Capítulo diez.
─Las frías montañas del este. Un lugar lleno de incontables especies vivas y paisajes hermosos. Único lugar donde el cuerpo de sobrevivientes de la ciudad podía acudir en caso de falta de agua, como no. Cientos de flujos del vital liquido brotan desde las nacientes para esparcir vida por sus riveras pobladas por los gigantes árboles Hyperion. Mismos que estaban a la lejanía de la colina, justo aquel lugar donde se había desatado la carnicería promovida por los insensatos líderes de un cuerpo dedicado al sabotaje y saqueo.
Allí mismo, bajo el ligero sol matutino en pleno amanecer, Matt vuelve a abrir los ojos después de haber tenido un rato de sueño. Como no luchar por volver a despertar? Si su esposa e hijo estaban ahí nuevamente.
Una brisa gélida sacudió la escena arrasando con las hojas más secas que quedaban en las ramas de los arboles cercanos, en ese entonces Lucía nota el movimiento de los párpados de su marido a la distancia. Parecía estar bien, aunque Matt no iba a demostrar debilidad ante nadie, no era su estilo.
Presurosa la mujer mutante se acerca y recuesta en el pecho del castaño mirándole fijamente a los ojos.
Su vista estaba nublada, era como si estuviera mirando a varias personas... Pero con el pasar de los segundos ese síntoma fue desapareciendo, lo único que quedaba era el fuerte dolor de cabeza y costillas que en vez de de desaparecer se hacía cada vez mas notable, sin embargo, Matt no demostraba nada. Lo que le interesaba era quedarse ahí hipnotizado por los ojos achinados de color azul celeste de su mujer que daban la sensación de iluminarse ligeramente haciéndose ver de un color más intenso. Quien a pesar de tener cambios en la cabeza seguía teniendo esos hermosos ojos que transmitían tanta paz misma que se impregnaba hasta en el entorno. Era como una magia o un poder especial.
Matt: No puedo creerlo... Eres mutante, pero eso simplemente te hace ver mas hermosa... Tu cabello era castaño oscuro y ahora es blanco, tus ojos parecen brillar en un azul mas intenso y tienes un par de orejas de lobo ártico sobre tu cabeza... Hace un momento los rasgos de lobo eran aún más notorios... Hasta ese ultimo momento en que te lanzaste contra ese tipo de cuatro brazos...
Hubo un silencio celestial mientras las miradas chocaban. En ese entonces la escena se tornó lenta, las hojas caían aun mas lento y la brisa comenzó a sacudir el cabello blanco desordenado de la fémina... Era un momento único, cosa que dejaba más que evidente que el amor que se tenían no había dejado de existir, por lo contrario, este creció tanto que les daba la sensación de reventarles en el pecho.
Las lágrimas aparecieron resbalando por las mejillas de ambos y Lucía no tardó en echarse al pronunciado pecho de su esposo para reventar el llanto.
Matt: No tienes idea de cuanto los he extrañado... Han traído con su regreso ese sentimiento de tranquilidad que hace años no sentía.
[...]
El motorizado que acompañaba a Lucía se acercó quitándose la mascara que cubría el joven rostro de ojos azules, este también parecía haber sido contaminado por la radiación, ya que el cabello de este también estaba blanco.
Adolph: Hola papá... Hace tanto que estaba necesitando ver esto. Ver a mamá en ese estado me da la oportunidad de volver a sentir lo mismo que tu estás sintiendo. Es inexplicable.
Arrodillándose luego de caminar solo un par de pasos, el hombre joven también revienta en lágrimas instante después de haber tomado la mano de su padre.
Matt: No se preocupen... Después de esto voy a dedicarme para que no vuelvan a sentir zozobra. Voy a protegerlos casi de manera obsesiva.
Y así pasa una parte importante de la mañana. Mientras tanto el grupo de hombres ilesos cumplieron su trabajo de poner las bombas y mangueras en el agua para extraerla y así llenar la cisterna.
Todo pasó muy seguido, pero no podían darse el lujo de esperar a que suceda algún otro evento que tenga que ver con muertes, así que como pudieron dieron vuelta montaña abajo para regresar al refugio.
En el camino Norman es quien condujo la cisterna, ya que el veterano militar Irving había perdido la vida protegiendo el camión de carga de agua.
Marco: Valió la pena comandante. Cargar el agua para llevar buenas nuevas a la gente no tiene precio. Como usted solía decirlo... Todo por la humanidad.
La mirada del moreno se dirigió al dorado desierto persignándose para despedirse de la memoria del comandante, cuando de repente sucede lo inesperado...
Un sonido ensordecedor retumbó desde el frente. Seguido, una explosión de llamas vivas entre humo llamó la atención de todos los que estaban allí, pero Matt miró al lugar desde donde parece haberse disparado alguna munición de cañón o bazuca... El castaño se queda perplejo en el asiento del copiloto en la cabina del camión cisterna ya que en aquel lugar, entre los escombros estaba la silueta de la persona que habia disparado.
Repentinamente hubo una explosión aún más grande que pintó la zona entera de color rojo.
Matt: ¡P-pero que mierda!
Enseguida, pasando casi entre la nube de humo negro de la explosión se aparece una extraña nave de diseño nunca antes visto que se acerca a velocidad increíble. De pronto, esta comienza a disparar a la caravana de autos de los sobrevivientes.
La voz de Andrew reaparece por el intercomunicador que Matt llevaba aún en la oreja.
Andrew: ¡Maldición! perdí la señal. Estaba tratando de anticipar lo que estaba apunto de suceder, pero los golpes electromagnéticos de los rayos afectaron la comunicación... Hasta ahora fue que pude reconectar...
Matt: ¿Algún pronóstico?
Andrew: No hay nada que vaya a decirte que pueda tranquilizarse... Mejor coge el rifle y abre fuego.
Sin tiempo si quiera de titubear, Matt envuelve el rifle francotirador entre sus dedos y apunta utilizando la mira de largo alcance puesta en la parte media de la parte superior del arma seguido de sacar el torso completo por la ventana y aprieta el gatillo para esperar la carga y salga muy rápido el rayo láser que llega a golpear en el vidrio de la cabina de la nave, pero esta se inmuta y continúa lanzando sus disparos que logran acertar en varios de los autos de los que iban armados.
Por esto Andrew no se precipitó a decir nada ya que sabia bien que lo que venía era desastroso, sin embargo Matt no se doblega así que decidido sale por la ventana de la puerta y saca el hacha luego de llegar al techo de la cabina mientras en camión desciende casi que a toda velocidad, así que manteniendo el equilibrio levanta el arma de filo para coger impulso.
Matt: Puede que hayan otras formas... Pero en este momento no se me ocurre nada. Así que solo debo hacer lo más practico. Es momento de vida o muerte. Así que basta de tanto diálogo interno.
Sin más el hombre de barba suelta el hacha lanzándola contra la aeronave, la misma que logra golpear y hacerle un daño importante.
Viendo por los satélites, Andrew se sorprende al ver en la lectura física en la pantalla, la fuerza que ejerce al mover el torso, cintura y brazo arroja resultados inhumanos. Cualquiera no hubiera podido hacer lo que este hombre estaba haciendo.
Por la fuerza del golpe, el hacha penetra el metal reforzado del exterior de la nave y hace que esta poco a poco se vaya de lado perdiendo el control hasta caer contra la superficie de un edificio caido que mantenía su forma original.
Continuará...
ESTÁS LEYENDO
Al Borde De La Extinción ©
خيال علميEsta historia gira entorno a la vida de Matt Klein, un hombre de treinta años que vive con su esposa Lucía y su hijo de solo dieciséis años, Adolph Klein. Una noche todo se torna extraño y oscuro, una fuerte tormenta sacude los nervios de todos los...