Confundido [KookMin Fanfic]

cap. 6

JiMin no sabia porque sentía aquella opresión en su pecho, tan punzante y molesta... estaba llorando, pero también estaba enojado. Y no, no estaba enojado con JungKook porque tenia más amigos, estaba enojado consigo mismo, había hecho toda una escena, pero no se arrepentía o sentía vergüenza por lo ocurido, no tenia cabeza para ello. El problema era el no entender porque se sentía tan celoso, aunque el sentimiento que más destacaba entre todos era miedo...

Miedo de que las cosas con su mejor amigo no volvieran a ser las mismas...

Por otro lado estaba JungKook que seguía observando aquel lugar por el que se fue la castaña para seguir a su pelirosa, todos en la cancha se habían dispersado, confundidos y algo sorprendidos por el numero que el par de mejor amigos había hecho en cuestión de segundos. Jeon podía oír una voz a la lejanía, pero pareciera como si todos sus sentidos se hubieran desconectado en ese momento, habían tenidos discusiones en el pasado, por supuesto que sí, pero el sentimiento que hoy estaba experimentando era nuevo y no le gustaba, en absoluto...

—¡Prometiste que siempre estarías para mí! eres un mentiroso, Jeon...

Dolía, dolía como el infierno. El pequeño pelinegro tenia sus mejillas rojas, pero no precisamente porque algo lo hubiese avergonzado, al pequeño castaño le hubiese gustado que el motivo de aquel intenso color rojo fuera por ello, pero era todo lo contrario. Las lagrimas que bajaban por aquel amplio camino carmín se lo hacían saber.

Kook jamás pensó que una decisión como la que había tomado acompañado de sus padres lograra todo esto, porque de haberlo sabido, jamás lo hubiera pensado, aunque fuera lo mejor para él...

JungKook no sabia que decir, estaba asustado, era solo un niño de trece años y estaba teniendo la discusión más fuerte de su pequeña y corta vida, y para sus males, la estaba teniendo con la personita que más adoraba, no sabia que hacer, quizá estaba siendo egoísta, pero, ¿entonces si lo sabía porqué quera irse? No saberlo lo asustaba, o es que quizá si lo sabia y le daba más miedo decirlo, pero aún así  no quería estar lejos de él.

Lo único que su pequeña e inocente mente pudo hacer en ese momento, fue caminar hasta él envolviéndolo en un abrazo, tenia miedo de ser rechazado, pero cuando sintió como el pequeño cuerpo de su amigo se aferraba al suyo con todas sus fuerzas, sólo pudo atinar a corresponderle de la misma manera. Desplomándose en el césped, JungKook permitió que las primeras lagrimas escaparan de sus ojos. 

— Perdóname, Mimi... nunca me iré de tu lado... jamás lo hare, por favor, créeme, confia en mí nuevamente. 

La manera en la que su tono de voz pronuncio aquellas palabras, hicieron llorar con más fuerza al pequeño pelinegro.

— No quiero retenerte... pero realmente deseo que estés a mi lado siempre, Kook. Sin ti me siento perdido, asustado.... perdóname por ser tan egoísta...

— ¡Kook! ¡Hey! — sintió una voz diferente y pequeños golpecitos en sus mejillas esta vez. — ¿Por qué estas llorando? ¿Qué paso?

— JiMin... 

Fue lo único que pudo pronunciar antes de salir corriendo de ahí...

— Sh... No te dejaré solo nunca y si un día nos separamos... 

— Nos buscaremos hasta encontrarnos... lo haremos, ¿cierto?

JunKook asintió suavemente, abrazando con mayor fuerza su cuerpo. 

— Te encontraré, Mimi...— murmura sintiendo aquellas lagrimas bajar por sus mejillas, pero aún así no se detenía, corría y corría, buscándole queriendo encontrarle.

JiMin era más que su mejor amigo, era más que su amor imposible, se sentía como si fuera su alma gemela, su otra mitad, su complemento... no quería perderle, jamás le importo el no poder tenerle en todos los sentidos que quería y ahora no podía cambiarlo, no era necesario...

 Necesitaba estar con él, era suficiente, no importaba lo demás, sus sentimientos románticos no eran importantes tampoco, sólo quería estar a su lado, abrazarle y pedirle perdón. 

Por favor, aparece... búscame. 

Había llegado finalmente al patio trasero de la escuela deseando poder encontrarle ahí, suplicándole a todos los dioses que estuviera ahí, tenían un lugar ''secreto'' en todos los sitios que solían estar la gran parte del tiempo. Y habían prometido siempre ir a ellos si querían ser encontrados por el otro cuando las cosas fueran mal, y tras escuchar aquellos sollozos sintió su corazón apretarse, sus pasos se detuvieron justo antes de poder acercarse a él.

Querías que te encontrará...

—¿Por qué duele tanto?— le escuchó murmurar, abrazando sus rodillas con sus brazos temblorosos— No quiero que duela... pero le sonreíste cómo jamás te había visto, ¿tanto significa para ti?, por qué jamás he recibido lo mismo....

Kook deseaba que estuviera hablando para él mismo que aún no se percatara de su presencia, pero no era estúpido, esas palabras fueron tan directas para él y confirmo cuando el menor levanto la cabeza, viéndole fijamente con sus ojos rojos y sus labios tiritando, lanzándole esa pregunta llena de miedo por la respuesta que recibiría. 

— Respóndeme... porque tu silencio me lastima más...

les prometo que actualizaré más seguido y las haré sufrir más, a):

- Dannaé.