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| Especial 01 |
Los altos tacones negros de la inmortal resonaban en los pasillos del segundo piso, observando a su costado como sus ayudantes cambiaban las cortinas de los grandes ventanales del palacio, da un asentimiento aprobando la nueva altura, girando nuevamente sobre sus pies continuando su camino sintiendo a los minutos la presencia de los personas tras ella.
—¿Si?—pregunta sin voltear a verlos ni detenerse.
— Esta quedando perfecto, hay demasiada iluminación—dice Jasper caminando tras ella— aunque debo confesar que sigo acostumbrado a la oscuridad de Rumania.
— Marena recomendó que sean de ese color, así disminuiremos el consumo de luz, está trabajando en nuevas energías. Tiene muy buenos proyectos para ambos reinos.
—No quiero ser grosero pero necesito hacer una pregunta—la voz de Jasper se hace presente nuevamente—Han pasado más de dos años ¿Marena será coronada como reina, a pesar de no ser proveniente de una familia real?
— Aquí no tenemos ese tipo de discriminación Jasper, si está lista para recibir ese título lo hará, de lo contrario Oliver dijo que retrasará su coronación hasta que ella esté preparada—se detiene frente a las puertas de su estudio—No podemos elegir a nuestra familia, no me parece justo bajar su rango por ese detalle, aquí tu reconocimiento y título depende de tí—da una sonrisa ingresando a su estudio.
—¿Que tal las reglas de mi esposa?—Klaus golpea su hombro con una sonrisa llena de orgullo.
—Williams—advierte sin voltear a verlo.
—Bueno... Futura esposa—la reina pone los ojos en blanco acercándose a su escritorio, toma asiento dejando ambas manos en la mesa, dejando a la vista su reluciente anillo de compromiso.
— ¿Han decidido la fecha?—el rubio toma asiento frente a la reina acomodando su saco.
— Aún no, tengo cinco años como reina y aún así hay demasiadas cosas por aquí, tengo un ejecutivo egresado de la universidad con un proyecto muy atractivo de comercio—Klaus se sienta junto a ella entregándole un sobre rojo.
Si, compartían escritorio, los reyes de Francia solían pasar algunas tardes encerrados en su estudio buscando que mejoras hacer al país, con música de fondo.
—Sin contar que Marena tiene grandes planes, estamos en proceso de aprobación para un nuevo hospital entre otras cosas, hay demasiado trabajo—termina Klaus viendo a su pareja asentir lentamente sin apartar la mirada de las hojas blancas.
