CORAZONES UNIDOS (PT.2)

482 28 6
                                    

Pues va a ser que actualice hoy, espero que lo disfruten. Es la segunda parte de Guerra entre corazones.Es algo corto así que sorry dadme más ideas en los comentarios que solo necesito una idea y solucionado.

⚔⚔⚔

Camine por los pasillos de la mansión
hasta llegar a los amplios ventanales, que dejaban ver el exterior. Un amplio y frondoso bosque de pinos cubierto por la sombra de la nieve. Un año aquí y todavía no me acostumbraba al lugar. Suspire dejando escapar una nube de aire frío y camine hacia la sala de entrenamiento. Mis oídos podían captar el sonido de las armas chocando y los gritos de tres hombres que se le hacían familiares.

Entre en la sala encontrándome con Izuku, Katsuki y Shoto vestidos en un solo pantalón de estampado militar y unas botas largas de color negro—. ¿No tenéis frío?—. Pregunte alzando la voz.

—Oh Momo—. Se acercó Izuku a trote ligero—. Se te hecha en falta—. Me abrazo.

—Estas sudando—. Respondí en una sonrisa.

—Ay perdón—. Se alejó de mi acariciándose la nuca.

Mientras hablaba con Deku, pude ver por el rabillo del ojo como los otros dos se aproximaban hasta llegar a nuestra posición.

—No te distraigas con mierdas, Deku—. Dijo Bakugo propinándole una colleja a Deku.

—¿Yo soy una distracción?—. Pregunte fingiendo inocencia.

—Eres una perra astuta—. Soltó Bakugo en una sonrisa que mostraba sus dientes.

—Contén tus malas palabras Bakugo, le estás hablando a mi esposa—. Soltó Shoto posicionándose a mi derecha.

—Esta bien, esta bien… mitad y mitad, pero tengo que irme la base necesita refuerzos y quien mejor que el hombre más fuerte de este ejército—. Dijo Bakugo cogiendo su camiseta y dirigiéndose a la puerta—. Vamos cabeza brócoli o te voy a dar clases de liderazgo cobarde.

—Kachan tenemos la misma posición en el ejército—. Replico Deku siguiéndole.

—No me repliques—. Salió por la puerta desapareciendo completamente seguido por un Deku algo confundido.

—¿Momo que opinas de lo que te dije ayer?—. Se colocó la camiseta.

—Que es realmente sospechoso, así que no deberías bajar las defensas fronterizas—. Respondí.

—Estamos de acuerdo por primera vez en todo el año—. Suspiró—. Es un avance.

—Eso crees tu—. Respondí lanzándole una toalla y dirigiéndome al salón de banquetes.


⚔⚔⚔


Me senté en la silla y me empecé a servir algunos filetes y verduras, mientras los sirvientes posaban los platos sobre la mesa. No tarde en ver las reverencias de la servidumbre ante la llegada de mi “marido"  que se sentó al otro lado de la mesa—. Dejadnos solos—. Ordeno.

En cuestión de minutos el comedor estaba vacío y solo podía escucharse el sonido de mis cubiertos al comer .

—Momo—. Hablo.

—Momo—. Repitió.

Pero seguí sin responderle manteniendo mi atención en la comida, de repente vi por el rabillo del ojo como un cuchillo pasaba sin rozarme siquiera. Una advertencia—. ¿ Que esposo?—. Respondí con un tono de burla.

—¿Tengo que recordarte cual es tu posición ahora mismo querida?—. Dijo con un todo de malicia.

—La muerte sería más agradable que esto para mi.

—Sabes que tu vida no es la única que está en juego si actúas de manera tan infantil—. Contraatacó.

—Vale, ¿Qué deseas de mi?—. Pregunte otra vez.

—Me iré al frente en una semana—. Sorbió de su copa de vino.

Alce la mirada sorprendida ante el y me levante arrastrando mi silla hasta posicionarse delante de el y tomar su rostro—. ¿Por qué?

—Si no actuamos nos rodearán y si lo logran, no podré cumplir mi promesa contigo y con tu gente—. Me miró con un brillo diferente en sus ojos de distintos colores, especiales y hermosos a mi parecer.

Creo que fue un impulso o una especie de situación loca, pero le bese. Agarre sus cabellos bicolores y estampe mis labios contra los suyos. Eran adictivos y atrapantes para mi, le odiaba, le detestaba por el simple hecho de ser la persona que más daño me ha hecho y no poder evitar tener estos sentimientos hacia el. Podría decir que me siento como una pecadora por provocar esto pero estaría mintiendo.
Me aleje de el por la falta de aire, pero el se levantó y me observo para luego lamerse los labios lenta y seductora mente. Aparto los platos de la mesa y me agarro de las caderas sentándome en ella. Agarro mis muñecas con una sola mano y con la otra jugueteo con mis pechos cubiertos por la camisa blanca. Sus labios succionar y besaron de “mil” formas diferentes. Conseguí liberar una de mis manos para poder agarrar su chaqueta militar llena de medallas de valor, aquello por alguna razón me hacía arder más en las llamas del deseo.

Cuando mis labios iban a volver a ser tomados unos toques en la puerta nos detuvieron a los dos—. General Todoroki—. Hablo un hombre detrás de la puerta.

Rápidamente nos re incorporamos y me arreglé la camisa para luego dirigirme a la puerta.

La abrí y miré al soldado todavía sonrojada y seguí hacia delante para desaparecer por el pasillo de la mansión . Debio haber escuchado algo, que vergüenza—. Pensé.

⚔⚔⚔

⚔⚔⚔

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ONE-SHOTS DE TODOMOMODonde viven las historias. Descúbrelo ahora