Delta ❤︎ hyunsung.

11

Este día se sentía muy triste para Hyunjin. Voltea al asiento que estaba a su lado. Estaba vacío.

Así es, Jisung ese día había faltado al colegio.

Hyunjin y su delta se sentían desanimados y sin ganas de poner atención a clases. El pequeño Han se había vuelto su felicidad, su simple presencia les hacía sentir mejor.

En el receso ni siquiera abrió su topper con el almuerzo que le había traído al omega.

— ¿Crees que es una buena idea? — le susurra Changbin a Felix mientras ambos observaban al delta solitario.

— ¿Acaso no te da pena verlo? Además, tal vez esto pueda ayudar a Sung. — dice antes de entrar al salón de clases encontrándose solo al delta, el cual soltaba un leve aroma a tristeza. A pesar de que era leve, hacía que su cabeza doliera.

Claramente su aroma le desagradaba demasiado.

— Hyunjin — llama el omega haciendo que el nombrado le mirara de la peor manera, el no saber nada de su omega lo había puesto de mal humor. — iré directo al punto porque tú aroma me está molestando.

Hyunjin no dijo nada, por lo que Lee prosiguió hablando.

— Sung no asistió hoy por qué no se sentía bien.

— ¿Qué tiene? ¿Está enfermo? ¿Se lastimó? — inmediatamente el delta se puso de pie, comenzado ahora a desprender un fuerte aroma a preocupación. Tal aroma hacía que Felix comenzara a sentir náuseas.

Mientras tanto Changbin estaba más que listo para atacar en caso de que el delta le quisiera hacer algo al omega.

— Nada de eso, por favor cálmate tú aroma me está provocando náuseas.

Hwang trató de tranquilizarse pero, no podía evitar preocuparse por el bello omega.

— ¿Quieres ir a verlo? — Hyunjin sin pensarlo dos veces asintió ante a la pregunta. — Bien, entonces ve guardando tus cosas y cuando acabe el receso sales de aquí, nunca hay nadie en la entrada del colegio así que no tendrás problemas cuando salgas. Han me dijo que su padre lo había dejado solo, así que no creo que tengas problemas al estar ahí. Pero tienes que irte antes de las 4 de la tarde de su casa, a esa hora llega su papá y no le gustará verte.

Después de escuchar eso, el joven Hwang guardó sus cosas en su mochila e inmediatamente salió corriendo del salón. Su delta y él no podían esperar ni un segundo más sin ver a Jisung.

[...]

En la casa de los Han, Jisung se encontraba acostado en su cama. Traía puesta la chamarra que el delta le había dado cuando fue a hacer su tarea a su casa.

El aroma del delta seguía impregnado en aquella chamarra.

Lo quería tener junto con él.

Jisung no tenía ganas de nada, su pancita dolía mucho por los cólicos.

El omega a penas iba a intentar dormir cuando su puerta fue tocada. El pequeño Han no quería levantarse pero la persona no dejaba de insistir.

Cuando llegó frente a la puerta, pudo sentir un aroma a limón que claramente le gustaba.

— ¿Será él? — Jisung y su omega preguntaron al mismo tiempo. Por lo que no esperó más y abrió su puerta, encontrándose a un Hyunjin agitado.

— ¿Sung? ¿Te encuentra- — El delta no pudo hablar más ya que el omega se abalanzó hacia él, abrazándolo. Sus piernas se habían enredado en la cintura del contrario, mientras que sus brazos abrazaban su cuello y su pequeño rostro iba directo a su hombro izquierdo, escondiéndose en él.