[Por:🔆Yes]
Un escritor, un matrimonio, un empresario y un bebé.
¿Cómo terminara todo?
🍼[Pareja principal: Verkwan]🍼
👨🏻🍼[Mención de otras: JiCheol, Seokmuel]👨🏻🍼
👶🏻[Omegaverse]👶🏻
🧸[Historia Pausada hasta nuevo aviso]🧸
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Era un lindo lunes por la mañana, hacia un poco de frío y aquella junta donde uno de los directivos exponía sobre el nuevo lanzamiento de SeungKwan tenía concentrado a todo el equipo.
Bueno, todos menos el propio escritor, quien se encontraba perdido en sus pensamientos con una sonrisa tonta por pensar en las cosas que el futuro le traería con un bebé ya casi asegurado.
Pero quien se encargó de bajarlo de las nubes fue su mejor amigo y manager Seokmin, quien con una patada poco discreta debajo de la mesa, hizo que el menor casi callera.
Seungkwan estaba a punto de reclamarle, pero el castaño se le adelantó, señalándole que prestara atención a la junta, y de mala gana tuvo que aceptar.
Estuvo casi lo restante de la reunión con un mohín en sus labios, algo extraño de él, ya que normalmente se muestra interesado cuando se trata de uno de sus proyectos, siendo su querido director publicitario el que más notaria este comportamiento impropio del escritor.
Así, sin darse cuenta, la junta había acabado muy rápido, o simplemente no tuvo noción del tiempo.
Seokmin se había ido temprano ya que le había prometido ir al zoológico con Sangmin, y considerando su apretada agenda, Seungkwan no era quien, para retenerlo, aunque eso si, con la promesa de compartirle fotos del pequeño jugando con los animales.
El pelirrojo había tomado el camino a la salida, pero su querido hyung lo detuvo antes de cumplir los diez pasos.
—Seungkwan— llamó —¿Te encuentras bien? Te noté bastante distraído en la junta, y eso que hablamos de ti.
—Oh, JiHoon hyung— dijo al reconocer al beta —no se preocupe, en realidad diría que estoy bastante bien.
—¿Seguro?
—Le puedo asegurar que si— Seungkwan volteó a los lados, para después acercarse a JiHoon como si le estuviera por contar un secreto nacional —en realidad, estoy por fin embarazado— dijo sin evitar mostrar su emoción.
Pero JiHoon inmediatamente ante aquella declaración ensanchó los ojos sorprendido —Seungkwan, estas cosas se avisan con tiempo— de su bolsa interior del saco agarró su teléfono —la policía ya se ha de estar movilizando, tendré que mover mis contactos para que no quedes tan afectado...
—Hyung— llamó SeungKwan siendo ignorado completamente.
—Sabía que un día esto pasaría, le dije al jefe que debíamos tener un plan de respaldo, pero no me hizo caso— seguía con el teléfono en a oreja esperando a que atendieran sus llamadas.
—Hyung— nuevamente intentó llamar su atención, pero como ya vimos no funcionaba.
—Y justo tenía que ser antes del lanzamiento de tu libro, pero es que a mi solo me pasan desgracias, yo ya no sé com-
