CAPÍTULO 7.

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La noche al fin llegó, el día se había hecho largo y en el estudio de a poco cada abogado dejaba el lugar.

Maricruz: Ya no queda nada, mejor preparo mis cosas para salir.

Maricruz ya estaba lista para irse, solo unos papeles no daban su día como terminado.

Maricruz: Casi lo olvido, los papeles que debería entregarle a la señorita Villalba.

Se encaminó a la oficina de Valentina, tocó la puerta y espero una respuesta.
Valentina miró de modo extraña a su guapo compañero, por que ya no era hora de que alguien estuviera en el estudio.
Por que todos se iban antes que ella, por lo tanto debería ella misma cerrar el edificio.

Valentina: Quien será a esta hora?

José Miguel: Por que esa cara y pregunta?

Valentina: Todos se van antes que yo, soy la encargada de cerrar todo.

José Miguel: No sabía de eso, perdón. Lo mejor sería dejar pasar a quien sea que este del otro lado.

Valentina: Si claro, pase por favor.

La hermosa joven y también muy buena secretaria de Valentina entro a la oficina que compartía con José Miguel.

Maricruz: Disculpe la hora señorita Villalba, pero tengo estos papeles que tengo que entregarle.

Valentina: Muchísimas gracias, ya es hora de que te vayas.
Esta oscuro y hace frío, abrigate.

Jose Miguel que hace unas horas había llegado al lugar, se hizo notar entre la charla de ambas.

José Miguel: Hola Maricruz, veo que no notaste que estoy acá también.

Maricruz: Perdón joven Montesinos, me olvidé que estaba también acá. Gracias por recibirme señorita, es hora de irme.

Valentina miró de reojo a José Miguel por el acto que había hecho, le dio ganas de reírse. ¿Por que quería figurar? A claro el era parte de ese cuarto llamado oficina.

Valentina: Hasta mañana linda, cuídate.

Jose Miguel: Adiós Maricruz.

La joven cerró la puerta y Valentina empezó a guardar sus cosas para poder irse.
José Miguel en cambio se quedó sentado en la silla pensando en ella, en esa mujer que solo unos metros de distancia lo privaba de tenerla en sus brazos.

Valentina: Montesinos, José Miguel.

Valentina empezó a aplaudir haciendo que el hombre perdido en ella reaccioné de una vez.

José Miguel: Perdón me quedé perdido en mi pensar, mejor agarro mis cosas y nos vamos.

Valentina: En que pensabas? Hasta estabas sonriente JAJAJAJAJA

José Miguel miró maravillado a Valentina, solo por el hecho de escucharla reír. Después de un día duro lleno de emociones, el la hizo sonreír.

José Miguel: En serio? Estaba feliz en aquel pensar, seguro por que estaba con la persona que más quiero en este mundo.

Valentina al oír eso se sintió angustiada, por el hecho de saber que el tenía alguien que lo hacía feliz y no era ella.

Valentina: Es lindo pensar en la felicidad que una persona le genera, pero bueno dejemos eso y vamos que se nos hace tarde.

José Miguel no se iba a dar por vencido, entonces decidió borrar esa cara de lamento en ella por una sonrisa.

🦋 CUANDO LLEGA EL AMOR 🦋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora