capitulo 13

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Lía

Tapándose con una almohada, dejando salir su llanto, al ver cómo Michael se marchaba por la ventana dejándola sola con Claudia, Lía escucha unos pasos provocados por unos tacones altos, y al levantar su mirada se topa con los ojos oscuros de Claudia

-porque amas tanto a Michael, el solo te abandono en un sucio convento Lía, te abandono como un asqueroso perro vagabundo, mientras a mi- embozado una sonrisa de lado y hablo -a mi me follo como nunca, y no dudo que haya sido su primera vez así que quédate como la sumisa moja que no disfruta de nada y vete de aquí, porque no tienes lugar en esta casa - Claudia se burló en mi cara, y eso fue la gota que derramó el vaso, había soportado demasiado

Mientras Claudia seguía carcajeandose, le pegue un puñetazo en su cara haciendo que está galleta al suelo por el impacto

-eso es ser sumisa para ti- la tomo de la coleta de caballo, y la arrastró hasta llegar a la cocina, Claudia solo podía gritar de dolor y rasgullarme

-deja de moverte o lo harás más difícil perra- la azote contra la mesa, mire a barios lados y pude visualizar un filosos cuchillo en la estufa

Tome aquel cuchillo, lamiendo el filo sacando un poco de sangre de mi lengua, saboreo mi propio néctar, Claudia a gatas,  intenta escapar, con sangre en su nariz hizo que.
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Un gran sentimiento de clavarle el cuchillo se apoderado mi
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Clavo el arma en la palma de la mano de Claudia, ella se retuerce de dolor agonizando

-aunque sea una monja se defenderme de zorras como tú-

†EL HIJO DEL DIABLO†Donde viven las historias. Descúbrelo ahora