𝚌𝚘𝚖𝚎, 𝚋𝚎 𝚖𝚢 𝚝𝚎𝚊𝚌𝚑𝚎𝚛 •𝘀𝗮𝗻𝘄𝗼𝗼•

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Los suspiros de San se oían por todo el auto. Apretó el volante para abstenerse de sujetar la cabeza de Wooyoung, aunque tuviera muchas ganas de hacerlo.

El chico estaba haciendo un buen trabajo. No, el chico estaba haciendo el mejor de los trabajos.

Sentía que en cualquier momento pasaría, pero de repente, Wooyoung comenzó a reír y no le quedó de otra que levantarse o ahogarse con esa cosa.

El pelinegro se tiro contra el respaldo de su propio asiento sin dejar de reír.
No lo negaría, verlo reírse mientras le hacía la mamada, hizo sentir peor a San.

ㅡ ¿Por qué la risa? ¿Es, es algo mal conmigo? ㅡ preguntó con temor a lo que le diría ¿quizás muy pequeña? ㅡ ¿Es por el tamaño de mi...?

Wooyoung paró y lo miró ㅡ ¿Por tu pene? ¡Claro que no! No es enorme, pero tienes una verga muy bonita. ㅡ San se sonrojó, ¿por qué tenía que decir eso tan tiernamente?

La imagen era extraña, él colorado y con el pene parado.

ㅡ Uhm, ¿entonces?

ㅡ Es que me invitaste a tu casa para almorzar, pero parece que me adelanté. ㅡ volvió a reír.

ㅡ Uish, Wooyoung. Perdón por decir esto, pero, ¿podrías continuar? Esto está doliendo como la mierda.

Observó los ojitos brillosos de San y su rostro avergonzado, pero que aún así le pidiera eso, sólo le dio más ganas de seguir.
Complacer a San se le hacía tan...

Nuevamente, se inclinó sobre su parte baja. Antes de proseguir, dijo: ㅡ No te preocupes por el tamaño, lo que importa es que quepa perfectamente en mi boca.

Siseó cuando su miembro fue cubierto de nuevo ㅡ Tan romántico ㅡ fue sarcástico.

[…]