Todo o Nada.

Capitulo 17.

『　Manipular o no. La discusión antes de la batalla final.　』

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Tensión.

Eso se sentía en el ambiente.

Estaba frente a ella, quien parecía ya decidida.

¿Mi misión?

Hacerla cambiar de opinión.

Está vez no tenía la mirada baja como cada vez que nos encontrábamos, podía ver su rostro claramente.

Tomé asiento, sin embargo ella se quedó de pie, no parecía ser qué fuese a hacerme caso a mi o a alguien más.

— Y bien, ¿Para que quieres hablar conmigo?

— Ya te expliqué que sucederá si haces lo que sea que estás pensando, y quiero que recapacites y piensen bien las consecuencias.

— Ya he tomado mi decisión, nada podrá hacerme cambiar de opinión.

— Temía que esto pasará...

—¿De qué hablas?

— No lo hagas.

—¿Por qué?

— Yo... Tu me gustas Annie, no quiero que te arriesgues a algo como eso.

— Es eso... No me importa lo que sea que digas, no pienso hacerte caso.

— Por favor, solo quiero que te detengas, es más peligroso de lo que tú crees, esto dejará consecuencias muy graves, entiéndelo.

Tenía miedo.

Miedo a perder a alguien que en poco tiempo se volvió importante para mí...

El sentimiento de perdida, me carcomía a cada momento, mi cuerpo se encontraba tenso y rígido, apenas y podía mover alguna extremidad mía, pero ella parecía encontrarse cómo si nada.

"¿Que hubiera pasado si no le hubiese hablado?"

Esa pregunta pasó por mi cabeza muchas veces, las cosas hubieran Sido diferentes, nada de esto hubiera pasado...

"¿Hubiera Sido felíz?"

El cómo se define ser feliz... Aún me intriga... Para alguien comprar cosas le hace felíz, jugar, escuchar música, pero ... No puedo decir que es lo exactamente me hace felíz... No puedo saber, y quiero saber...

Las cosas que ahora mismo están pasando, las cosas que pasaron, y las que pasarán, pueden hacerme feliz en algún momento, pero después se volverá nostalgia...

No puedo decir que algo me hará feliz por completo, no sé que me hace felíz con exactitud, y es un término que me dejara con una gran intriga cada día...

La alegría es una simple palabra sin embargo, es un sentimiento, facil de sentir, dificil de explicar dependiendo el caso.

Las ultimas palabras suyas me trajeron de vuelta a la realidad.

— He tomado mi desición al fin, lo siento, no me hecharé atras ahora que he llegado tan lejos en este mundo, tienes tres opciones... Informar a dicho hombre, dejarme ir sin más, o ir conmigo, es hora de decidir.

—... No... Debe haber alguna otra forma Annie.

— No la hay, no intentes buscar soluciones inexistentes, esta es mi pelea, no permitiré que cualquiera venga a decirme que es lo que debo hacer.

"Cualquiera"

Despues de todo soy alguien común y corriente en este mundo de mierda.

No hay nada que pueda hacer, esto es una tonteria.

— ... Tienes razón, no soy alguien que pueda decirte que hacer, mucho menos para intenar hacerte cambiar de opinión, no soy tu padre, ni tu pareja, no soy nadie para ti, perdón por intentar protegerla, señorita Leonhart, mis más sinceras disculpas por entrometerme en un tema que no tiene nada que ver conmigo, entiendo perfectamente que me comportado egoistamente, puede hacer lo que quiera, me retiro.

Esas palabras realmente me habían afectado, las cosas se salieron de control. entonces me puse de pie y empecé a caminar de regreso al apartamento, sabía perfectamente que la había liado, las cosas iban de mal en peor, no podía ver ni un minimo ratro de esperanza atraves de toda esta situación de mierda.

Al llegar al apartamento me dí cuenta de que no traia mis llaves de la puerta principal.

Que idiota.

Me senté en la acera a esperar que alguien más del departamento llegara, con mi suerte podría ser alguno de los tantos vecinos, sin embargo, no había nadie en la calle.

Estaba anocheciendo, los tonos rojos y azul oscuro empezaban a abarcar la mayor parte del horizonte, mientras el grisaceo de la tormenta empezaba a llegar tal cual maratón, ahora estaba en un problema si nadie más llegaba, puesto a que no creía que alguien fuese a salir.

Pronto empezó a llover, las pocas personas que habían por la calle pronto empezaron a buscar donde refugiarse del agua, la cual comenzaba a caer con intensidad.

Mientras yo solo me preguntaba si lo que había dicho había estado bien.

"Es obvio que no".

Pronto las lagrimas empezaron a caer,

Menzclandose con las gotas de agua que escurrían por mi cabello hasta mi rostro.

Lo que sentí que fueron horas apenas habian sido 20 minutos.

Entonces una sombrilla hizo presencia, cubriendome de la fuerte lluvia.

Por un momento creí que se trataba de Mikasa, pero no era así, era Annie.

Al alzar la mirada pude ver aquella sombria mirada de siempre, sin embargo, parecía un poco más... Sentimental...

— Lo siento Armin... No quería que mal interpretaras mis palabras, no quería que esto sucediera, fue mi culpa.

—... Esta bien, yo tambien tengo parte de la culpa, y lo lamento, perdón...

— Pensaré maás en lo que haré... Tal vez tengas razón y aun pueda haber una salvación, no seré tan... Impulsiva...

—Me alegra que lo reconsideres...

No dijo nada y solo me puse de pie, quedando frente a frente.

—Por cierto, tiraste tus llaves cuando saliste corriendo.

Extendió su mano y me las entregó, hubiera sido problematico perder las llaves.

Me despedí de ella y volví adentro, creí que las cosas cambiarían y todo iba a mejorar.

O eso... Creía...

[Esta más corto y lo siento]