Por qué me están mirando?
—Ugh, a veces me cuesta creer que esos dos estén relacionados... actúan de la misma manera —Marlene se rio un poco—. Hermano como hermano.
Una sonrisa divertida apareció en los labios de Dorcas. —Quizás esté celoso.
—Lo dudo.
Reyna se levantó de su lugar y se aclaró la garganta. —¿Podemos ir por cerveza de mantequilla? No quiero seguir enfurruñada... Me ocuparé de eso más tarde. Este es mi primer Hogsmeade y no quiero desperdiciarlo llorando.
Lily le sonrió y le hizo un gesto para que la siguiera. —La cerveza de mantequilla es la cura para cualquier cosa —y las chicas no podían estar en desacuerdo con esa afirmación. Las cinco se fueron para las Tres Escobas.
☆ 彡
REYNA Y LAS CUATRO CHICAS DE GRYFFINDOR terminaron divirtiéndose, bebiendo cerveza de mantequilla y comiendo papas fritas. Definitivamente mantuvo la mente de la De Martel alejada de cierto hermano Black.
La expresión hosca de la rubia se desvaneció y se alegró. —Lily, ¿James todavía te persigue? —hizo un gesto a James Potter, Sirius Black, Peter Pettirgew y Remus Lupin sentados en un reservado.
Una taza vacía se colocó mágicamente frente a Lily y se llenó de cerveza de mantequilla. La pelirroja que miraba a Madam Rosmerta le dedicó una dulce sonrisa. —El chico de las gafas redondas lo pagó.
Las chicas se rieron cuando Lily resopló molesta y lo rechazó. —No lo quiero.
—Si no lo quieres, yo lo acepto —Dorcas y Marlene dijeron al mismo tiempo. Eso provocó más risas.
Luego se colocó otro frente a Reyna haciendo que frunciera el ceño con perplejidad. La chica inclinó la barbilla hacia Madame Rosmerta, quien se encogió de hombros: —No puedo decir su nombre. Prometí que no lo haría. Pero parecía un chico dulce.
Y Reyna tuvo la sensación de quién podría haber sido, pero decidió no decir nada mientras miraba la bebida burbujeante contemplando si beberla o no.
