Confundido [KookMin Fanfic]

Cap. O5

La risa tan llamativa y peculiarmente adorable, resonaba en los odios del pelirosa, aquel pelinegro veía a su mejor amigo con sus ojos brillantes, mientras agitaba sus pies en el aire al estar en los brazos de su castaño.

—¡Kookie, me vas a tirar!— chilló con una sonrisa, aferrando sus brazos al cuello ajeno, juntando sus frentes unos segundos.

—No puedo creer que estés aquí— finalmente pronuncio, dejando al menor en el suelo, sin alejar sus brazos de su cintura.

Estaba tan feliz de poder verle.

—Te dije que lo haría, tonto— se puso de puntitas dejando un beso en su mejilla, que hizo al castaño cerrar sus ojos.

Todos en la cancha les miraban confundidos, sorprendidos incluso, no sabían quién era el chico frente a ellos y que de repente se había convertido en el centro de atención de JungKook. Apesar de que el chico no solía ser muy sociable, era bastante popular en toda la escuela, uno de los motivos principales era esa amabilidad tan sincera que tenía, y otra igual de importante: ser el guapo mejor amigo de Park JiMin.

Aquel chico que con toda la calma posible, le dijo a una de sus compañeras de clase que era gay, y que lo menos que quería era lastimarla o darle falsas ilusiones, cuando esta le confesó sus sentimientos. Todos quedaron sorprendidos, porque, según muchos, Jeon JungKook no encajaba en los estándares de los chicos gay. Por un tiempo quisieron molestarle por eso, pero cuando el castaño salió del clóset, varios chico y chicas, se atrevieron a hacer lo mismo, y simplemente el colegio fue mucho más ameno.

—Hey Kook, ¿no presentas?— preguntó un chico alto de cabello castaño, jodidamente atractivo, con una voz tan sensual y unos ojos hechizantes. Park JunHee, ese era su nombre.

—Ah, soy YuChan... Kang YuChan, encantado de conocerlos...— murmuró el menor, separándose un poco del mayor para hacer una reverencia, sintiendo sus mejillas arder cuando pudo percatarse de que todos los ojos estaban sobre ellos.

No le gustaba ser el centro de atención, simplemente cuando supo que Jeon estaba en el campo de fútbol, sus pies se movieron por inercia y sus acciones fueron puramente automáticas.

Por otro lado, unas pequeñas manos se hacían puño y su bonito y tierno rostro cambió completamente cuando su ceño se frunció con dureza, elevó los hombros y los dejó caer en un suspiro, sus pequeños ojos se clavaron en ese intruso y después en su mejor amigo, sintiendo sus ojos llenarse de lágrimas, había venido con la intención de disculparse, aclarar las cosas con él, e ir a comer un poco de helado, también. Pero diablos, ese YuChan arruinó todos planes y no es que odiara al chico por ser tan inoportuno o por poner ese brillo tan hermoso en los ojos de JungKook... solo no lo soportaba.

Y se lamento porque él no era así.

—¿Y qué haces aquí, Kang YuChan?— la voz del pelirosa salió casi en un gruñido, acercándose a ambos.

JungKook finalmente recordó que JiMin estaba ahí y cuando pudo virar sus ojos y noto esa expresión tan dolida, tan triste y enojada, se apartó un poco de Kang.

¿Por qué? No lo sabía, solamente sentía que tenía que hacerlo.

—Oh... bueno, voy a estudiar aquí— respondió sonriente viendo a Jeon con atención, mordiendo con suavidad sus labios- Sorpresa, JungKooki..

—JungKook. Su puto nombre es JungKook, no JungKookie.

Todos en el campo abrieron los ojos en sorpresa, comenzando a murmurar sorprendidos, ¿Park JiMin había dicho una grosería en voz alta sin siquiera sonrojarse?

NaeYeon rodó los ojos ante la escenita que su novio le estaba haciendo a su mejor amigo, le observó con una ceja levantada y una expresión de incredulidad, pero el pelirosa ni siquera le miraba, estaba más entretenido en asesinar con la mirada al chico nuevo y al parecer, muy allegado a Jeon.

—JiMin...— el castaño fue el primero en hablar, viéndole tan sorprendido, pero no supo que más decir después de eso.

JiMin estaba apunto de romper en llanto, lo conocía tan bien que la manera en que su cuerpo estaba temblando y el brillo en sus ojos por las lágrimas retenidas, fueron las señales perfectas.

Y un sentimiento de culpa le invadió de pronto.

—JungKookie, ¿quién es él?— preguntó en un susurro el pelinegro, viéndo al pequeño rosado frente a él.

Pero no recibió respuesta, y miro confundido al mayor.

—Respóndele Jeon, ¿quién soy yo?

JungKook quiso abrazarle con fuerza, llevárselo de ahí y prepararle chocolate caliente, mientras le cantaba con cariño esperando a que sus lágrimas cesaran. JiMin ya estaba lagrimeando y supo que jamás tuvo que permitir que esto llegara a más.

—Mi mejor amigo— respondió.

Pero no fue una respuesta a Chan, ni a todos aquellos que parecía que no se irían de ahí hasta que la escena terminara, no. Fue una respuesta para JiMin, pero sobre todo para él, eso era el pelirosa, su mejor amigo y tenía que grabárselo en la cabeza, tenía que quedarle claro lo que ya sabía.

—Oh, bueno...

JiMin interrumpió lo que el chico nuevo tenía para decir cuando pasó entre ambos con las lagrimas bajando por sus mejillas.

—¡JiMin!— estaba apunto de correr tras de él pero una mano lo detuvo.

—Déjalo, Jeon. Yo me encargo, estas muy ocupado ahora.

Aquella voz femenina le hizo apretar la mandíbula con fuerza y por primera vez vio a la castaña con furia, y de no ser porque tenía unos ideales muy marcados, la habría empujado con fuerza para ir tras de su mejor amigo.

Pero no pudo, simplemente dejó que la chica se fuera, mientras él se quedaba ahí, de pie, sin saber qué sentir, qué decir o cómo actuar.

- Dannaé.